Las colas de viajeros en el control de pasaportes que se registran desde hace semanas en el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas han encontrado un aliado inesperado: los equipos automáticos de control de fronteras. La zona de las máquinas permanece acordonada y los sistemas, adquiridos por Aena hace cuatro años por valor de 90 millones de euros, se hallan sin uso, según ha comprobado esta semana El Independiente, en una de las jornadas de mayor afluencia de pasajeros.

"La realidad es que desde que trabajo aquí no las he visto funcionando", comenta un empleado contratado por Aena en el área de llegadas de la T1 del aeropuerto de Barajas. Metros por detrás y por delante, se arremolinan decenas de viajeros recién aterrizados en Madrid. "Bienvenidos a España", dice en inglés y con sorna una pasajera en videoconferencia con unos familiares. "Y mira aquellas máquinas. Sin funcionar y pagadas con nuestros impuestos", exclama un joven al reparar en ellas.

Mira aquellas máquinas. Sin funcionar y pagadas con nuestros impuestos, se queja un viajero

A finales de 2017 Aena, la empresa pública que gestiona los aeropuertos de interés general en España, anunció la adquisición de 652 ABC System, los equipos automáticos para el control de fronteras, por un monto de 90 millones de euros. Según la licitación, adjudicada a Everis, Telefónica Ingeniería de Seguridad, Indra e Informática El Corte Inglés/Gemalto, el Automatic Border System (ABC) es "un equipo que realiza una verificación documental junto con una comprobación biométrica facial y/o dactilar a las personas mayores de 18 años que posean un DNIe o un Pasaporte electrónico y sean residentes en un país dentro del espacio Schengen".

Viajeros procedentes de un vuelo internacional en la T1 de Barajas. FRANCISCO CARRIÓN

Pasar el control en 20 segundos, la promesa

"Tras la verificación del documento identificativo, el viajero habrá pasado el control fronterizo en unos 20 segundos", prometía entonces Aena. Los aparatos fueron colocados pero no están siendo empleados en una coyuntura marcada por aglomeraciones y esperas de hasta 45 minutos. Fuentes del Sindicato Unificado de Policia (SUP) consultadas por este diario aseguran que "las máquinas funciona bien" en Barajas. "A veces se tienen que cerrar por falta de personal de Aena, que son los encargados de colocar las filas. Hacen falta dos personas de Aena y en ocasiones no lo hay", alegan.

Además de en la capital, las máquinas también registran problemas de operatividad en los aeropuertos de Málaga, Sevilla y Tenerife Sur. En Andalucía, el origen se halla en los procedimientos adicionales para los viajeros británicos desde la entrada en vigor del Brexit. El problema, subrayan desde el sindicato policial, podría "agravarse ante la proximidad de las fiestas navideñas".

La versión del gestor aeroportuario es diametralmente opuesta. En Aena sitúan toda la responsabilidad de actual caos de Barajas en el ministerio del Interior que dirige el juez Fernando Grande-Marlaska. "Aena ha instalado 611 equipos ABC System, todos a disposición de la Policía Nacional", indican desde la empresa pública a petición de este diario. Un respuesta escueta y vaga a pesar de la solicitud de información adicional cursada por El Independiente.

Responsabilidad de la policía, según Aena

El problema amenaza con agravarse ante la proximidad de las fiestas navideñas

Aena no precisa si los sistemas se hallan operativos. Según el sindicato Alternativa Sindical Aena Enaire (ASAE), "existe gente de Indra para que las maquinas funcionen pero fallan como todo". Insisten en que se crean embudos de pasajeros que son complicados de reducir y calculan que faltan alrededor de 300 efectivos de policía nacional para el control fronterizo. "Hay más posiciones que policías trabajando. Ésa es una realidad y depende del ministerio del Interior", replican desde este sindicato. A principios de diciembre, coincidiendo con los desplazamientos del puente de la Constitución, las aglomeraciones se hicieron más recurrentes.

"Aena ha instalado 611 equipos ABC System, todos a disposición de la Policía Nacional", replica Aena

La falta de recursos humanos -con puestos de control cerrados y agentes al borde de la desesperación- es una denuncia voceada por los sindicatos policiales. El SUP confirma que sólo en Baraja se requerirían 300 policías más para completar la plantilla y añaden al sombrío panorama "la descoordinación" con Aena, "que complica y colapsa el aeropuerto". A su juicio, los principales problemas que afrontan las instalaciones son las colas de más de una hora de espera en los controles o los fallos en los sistemas automáticos de control de fronteras.

Hay más posiciones que policías trabajando. Ésa es la realidad, denuncia un sindicato

Aeropuerto y ministerio del Interior se acusan mutuamente de la situación en una guerra que ha convertido en rehenes a los usuarios en plena recuperación del tránsito aéreo y la proximidad de las fechas navideñas. "El volumen de pasajeros que transita por ellos hace imposible su control sin colapsar los accesos y salidas de España. Somos policías y no podemos pasar por alto el control documental de cualquier pasajero, no sólo somos la frontera de España, también de toda Europa", alertan desde el SUP.

Podría empeorar en navidad

Resultado de este fuego cruzado, más de 5000 pasajeros perdieron sus vuelos en el aeropuerto madrileño a lo largo del mes pasado por las demoras en el control de pasaportes. "El esfuerzo diario de los policías por intentar solucionar la situación no es suficiente, es necesario completar las plantillas y entretanto compensar el exceso de trabajo que soportan los policías", reclaman desde el SUP, preocupados por el impacto en el turismo y la imagen exterior de España.

"Después de la presión, imagino que se le va a dar una solución. La policía va a golpe de martillo. Los sindicatos denunciamos públicamente la situación y es cuando se toman soluciones", advierte Carlos Morales, portavoz del SUP. "Antes se reforzaban las plantillas de policía en fechas puntuales con más personal y en la actualidad eso no se está produciendo". El sindicato exige compensar a la plantilla actual por "el esfuerzo diario intentan paliar el efecto de la mala planificación en los aeropuertos".