Telefónica ha vivido uno de los días más importantes de su historia más reciente. En plena lucha accionarial en la que Criteria Caixa ha irrumpido con fuerza para frenar las intenciones de STC, convirtiéndose en el máximo accionista de la empresa de telecomunicaciones, José María Álvarez-Pallete ha preferido pasar de puntillas en la batalla por los asientos en el consejo de administración.

Con el Gobierno intentando llegar al 10% para ser el máximo accionista de la operadora y con STC esperando a que obtenga el permiso para acceder al 9,9% del capital social, el presidente de Telefónica ha querido dar la bienvenida a todos los interesados a poseer acciones de la corporación.

"Damos la bienvenida a los que han decidido participar en ese futuro y, por supuesto, agradecemos a los que han recorrido el camino con nosotros, grandes y pequeños porque supieron ver dónde había que estar", ha sostenido en la junta ordinaria anual de Telefónica.

No obstante, y con Criteria Caixa, STC y el Gobierno pidiendo su lugar en el consejo de administración, no ha entrado a valorar la situación actual durante su discurso a todos los accionistas de la operadora española.

El presidente sí ha sacado pecho de la gestión y del momento actual de la operadora y ha remarcado que "entiende" el interés que Telefónica "suscita en la comunidad inversora". "Entendemos a todas las partes que quieren estar en Telefónica porque Telefónica es parte del futuro, un futuro por el que ha apostado", ha sentenciado.

Tal y como ya ha contado este periódico, la lucha por el control de la compañía es total. El Gobierno ya maniobra, a través de la SEPI, para poder tener representación dentro del consejo de administración y tantea la posibilidad para colocar a alguien de confianza en la presidencia en un futuro. Mientras tanto, Criteria compró el 5% para tener vigilado a STC, pero también a las posibles maniobras del Estado.

Estos movimientos podrían anticipar importantes fricciones y batallas por puestos en el consejo de administración. Criteria Caixa, precisamente, se ha reforzado para poder garantizarse una buena posición mientras que el Estado ya ha hecho pública sus intenciones por sentarse en el órgano ejecutivo.

Fue el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, el que adelantó que la SEPI solicitará representación en una junta extraordinaria cuando tenga el mínimo exigible por la operadora (alrededor del 6,5% del total de las acciones). STC, que aún no lo ha dicho públicamente, también pedirá la vez, una vez se solucionen la burocracia pertinente.

Nuevo desafío a las tecnológicas

Fuera de la lucha por la batalla accionarial, José María Álvarez-Pallete ha vuelto a insistir en la necesidad de vigilar de cerca a las empresas tecnológicas como Facebook o Google. Si bien es cierto que, en el Mobile World Congress, el presidente de Telefónica tendió la mano a estos gigantes empresariales, en la junta de accionistas ha pedido a Europa que regularicen sus negocios.

"Vemos a las plataformas tecnológicas que hoy dominan el mundo generando una soberanía transfronteriza que desafía las soberanías nacionales porque reinan sobre un mundo que todavía no tiene reglas", ha indicado.

"Pero estas mismas plataformas están en riesgo por la irrupción de nuevos
campeones en computación y por ciudadanos que empiezan a reivindicar sus derechos digitales y que están rebelándose ante un uso abusivo de sus datos", ha proseguido.

Por eso, el presidente de Telefónica ha solicitado a la Unión Europea que se solucione el problema entre operadoras europeas y empresas tecnológicas estadounidenses.

"Luchamos por reglas justas entre todos los jugadores del mundo de la tecnología, donde todos aporten su justa contribución y se eviten situaciones de abuso", ha puntualizado.