“Cualquier persona que le guste mi música le diría que no vaya a a un puto (sic) Pans&Company en la vida”. Fueron las palabras con las que el conocido cantante C.Tangana se despachó ante una de las empresas para las que trabajó antes de dar el salto a la fama.

El artista concedió una entrevista a Jordi Évole, después de que el cantante presentara un documental con su última gira, que destacaba por su puesta en escena y por el elevado coste de llevarla a cabo. Durante la conversación, el cantante habló de sus inicios en el mundo laboral y de las malas artes que ciertas empresas de comida rápida tienen con sus empleados. Es aquí donde quedó mal parada la multinacional dedicada a vender bocadillos calientes. “Me deben 600 euros. Yo hacía horas extra y ellos utilizaron los fichajes para decir que no era así”, dijo el C. Tangana.

También dijo que en aquella época su nómina mensual era de solo 350 euros, y que "todo lo que podían ratearte si no se fichaba bien" lo hacían para pagarle menos de lo que debían, con gestos como apuntar que había salido a las 2 de la mañana cuando él había indicado que su salida era a las 3.

Pans & Company inicia su historia en Barcelona en 1991, con el objetivo de transformar un producto tan típicamente español como el tradicional bocadillo en un producto fast-food, bautizando de esta forma el sector en España. En la actualidad, la marca es uno de los nombres de referencia de la comida rápida nacional, con más de 270 establecimientos en todo el mundo. Tras varios bailes accionariales, la compañía pertenece en la actualidad al grupo de restauración Grupo Ibersol, con una facturación de 102 millones de euros.

No fueron las únicas críticas que C. Tangana hizo a otras empresas. Su discográfica también se llevó un rejonazo. “Ellos ganan mucho más dinero del que me llegaba. Eran 200.000 euros el contrato, pero el beneficio para Sony es superior”, señaló.

Durante la charla entre el periodista y el artista, C. Tangana habló de su juventud y de su niñez y recordó cómo varios domingos sus padres y él acudían a uno de los restaurantes más antiguos de la capital para comprar comida para llevar a su casa. “Cogíamos unos pollos del Mingo”. La especialidad de este bar situado cerca de la Estación de Príncipe Pío se llevó los halagos del cantante.

Otros casos de daño de reputación

El echar por tierra la reputación de una compañía o de una empresa no es nueva. O viceversa. Unir la marca a un deportista, cantante o celebrity está muy extendido. En los últimos años se han visto casos en los que un personaje relevante ha criticado duramente a alguna compañía.

Cristiano Ronaldo, durante una rueda de prensa, decidió apartar una botella de Coca-Cola de la mesa en la que se sentaba para contestar a los periodistas. “Agua, no Coca-Cola…”., dijo el astro futbolístico. ¿Qué ocurrió? Minutos después cuando Wall Street comenzó a cotizar, la multinacional cayó en bolsa y llegó a perder casi 4.000 millones de euros por el desplante del jugador.

Meses después, Pogba, un musulmán practicante, decidió quitar de la mesa una pequeña botella de cerveza cuando se sentó a hablar con los medios de comunicación después de ser nombrado Man of de Match (“Hombre del Partido”) en una victoria de la selección francesa.

¿Qué hacer en estos casos?

Con la polémica instaurada en redes sociales y con un buen puñado de seguidores criticando duramente a Pans&Company, los departamentos de comunicación y marketing entran en horas críticas para salvar la reputación de la empresa. María Calleja, CEO de la agencia creativa Bonhomia, remarca que lo mejor en estos casos se “tiene que tener una metodología de gestión de crisis adecuada y alineada con su tono y personalidad. Una hoja de ruta derivada de una buena estrategia para ser activada” cuando suceden este tipo de situaciones.

La compañía de comida rápida ha preferido guardar silencio y tras los reproches de C. Tangana no ha querido hacer público ningún comentario. Algo que Calleja reprocha puesto que entiende que “siempre hay que tener una buena planificación estratégica y creativa”. “C. Tangana es una de las personas más influyentes en España hoy en día y hay mil formas de sacar rédito a eso. Lo que sí hay que tener claro es que hay que moverse rápido, el real time manda hoy en día y para llegar tarde, es mejor no llegar”, puntualiza.

Por último, la experta reconoce que “es posible que haga daño si no se sabe gestionar y dar bien la vuelta” episodios como los anteriormente narrados. “Hundir una empresa son palabras mayores. Lo que sí puede pasar es que una mala campaña por parte de alguien relevante incite a que se hagan mejor las cosas dentro de una compañía”, concluye.

Casos a la inversa

También existen casos a la inversa. Una persona ligada a la actualidad lanza a la opinión pública un mensaje de una marca o tiene algún gesto con ella y la magia del marketing hace todo lo demás.

Sin ir más lejos, la marca Joma vio como un abrigo negro se agotaba a las pocas horas en su página web. Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, lució esta prenda durante su estancia en Davos. El anorak Islandia III negro –este es el nombre del modelo–, a la venta en la web de Joma por 88 euros, está agotado en todas las tallas salvo la XS (en azul marino todavía está disponible en la 12 infantil, XS y S).

La opinión de un músico hacia otro músico también es importante. “Nos ha cambiado la vida”, dijo esta misma semana el vocalista de la banda La La Love You cuando fueron preguntados en La Resistencia de David Broncano por el empujón que le dio Amaia. Tenemos que volver a 2019 para entender esta cita. La exconcursante de Operación Triunfo fue preguntada por la música que estaba escuchando por aquellos entonces. Ella dijo que había empezado a ponerse en su lista de reproducción a La La Love You. ¿Qué pasó después? Que el grupo pasó de tener unas 1.000 reproducciones en una de sus canciones a las 117 millones que figuran en la actualidad en Spotify.

¿Quién no recuerda la polémica del Ferrari y del Renault Twingo? Shakira decidió atacar a Gerard Piqué a través de una canción y se comparó a ella (Ferrari y Rolex) con su nueva novia (Twingo y Casio). El exfutbolista no dudó en sacar partido a la letra de la composición y decidió regalar relojes a sus colaboradores de la Kings League y llegó en el coche a una de las jornadas del torneo. La polémica sirvió a las dos empresas para lanzar una exitosa campaña de publicidad a través de las redes sociales.