El plantón de los grandes operadores internacionales en el concurso de Aena para las tiendas de duty free de los aeropuertos de Barajas y El Prat está penalizando en bolsa al gestor de infraestructuras que preside Maurici Lucena.

El concurso para las tiendas libres de impuestos en los dos aeropuertos más grandes de España ha quedado desierto después de que no se presentase ninguna oferta. Se trata de un macroconcurso con el que el gestor aeroportuario pretendía romper el monopolio del que goza el suizo Dufry.

El mercado ha reaccionado al hecho comunicado durante la tarde del miércoles por la propia compañía, que tendrá ahora que poner en marcha otra licitación para intentar atraer candidatos a los dos lotes que representan casi la mitad de los ingresos previstos por un contrato valorado en 18.000 millones de euros.

Los distintos operadores sin han mostrado interés por los lotes de aeropuertos de Andalucía y Levante (lote 2); el de Canarias (lote 3); el de Baleares (lote 5) y el del Norte de España (lote 6).

Las acciones de la compañía han llegado a caer hasta los 139,3 euros, rozando la bajada del 6% respecto al cierre del miércoles cuando acabaron en 147,85 euros. Pese al batacazo, los títulos de la compañía semipública acumulan una revalorización del 24% en lo que va de año.

Hasta que se licite el nuevo contrato, Aena podrá activar la cláusula contractual por la que los actuales inquilinos pueden continuar con la explotación de las tiendas hasta la nueva adjudicación. Consiste en una prórroga de un máximo de seis meses a contar desde la fecha de la finalización de los contratos actualmente vigentes, que caducan el próximo 31 de octubre.

Hace unos meses, Aena aseguró que 13 operadores había mostrado su interés por el contrato. Los europeos Heinemann, Smartseller, Lagardère, Aer Rianta, Dufry, Canariensis y DF; los asiáticos Bahrein Duty Free, Hotel Shilla (Corea), GMR (India), Setur (Turquía) y China Duty Free; y la estadounidense UETA.

"Es la primera vez que gigantes de Asia y América muestran su interés en entrar en los aeropuertos españoles, lo que pone de relieve la expectación suscitada por el concurso de Aena, el mayor del mundo por volumen de negocio", presumía la empresa.