Es posible ahorrar en la declaración de la Renta si se dispone de una hipoteca firmada antes de 2013. La mayoría de los titulares de una hipoteca no saben que pueden deducirse un dinero que reduce el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) hasta 2.000 euros. Te explicamos cómo es esta deducción y cómo hacerla.

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Deducción por hipoteca: requisitos y condiciones

¿Quiénes pueden beneficiarse de esta deducción?

Para poder optar a la deducción por inversión en vivienda habitual, se tienen que cumplir unos requisitos imprescindibles, como por ejemplo los siguientes:

  • Fechas de adquisición: la vivienda tiene que haberse comprado antes del 1 de enero de 2013.
  • Lugar de residencia: la vivienda tiene que ser la vivienda habitual del propietario durante un tiempo mínimo de tres años. Deducción que afectará de forma previa a la deducción por inversión en vivienda habitual que hay que tener aplicada en la declaración de la Renta de un año anterior al 2013.

Igualmente, resulta importante la conveniencia de custodia de todos los justificantes de pagos y de facturas existentes en la propia hipoteca, ya que Hacienda podría requerir cualquier tipo de documentación que apoye las cantidades que han sido deducidas. Igualmente se debe tener en cuenta las normativas tributarias de cada una de las comunidades autónomas existentes por si existieran otras deducciones dependiendo del lugar de residencia.

¿Cuánto dinero puedes deducirte?

La Agencia Tributaria otorga la posibilidad de deducir hasta un 15% del capital invertido en la vivienda habitual y establece un límite de 9.040 euros anuales, lo que genera, en consecuencia, el límite para poder aprovechar de dicha deducción que se traduce como máximo en 1.356 euros.

Por otro lado, si la hipoteca tiene dos titulares y cada uno presenta su liquidación de las cuentas en forma separada, cada uno de ellos se beneficiará de la deducción antes mencionada teniendo como consecuencia final un ahorro en el impuesto a pagar de hasta 2.712 euros.

Gastos de la hipoteca que puedes desgravar

Intereses y capital amortizado

Intereses del préstamo hipotecario y capital amortizado son considerados gastos deducibles. Es muy importante conservar los justificantes de pago para poder demostrar a la Agencia Tributaria estas cantidades.

Otros gastos deducibles

Además del pago de la hipoteca, también pueden deducirse:

  • Gastos de formalización: Notaría, registro y gestoría vinculados al préstamo.
  • Seguros asociados a la hipoteca: Seguros de vida o de protección de pagos exigidos por la entidad financiera.
  • Gastos de rehabilitación o de reforma: Cuándo son necesarios para conseguir una mejora en la habitabilidad, o en la eficiencia de la vivienda, algunos de los gastos derivados de la rehabilitación o reforma, también serán deducibles, de acuerdo con la normativa vigente.

Cómo aplicar la deducción en la declaración de la Renta

Casillas clave en el formulario de la Renta

Para que la deducción se aplique correctamente en la declaración de la Renta, deben estar cumplimentadas las siguientes casillas:

  • Casilla 547. Importe deducible que se corresponde con el tramo estatal.
  • Casilla 548. Cantidades aplicables al tramo autonómico.

Estrategias para maximizar el ahorro fiscal

Si todavía no has llegado al tope de 9.040 euros anuales, es posible realizar anticipos en el pago de la hipoteca antes de que acabe el año impositivo. Esto te facilitará la posibilidad de optimizar la deducción y, con esta acción, disminuir la renta a pagar.

Otra estrategia consiste en comprobar si tu comunidad autónoma concede bonificaciones extra relacionadas o vinculadas a la adquisición de una vivienda o la realización de inversiones en eficiencia energética. Algunas comunidades autónomas han desarrollado bonificaciones adicionales que pueden aumentar su ahorro tributario.

Debes tener presente que cada comunidad de España puede ofrecer deducciones adicionales, de ahí que sea recomendable pedir el consejo o consultar con un asesor fiscal para lograr el máximo ahorro en tu declaración de la Renta.

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