Las energéticas vuelven a la carga. La última en subirse al carro de las amenazas al Gobierno ha sido Repsol. Pocos directivos son tan claros como lo es el presidente de la petrolera, Antonio Brufau, quien aseguró este jueves que corren peligro sus inversiones en España de continuar la incertidumbre.

Pero antes que Repsol, las otras energéticas importantes como Endesa, Iberdrola o Naturgy han avisado de los problemas que puede ocasionar si el Ejecutivo de Pedro Sánchez no cambia de postura respecto a los gravámenes que están obligadas a pagar las empresas de este sector.

“Son inversiones que si no se hacen en un marco de estabilidad y con un marco fiscal atractivo, ni mejor ni peor, competitivo con respecto a las regiones próximas a nosotros, no se harán", dijo Brufau en un encuentro sobre el hidrógeno verde en España. Precisamente, las inversiones de esta materia prima son las que corren peligro y la empresa podría mirar a Portugal o Francia, donde el marco jurídico es más concreto y conciso.

“Si tenemos un impuesto para producir hidrógeno que no tienen Francia o Portugal, seguramente nuestra decisión será irnos a Portugal o Francia”, aseguró el presidente de Repsol, una de las empresas energéticas que más impuestos tributa en nuestro país. “Los costes a los que el Gobierno somete a sus empresas las coloca en clara desventaja competitiva”, zanjó.

Paralizaciones eléctricas

Conviene recordar, a su vez, que Repsol también paralizó las inversiones en varias de sus plantas electrolizadoras en Tarragona, Cartagena y Bilbao por la incertidumbre existente en el sector energético.

Antes de Repsol, Iberdrola ya sostuvo que de continuar con la situación actual, sus proyectos corren serios riesgos. De hecho, las redes eléctricas pueden suponer un grave problema a la hora de acometer inversiones. Esta semana, durante el foro europeo de movilidad eléctrica, las grandes eléctricas aseveraron que si “no se desarrolla una red fuerte de puntos de recarga” las inversiones programadas pueden verse afectadas.

Enel, la matriz de Endesa, también fue clara y concisa respecto a la inseguridad jurídica creada por los impuestos a la facturación anual. En esta línea, José Bogas, consejero delegado de la eléctrica española, pidió “clarificar la regulación” para no taponar las inversiones.

"Creemos que no tiene sentido 'per se', porque ya no es una contribución extraordinaria, y no tiene sentido, porque en lo que es la lucha contra el cambio climático, las inversiones que se necesitan son ingentes. Y esas ingentes inversiones que hay que realizar a futuro, si tenemos un impuesto como éste que nos drena recursos, pues nos drena capacidad de inversión", señaló. Igualmente, recordó que los competidores de fuera de España, e "incluso algunos en España", no tienen que hacer frente a este impuesto, por lo que "no tiene sentido", explicó recientemente el CEO.

Mientras Iberdrola continúa con su oposición al Gobierno, también planifica su futuro con inversiones millonarias en otras regiones del mundo, como es el caso de Reino Unido. La empresa, a través de su filial Scottish Power, impulsará su apuesta inversora por el Reino Unido en los próximos años hasta la cifra de 12.000 millones de libras (unos 13.823 millones de euros) en el periodo 2024-2028.