De las discrepancias sobre el salario mínimo interprofesional o sobre la reforma del subsidio por desempleo, a lograr una iniciativa conjunta que siente las bases de una reducción de la jornada laboral. Los ministerios de Trabajo, que lidera Yolanda Díaz, y de Economía, bajo la batuta de Carlos Cuerpo, han acordado la creación de un Consejo Nacional de Productividad que analice esta variable y haga recomendaciones al Ejecutivo. En resumen, ambos departamentos encargarán informes y análisis a un grupo de expertos que permita avanzar hacia una jornada laboral más corta.

Según ha podido saber este periódico, el consejo se presentará “próximamente” y tendrá una estructura parecida a otros órganos asesores del Ejecutivo, como el comité de expertos para la reforma laboral o el grupo de economistas que asesora a Trabajo para las subidas del salario mínimo interprofesional (SMI).

Ambos departamentos coinciden en que en España hay un problema con la productividad, algo que no es posible ignorar si se apuesta por reducir la jornada laboral, como ha defendido la ministra de Trabajo. “Ha llegado ya el momento de corregir el problema de productividad que tiene nuestro país y que aquí se agudiza porque la productividad está muy mal repartida”, defendió este lunes Díaz.

El trabajo del Consejo Nacional de productividad no será la elaboración de un único informe, sino que la intención, según fuentes del Ministerio de Economía, es que sea un órgano de consulta de carácter permanente e independiente. El objetivo es que los expertos analicen las distintas aristas a tener en cuenta en la productividad “y nos hagan recomendaciones para solucionar este problema”, explicó Cuerpo a Expansión.

Para el ministro de Economía es fundamental abordar la reducción de la jornada laboral teniendo en cuenta el tamaño de las empresas españolas, uno de los factores que lastra la productividad de la economía. “Tenemos es un acuerdo de Gobierno para seguir avanzando en la reducción de jornada, pero creo que es clave hacerlo manteniendo un cierto nivel de flexibilidad y precisamente eso está relacionado con el tamaño empresarial que tenemos”, apuntaba en la misma entrevista.

Acuerdo de Gobierno

Este nuevo grupo de expertos estaba incluido en el acuerdo de Gobierno que alcanzaron el PSOE y Sumar para la presente legislatura. “Crearemos el Consejo Nacional por la Productividad, emulando el que ya tienen varios países europeos, para que se encargue de su monitorización y establezca recomendaciones de actuación para alcanzar los objetivos previamente fijados en dicha Estrategia”, rezaba el documento.

El Consejo no es un invento de ambas formaciones españolas, sino que existe en otros países de nuestro entorno y fue una recomendación del Consejo de la Unión Europea en 2016. El objetivo es que este tipo de grupos de expertos analizasen “la evolución y las políticas que puedan afectar a la productividad y a la competitividad. Elaborarán análisis independientes y reforzarán el diálogo político a escala nacional”, recogía entonces esa sugerencia.

“La investigación y análisis que lleven a cabo los consejos de productividad fomentarán una evolución que debería contribuir al correcto funcionamiento de la Unión Económica y Monetaria europea”, añadía la recomendación.

Observatorio del BBVA y del IVIE

Ante la ausencia de un Consejo Nacional, la Fundación BBVA y el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (IVIE) cuentan con el Observatorio de Productividad y Competitividad en España (OPCE). Los primeros datos de ese observatorio muestran un retroceso del 7,3% en la productividad española en lo que va de siglo. Estas cifras se presentaron a principios de este año y muestran un cambio de tendencia desde 2013, aunque fue interrumpido por la pandemia. 

“España presenta una preocupante trayectoria de productividad del trabajo y también del capital, así como de la productividad total de los factores (PTF) —el principal indicador de eficiencia conjunta de los factores de producción para generar valor añadido—. Esa evolución de la eficiencia indica un deficiente aprovechamiento de los recursos utilizados. La desventaja española en productividad respecto a otros países limita su competitividad internacional debido a que una parte de su sistema productivo no es eficiente, frenando las ventajas de costes a la hora de competir y las mejoras de renta per cápita y bienestar”, concluían ambas instituciones.

Contar con un análisis independiente que además realice recomendaciones al Ejecutivo es fundamental, según el Gobierno, para atajar esta desventaja de España. Que se trate de una iniciativa conjunta entre ambos ministerios muestra también un cambio de sintonía entre las carteras de Trabajo (Sumar) y de Economía (PSOE), que han estado en desacuerdo en muchas de las políticas económicas impulsadas por el gobierno de coalición.