Quim Torra ha dejado la presidencia de la Generalitat llamando a la "ruptura democrática" con España, lamentando no haber podido completar el camino a la independencia y señalando las instituciones autonómicas como una de las principales impedimentos para esa independencia. En un discurso de despedida pronunciado desde la Galería Gótica del Palau de la Generalitat, pese a estar ya inhabilitado, Torra se ha dirigido a los catalanes prometiendo además llevar su caso a la justicia europea.

Torra se ha despedido pidiendo la "liberación nacional de los países catalanes" y reclamando a partidos y entidades que recuperen la unidad para lanzar un nuevo envite contra el Estado. "No tenemos aun la república catalana, yo no he podido avanzar más, y creed que estaba preparado para asumir todas las consecuencias" ha asegurado pidiendo recuperar "el espíritu y la convicción que nos llevó al 1-O".

"Sois la única esperanza de salir del pozo en el que nos quiere meter el Estado español, es vuestra voz la única que nos permitirá salir de un laberinto del que se sale saltando sus muros", ha afirmado Torra dirigiéndose a los militantes independentistas. El ya ex presidente ha reclamado esa rebelión "desde la convicción de quien al frente de las instituciones comprueba que uno de los obstáculos para la independencia es la autonomía", ha lamentado.

Lo ha hecho señalando explícitamente al Parlament, al que ha recriminado que no publique sus resoluciones y acate las sentencias judiciales, lo que se ha convertido durante su mandato en fuente constante de enfrentamientos con el presidente de la cámara, Roger Torrent.

Llamamiento electoral

"Que hoy no estemos en condiciones de acabar el camino de la libertad no quiere decir que hayamos retrocedido ni un milímetro" ha asegurado el ya expresidente, que ha utilizado además su despedida para lanzar el que será uno de los eslóganes de JxCat: "Las elecciones deben ser punto de inflexión, tienen que ser un plebiscito que confirme el mandato del 1-O" ha asegurado repitiendo la consigna que pocas horas antes había lanzado la portavoz de su partido, Elsa Artadi.

Torra ha señalado la crisis sanitaria como único motivo de que no se hayan convocado elecciones en Cataluña, como prometió el 29 de enero, y ha asegurado que la lucha contra la pandemia ha sido su única preocupación en los últimos meses. Por contra, ha acusado a la justicia y al Gobierno de dejar en la interinidad a las instituciones catalanas en plena lucha contra el Covid. "Les puede más la sed de venganza que la vida de las personas o la recuperación de empresas. La represión no tiene limites pero la autonomía sí" ha lamentado.

Torra reúne al Govern

El ya ex presidente de la Generalitat, Quim Torra, ha reunido hoy al gobierno catalán antes de ceder el testigo al vicepresidente Pere Aragonés. Torra, al que los medios oficiales de la Generalitat se refieren ya como 131º presidente, ha participado en la reunión del Govern pese a haber sido ya inhabilitado. "Hoy no se ha reunido el Consell Executiu, es una reunión de Torra con el Govern" insistían desde Presidencia de la Generalitat.

El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ha notificado personalmente a Torra a las 16.30 de este lunes, y minutos después la Generalitat ha anunciado que "el 131º presidente se reunirá con todo el Govern".

Presidencia ha utilizado esta fórmula para evitar tildarlo de ex presidente cesado, sin incurrir en ilegalidades, puesto que Torra ya no puede participar en un Consell Executiu formal. Será cuando el BOE publique el decreto de cese oficial cuando Pere Aragonés pueda convocar al Govern para asumir las prerrogativas de presidente en funciones.

La comparecencia de Torra ha provocado las quejas de la oposición por el uso irregular, afirman, de las instituciones. Así lo ha denunciado el líder de Cs en Cataluña, Carlos Carrizosa, en las redes, reclamando a Torra que "acate la sentencia y abandone inmediatamente la Generalitat".