Sin salirse del guion. El Banco Central Europeo ha cumplido con lo esperado y ha mantenido los tipos por quinta reunión consecutiva. El organismo europeo ha dejado en el 4,5% el tipo de interés. En el comunicado, más corto de lo habitual, el BCE ha explicado que la información más reciente da la razón a las previsiones previas que había realizado el consejo sobre la inflación a medio plazo. El objetivo marcado por el supervisor es que se sitúe en el 2%. El BCE está preparando el terreno para que la primera bajada se produzca en la próxima reunión, en junio.

La institución europea señala que "sería apropiado reducir el actual nivel de restricción de la política monetaria" si los datos de perspectivas de inflación, la dinámica de la subyacente y la transmisión de política monetaria demostrases que se está yendo hacia el objetivo del 2% "de forma sostenida". Sin embargo, el banco central insiste en que los tipos de interés oficiales se encuentran en niveles que "están contribuyendo de forma significativa el proceso de desinflación".

A pesar del aviso de que la bajada de tipos está próxima en llegar, el BCE señala en el comunicado que  las decisiones futuras del Consejo de Gobierno asegurarán que los tipos "seguirán siendo suficientemente restrictivos durante el tiempo que sea necesario". Asimismo, matiza que para determinar el nivel de restricción y duración apropiados, se seguirá aplicando un enfoque dependiente de los datos y las decisiones se adoptarán en cada reunión, "sin comprometerse de antemano con una senda concreta de tipos". De hecho, en la rueda de prensa Christine Lagarde, presidenta del BCE, ha evitado decir que bajarán los tipos de interés en junio.

Con todo esto, el tipo de interés de las operaciones principales de financiación y los tipos de interés de la facilidad marginal de crédito y de la facilidad de depósito se mantendrán sin variación en el 4,5%, 4,75% y 4%, respectivamente.

Christine Lagarde, presidenta del BCE, ha asegurado que no van a esperar a que todos los componentes de la inflación bajen al 2% para recortar tipos. Tal y como ha señalado, la inflación en los servicios "sigue siendo muy alta, por encima del 4%".

La presidenta no quiere hablar sobre lo que va a hacer la Reserva Federal de EEUU (Fed). "No voy a especular sobre lo que pueden hacer o están haciendo otros bancos centrales", ha señalado Lagarde y ha incidido en que el BCE es dependiente de los datos no de la Fed. "En junio tendremos muchos más datos e información" para decidir sobre la política monetaria, además de nuevas proyecciones económicas. "Entonces determinaremos si estos datos aumentan nuestra confianza" para comenzar a reducir los tipos, afirma Lagarde.

La inflación continúa con su caída

"La inflación ha continuado descendiendo, gracias a la bajada de los precios de los alimentos y de los bienes", apuntan en el comunicado. La mayoría de los indicadores de la inflación subyacente están disminuyendo, el crecimiento de los salarios se está moderando gradualmente y las empresas están absorbiendo parte del incremento de los costes laborales en sus beneficios.

Asimismo, explican que las condiciones de financiación siguen siendo restrictivas y "las anteriores subidas de los tipos de interés continúan frenando la demanda, lo que está contribuyendo a reducir la inflación". No obstante, matizan que las presiones inflacionistas internas son intensas y mantienen la inflación de los precios de los servicios en niveles elevados.

Programas específicos

El tamaño de la cartera del Programa de compra de activos (APP) está reduciéndose a un ritmo mesurado y predecible, dado que el Eurosistema ha dejado de reinvertir el principal de los valores que van venciendo.

El Consejo de Gobierno prevé seguir reinvirtiendo íntegramente durante el primer semestre de 2024 el principal de los valores adquiridos en el marco del programa de compras de emergencia frente a la pandemia (PEPP) que vayan venciendo. En el segundo semestre del año, espera reducir la cartera del PEPP en 7,5 millones de euros mensuales de media. El Consejo de Gobierno prevé poner fin a las reinversiones en el marco del PEPP a final de 2024.

El Consejo de Gobierno continuará actuando con flexibilidad en la reinversión del principal de los valores de la cartera del PEPP que vayan venciendo, con el objetivo de contrarrestar los riesgos para el mecanismo de transmisión de la política monetaria relacionados con la pandemia.