Ayuso y Egea, juntos tras meses de tensiones: "Casado va a liderar el cambio político en España"

El Partido Popular arranca 2022 con la "unión" y la "cohesión" como bandera. Tras meses de guerra y de evidentes tensiones internas, este lunes Teodoro García Egea e Isabel Díaz Ayuso se han dejado ver juntos llegando al desayuno informativo que la presidenta madrileña tenía previsto en el Hotel Ritz de Madrid, al que también ha acudido el líder popular en Castilla y León y diferentes miembros de la dirección nacional de Génova. La imagen, orquestada por la dirección nacional y regional, cuenta con un potente mensaje en clave interna: el PP, con la connivencia de Isabel Díaz Ayuso, ha firmado una tregua que durará al menos hasta las elecciones del próximo 13 de febrero, en que Mañueco se enfrenta a las urnas con Vox en alza y con el reto de mantener la premisa de obtener "una mayoría suficiente como para gobernar en solitario".

El PP ha entendido que debe abrazar el 'modelo Ayuso' para lograr una amplia mayoría en Castilla y León que les permita huir de la exigencia de Vox de entrar en los gobiernos autonómicos allí donde su apoyo sea vital para el PP. "Las políticas de Ayuso son un motor para España. Precisamente, esas políticas son las que yo quiero llevar a cabo", expresaba Alfonso Fernández Mañueco en declaraciones a la prensa a su llegada al desayuno organizado por Nueva Economía Fórum. "Esas políticas son las que van a llevar al PP y a Pablo Casado a la presidencia del Gobierno", zanjaba el dirigente, trazando la nueva estrategia de "cohesión" que ha inaugurado hoy mismo el primer partido de la oposición.

Minutos antes de las nueve de la mañana, Teodoro García Egea e Isabel Díaz Ayuso llegaban juntos al evento, escoltados por el 'hombre fuerte' de la presidenta madrileña, Alfonso Serrano; y por varios vicesecretarios del PP, entre ellos el de Comunicación, Pablo Montesinos; o la de Organización, Ana Beltrán. También estaba prevista la presencia del alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, pero el regidor ha excusado su presencia a última hora por problemas de salud, según trasladan en su equipo. El gran ausente ha sido Pablo Casado, que permanece confinado tras dar positivo en coronavirus.

"Quiero decirle a nuestros adversarios que los candidatos del PP son del PP. A muchos partidos les gustaría tener presidentes autonómicos como Mañueco o Ayuso, y van a buscar cualquier tipo de enfrentamiento dentro del PP. Pero abandonen toda esperanza", ha ahondado el número dos del partido. Egea ha acusado al resto de fuerzas políticas, entre las que ha mencionado desde Vox a Podemos, de buscar esa "división" en el seno del PP y ha defendido que la premisa de los populares ante el nuevo ciclo político será la de la "unión" de todos los presidentes autonómicos, de los que ha defendido su labor sin excepciones.

Ayuso arropa a Mañueco en la campaña de Castilla y León

Lo que ha dejado claro la presidenta de la Comunidad de Madrid es que estará presente en la campaña de las elecciones en Castilla y León, cuya puesta de largo tendrá lugar este mismo fin de semana en el marco del congreso regional del PP, que contará con la presencia de todos los barones autonómicos del partido, así como de alcaldes y portavoces locales. "Hay pocas cosas que den más sentido a nuestra vocación política que unas elecciones (...). Es el verdadero examen, el que te hace libre", expresaba Díaz Ayuso ante Fernández Mañueco, quien a su vez ha defendido la "sintonía" que comparte con la presidenta madrileña. "Compartimos formación política y tenemos un empeño que nos une, que no es otro que Pablo Casado llegue a Moncloa", insistía.

El apoyo expreso de Ayuso a Casado ha llegado poco después, cuando ha suscrito las palabras del barón autonómico defendido que "mi única labor va a ser estar junto al presidente del PP (...). Casado va a liderar el cambio político en España", insistía. Y ha confirmado que la crisis interna permanecerá en stand by al menos hasta que se abran las urnas en Castilla y León. "La situación es de normalidad", subrayaba Ayuso, que prometía no obstante mantener vivo el pulso a la dirección nacional. "Tengo una profunda ilusión por estar al frente del PP de Madrid. Cuando se convoque, me presentaré", zanjaba.