Desde CIAE (Confederación Intersectorial de Autónomos del Estado Español) lo tienen claro. Ven con buenos ojos la subida del salario mínimo interprofesional a 950 euros, pero también quieren que se tenga en cuenta a los trabajadores autónomos y la situación de precariedad en la que están.

No en vano señalan que la crisis económica azotó con fuerza a España y dejó al país como el tercero en el que más ha crecido la pobreza (teniendo en cuenta la zona europea). En la actualidad sólo le superan Grecia y Chipre.

Las grandes compañías parecen ajenas a esta situación, ya que ellas sí que están consiguiendo aumentar sus beneficios sin descanso, en opinión de la Confederación. Mientras tanto, los autónomos y empresarios pequeños se ven avocados a vivir situaciones de falta de recursos. Estas provocan el cierre de negocios y dejan en situaciones muy delicadas a estos emprendedores, según denuncian.

Citando a la OIT (Organización Internacional del Trabajo), desde CIAE recuerdan que “la reciente disminución de la aportación de las rentas del trabajo se debe en gran medida a la disminución de los ingresos medios de los trabajadores por cuenta propia” y que “las nuevas formas de trabajo erosionan el poder adquisitivo de los trabajadores por cuenta propia”. Haciendo una clara llamada a cuidar de estos profesionales, que en muchos casos están siendo absorbidos.

Además, se dirigen directamente al nuevo equipo del Ministerio de Trabajo, del que destacan “la nueva sintonía y sensibilidad”, para tratar de paliar esta situación. Y es que, según CIAE, hace falta tanto la regulación “del caos” las normativas actuales, como incentivar y apostar por el autoempleo. Piden, además, fijarse especialmente en sectores como las mujeres, los jóvenes o los desempleados mayores de 50 años.

De esta forma, no sólo se estaría ayudando al colectivo de autónomos, sino que se podrían cubrir otras necesidades laborales y económicas que tiene el país, y para las que tanto las pymes como los trabajadores por cuenta propia son importantes.