Los mercados esperan inquietos a la reunión de la Reserva Federal de EEUU que comienza este martes, pero que se resolverá el miércoles. Los inversores descartan ya una subida de tipos del 0,5%, pero el miedo llega con que el encuentro sea de halcones (hawkish) es decir de una política monetaria más agresiva. Así que el mercado teme que la Fed decida hacer una subida mayor que la de 50 puntos básicos que ya se descarta.

El temor llega porque la inflación de EEUU ha vuelto a marcar un récord de 40 años al cerrar mayo en el 8,6%, tres décimas más que en el mes anterior. Este dato podría dar alas a la Fed para un alza más agresiva, que hace que los mercados reaccionen con fuertes caídas por miedo a una recesión económica. Para muestra la jornada de este lunes, que el S&P 500 marcó nuevos mínimos anuales y con el Dow Jones y el Nasdaq cayendo en 2,3% y un 3,8%, respectivamente.

Si bien la expectativa de consenso para el aumento de la tasa de interés del banco central de Estados Unidos en la reunión de esta semana es de medio punto porcentual, los datos del IPC más altos de lo esperado el viernes pasado provocaron que dos bancos, Barclays y Jefferies, revisaran sus apuestas a un alza potencial de 75 puntos básicos.

Allison Boxer, economista de Pimco, asegura que esta reunión de la Fed va a ser “de halcones” y esperan que el presidente del organismo, Jerome Powell, sea “mucho más serio” en cuanto a hacer lo que sea necesario para luchar contra la inflación que lo hizo en mayo. Boxer espera una subida de 50 puntos básicos, para luego subir 75 puntos en julio, pero matiza que “si el mercado valora un mayor riesgo de 75 puntos básicos en los próximos días, creemos que esto dará a la Fed la oportunidad de ser más agresiva el miércoles”.

También espera que Powell deje claro en la rueda de prensa posterior a la reunión que va a haber subidas más fuertes y que no se va a detener en septiembre. Sin embargo, apunta que lo más seguro es que haya una revisión del crecimiento del PIB a la baja, “porque el endurecimiento excesivo es un riesgo para el crecimiento, que ya se encuentra en una situación de estancamiento”.

Los expertos de Bank of America se muestran seguros de que la subida de tipos de este miércoles de la Fed será de 50 puntos básicos, tal y como ya había comunicado Powell. Para ellos, lo importante de este encuentro son los cambios en el Resumen de Proyecciones Económicas (SEP en sus siglas en inglés). Consideran que los tipos se situarán en el 2,5-2,75% a finalizar el año y esperan revisiones negativas en el crecimiento y positivas en la inflación.

En la misma línea se sitúan los expertos de Julius Baer. A pesar de la subida de los precios en mayo, señalan que la inflación subyacente (la que deja fuera el precio de la energía) aún no está en máximos, por lo que consideran que estos datos confirman su opinión de que la Fed subirá los tipos de interés en 50 puntos básicos en junio y julio, y han hecho que el dólar se fortalezca, ya que los mercados han reaccionado con un periodo de aversión al riesgo.

Sin embargo, David Alexander Meier, economista de Julius Baer, explica que la especulación sobre una subida más rápida de los tipos de interés hizo que los rendimientos del Tesoro estadounidense subieran en el tramo corto. El rendimiento del bono a 2 años pasó del 2,64% del 1 de junio al 3,15% el lunes por la mañana.

El rendimiento a 2 años, que sirve como indicador de las expectativas del mercado sobre la política de los bancos centrales, ha superado el nivel psicológicamente importante del 3% por primera vez desde la Gran Crisis Financiera de 2008/2009. “Es justo decir que el mercado se posiciona para una declaración muy dura del Comité de la Fed, lo que limita las bajadas a corto plazo”, apunta Meier.