La nueva oferta de empleo público que aprobó el Gobierno el pasado martes comprende 39.500 plazas para la Administración General del Estado (AGE), la Administración de Justicia, el Cuerpo Nacional de Policía, la Guardia Civil y las Fuerzas Armadas. El Ejecutivo ha defendido que se trata de la mayor oferta de toda la historia de España, aunque esta afirmación es matizable, puesto que las plazas a sacar dependen en gran medida del número de personas que causen baja -que se jubilen, fallezcan o abandonen sus puestos- y también porque esta vez Función Pública ha sumado los puestos de diferentes cuerpos, lo que en resumen termina llevando a comparar las cifras de este año, que suman peras y manzanas, con las del pasado, donde se contabilizaron solo peras.

En cambio, si se contabilizan todas las plazas del año pasado, obtenemos que se superaron los 44.000 puestos. Aun así, lo normal es que estas cifras aumenten año a año puesto que la edad media del personal público está en los 51,32 años, lo que lleva a estimar que en 10 años se habrá jubilado el 58% de la plantilla actual. Pero lo fundamental para todo aquel que esté interesado en presentarse a algunas de estas plazas es conocer exactamente qué se ofrece, dónde y cuándo podrá acceder a estos puestos. Vamos a tratar de dar respuesta a estas preguntas de la forma más gráfica posible.

Los puestos libres y los de promoción interna

Lo principal y que más interesa a todos aquellos que hoy por hoy están fuera del sector público es que de esas 39.574 plazas, pueden optar a 27.246. Esas son las que se conocen como plazas para el turno libre, y parte de ellas son para reposición de efectivos -esto es, sustituir a personas que se han jubilado, que han fallecido o que han decidido dejar su puesto de trabajo, tasa que en teoría este año es del 110%- y el resto son empleo neto, es decir, puestos de trabajo que se crean de cero para aumentar el número de efectivos que hoy por hoy se dedican al sector público. Aparte, hay 12.328 plazas destinadas a la promoción interna, es decir, a funcionarios que quieren mejorar su situación en la Administración.

Una de las particularidades de la oferta de este año es que introduce, y así aparece en el real decreto que se publicó este miércoles y que regula la OEP, es que esas plazas deben convocarse antes de que termine el año, y que cada oposición tiene como tope nueve meses para desarrollarse. Este detalle ha generado suspicacias entre los sindicatos, que critican que cada año se quedan miles de plazas sin cubrir -se desconoce el número exacto, puesto que el Gobierno no lo proporciona-.

Eso que permite que cada año parezca que se aprueba una enorme oferta de empleo, aunque pueden ser plazas que después nunca llegan a cubrirse por lo mucho que tardan en convocarse las oposiciones, que después unido al periodo que tarda en sacarse la plaza incluso imposibilita que esa persona se incorpore, porque ya ha superado el periodo máximo que marca la ley. Es una de las razones por las que, como ya publicó este periódico, Comisiones Obreras no ha firmado el acuerdo de la OEP que sí han ratificado los sindicatos CSIF y UGT.

¿Qué plazas se han ofertado?

Las plazas que se han dado a conocer esta semana, junto con las de las Fuerzas Armadas que se aprobaron y anunciaron en junio, se distribuyen por cuerpos de la siguiente manera. Hay que tener en cuenta que las cifras incluyen los nuevos puestos, los de turno libre y los de reposición de efectivos, así como los de promoción interna. También hay que tener en mente que las del Cuerpo Nacional de Policía (2.833) y Guardia Civil (2.875), además de las de las Fuerzas Armadas (2.141) se contabilizan aparte.

Asimismo hay que tener en mente que se necesitan todo tipo de profesionales, tal y como puede consultarse en el propio real decreto. Se necesitan profesores de secundaria y de formación profesional, archiveros, ingenieros y arquitectos, estadísticos, inspectores de Hacienda, médicos, funcionarios para el Instituto Cervantes, el Museo del Prado y el Reina Sofía. Otros profesionales que se requieren son meteorólogos, traductores e intérpretes, científicos, farmacéuticos y astrónomos. Para saber exactamente qué puestos busca cubrir cada cuerpo, y si son de nueva entrada o de promoción interna, hay que consultar el real decreto.

Las plazas para cubrir "plantillas deficitarias"

Uno de los objetivos de la OEP, y así reza el real decreto, es "a atender las demandas de urgencia en sectores que son, en estos momentos, deficitarios" y otro es potenciar el proceso de transformación digital en el que se encuentra inmersa la administración. Para conseguir lo primero, destacan un buen puñado de plazas en las gestoras de la Seguridad Social, en la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el Museo Nacional del Prado y el Sistema Portuario estatal. Además, de cara a cumplir con el objetivo de que la tasa de temporalidad no supere el 8% se han aprobado plazas para gestionar el ingreso mínimo vital.

La legislatura termina con más de 180.000 puestos creados

El Gobierno está presumiendo, a las puertas de las elecciones generales, de haber creado un 189% más de empleo público que durante el mandato anterior, el de Mariano Rajoy. Para decir esto se apoya en que entre 2012 y 2017 se ofertaron 63.394 puestos en el sector público, mientras que de 2018 a 2023 se han ofertado 183.443 plazas. "La oferta de plazas ordinaria durante el Gobierno de Pedro Sánchez triplica la efectuada durante el lustro anterior", aseguran en Función Pública.