Los diferentes actores de la industria de la aviación se han unido con un propósito común: impulsar el uso de combustibles sostenibles que permitan reducir las emisiones de gases de efecto invernadero del sector y para convertir a España en un referente de su fabricación.

Aerolíneas, operadores y fabricantes, además del sector académico y algunas ONG han puesto en marcha este lunes la Alianza para la Sostenibilidad del Transporte Aéreo en España (AST) que pretende promover el desarrollo de una aviación sostenible en todos los ámbitos.

El Consejo Rector estará formado por la patronal de las aerolíneas, ALA; los fabricantes Airbus y Boeing; el gestor aeroportuario Aena; el gestor de navegación Enaire; y la Agencia Europea de Seguridad Aérea (AESA). También están las aerolíneas Air Europa, Air Nostrum, Binter, Iberia y Vueling. Asimismo, cuenta con la CEOE, Ecodes, AOP, Exolum, Iata, Senasa, Tedae, Transport and Environment y la Universidad Politécnica de Madrid (UPM).

Durante la sesión celebrada en la sede de Airbus en Getafe, se han creado tres grupos de trabajo que abordarán diferentes retos en el ámbito de las operaciones (liderado por Aena y Enaire), SAF (AOP) y mecanismos de mercado regulatorio (ALA). Además de impulsar la ruta para la descarbonización, la Alianza tiene el afán de "identificar e implantar nuevas tecnologías y procesos innovadores de forma racional y ordenada para garantizar la sostenibilidad del sector aéreo a largo plazo".

El objetivo, aducen desde ALA, es "dar una respuesta transversal que contribuya a avanzar en esta transición hacia un modo de transporte más sostenible con el que está comprometido el sector aéreo". A partir de ahora, la patronal de las aerolíneas dice estar abierta a "sumar más voces que ayuden en este objetivo y a contar con la Administración para lograr la necesaria colaboración público-privada para dar respuesta a este reto".

Entre otras cosas, quieren favorecer la producción a gran escala de combustibles sostenibles de aviación (SAF) en España y hacer de nuestro país un país de referencia en el desarrollo de las nuevas tecnologías en el sector de la aviación. Asimismo, pretenden promover el desarrollo de iniciativas que garanticen la circularidad de los residuos generados por el sector.

La Alianza busca también ofrecer tecnologías disruptivas así como otras alternativas bajas en carbono y proyectos de economía circular. También fomentar la colaboración público privada para favorecer la I+D+i y acelerar el desarrollo de aeronaves bajas en carbono.

El presidente de ALA, Javier Gándara, ha recalcado que la Alianza responde al compromiso del sector aéreo con su progresiva descarbonización. "Esta Alianza permitirá encontrar la mejor ruta para la transición del sector aéreo con la que estamos comprometidos, desde el diálogo y la colaboración, sumando fuerzas para garantizar la sostenibilidad de la aviación en el futuro desde esa triple perspectiva: medioambiental, económico y social", ha afirmado.

El conocido como SAF es entre dos y cuatro veces más caro que el queroseno, que a su vez supone el 30% de los costes de las aerolíneas. Pero hasta que no haya suficiente producción, como transición hacia el hidrógeno, los precios no bajarán y las aerolíneas no podrán incrementar su uso como quiere Bruselas.

"En Airbus tenemos un propósito claro: ser pioneros de un sector aeroespacial sostenible para un mundo seguro y unido. Esta es la ambición que nos mueve en todo lo que hacemos y desarrollamos. Pero está claro que no podemos recorrer este camino en solitario, es necesario unir nuestras fuerzas a las de todo el sector y la creación de la Alianza es un hito clave en este recorrido", ha destacado el presidente de aviones comerciales de Airbus en España, Ricardo Rojas.