La Dirección General de la Guardia Civil ha enviado a las comandancias un modelo de instancia para que los agentes que acumulan días de descanso puedan renunciar total o parcialmente a su disfrute "con el objeto de no causar perjuicio al servicio". Algunas asociaciones profesionales han criticado esta forma de proceder, que consideran "poco ética" y rayana en la "coacción".

Como viene informando El Independiente, los guardias civiles tienen pendientes 234.465 días de descanso por trabajar en horas nocturnas y días no laborables, por festivos no disfrutados o por superación de jornada. Supeditado a las necesidades del servicio, el plazo de que disponen para disfrutar de estas libranzas acumuladas expira el próximo 2 de octubre.

En un correo electrónico fechado a mediados de marzo, la Jefatura de Personal y Apoyo imparte instrucciones a las comandancias a fin de que los jefes de unidad puedan informar "directamente" al personal que se encuentra en esta situación e indicarles cómo renunciar a los días de descanso, si ése fuera su deseo. En ese caso, deberán presentar un formulario tipo en el que el agente rehúsa al disfrute "con todas sus consecuencias".

"Aquel personal que desee renunciar al disfrute de la totalidad o parte de los DSJ [Descansos por Superación de Jornada] podrá hacerlo cumplimentando la instancia que adjunto se remite, que deberá serlo en fecha que permita que el jefe de la unidad pueda evaluar el volumen de estos descansos que han de concederse para que todo el personal pueda disfrutar aquellos a los que no ha renunciado, siempre teniendo en consideración las necesidades del servicio y la fecha límite de disfrute. Esta instancia podrá ser suscrita igualmente para renunciar, total o parcialmente, a los DAS [Descansos Singularizados Adicionales, los generados por la prestación del servicio en días festivos y horario nocturno], haciéndolo a través del mismo formulario", detalla el correo electrónico.

Las fuentes consultadas por este diario dan por hecho que agentes con destinos de libre designación desistirán en muchos casos de solicitar los días que les quedan para evitar posibles represalias por parte de los jefes de unidades. "Les están diciendo que, si no renuncian, tendrán que volver a su destino (a comisionados y unidades 'fantasma'). El renunciar no garantiza que dentro de tres o seis meses vuelvas a tu destino, y después ya los has perdido", interpretan desde la secretaría de Asuntos Jurídicos de la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC).

Guardias civiles critican la forma de actuar de la Dirección General: "Es poco ético y una tomadura de pelo"

Según especifica el escrito, las solicitudes de renuncia se podrán remitir los días 5 y 20 de cada mes hasta septiembre (incluido), días antes de que venza el límite máximo que la Dirección General ha habilitado de forma excepcional para que los agentes puedan tomarse los descansos acumulados por superación de jornada: el 2 de octubre de 2022. Alcanzada esta fecha "serán eliminados de las bases informáticas todos aquellos que no hayan sido disfrutados", a excepción de los que se hayan generado en el trimestre anterior.

"Ésta es una práctica poco ética, además de una tomadura de pelo. La Dirección General debería procurarnos el descanso y no enviar peticiones para que dejemos de lado uno de nuestros derechos como trabajadores. Ya estamos percibiendo un salario menor al que nos correspondería por el ejercicio de nuestras funciones, no tenemos turnicidad ni turnos con cadencias fijas, sufrimos un exceso de trabajo porque la plantilla no es suficiente y ahora recibimos correos en los que se espera que firmemos voluntariamente la instancia de renuncia a nuestros descansos acumulados", denuncia la AUGC.

Correo electrónico enviado por la Jefatura de Personal y Apoyo a las comandancias.

También se muestran críticos desde la Asociación Escala Suboficiales de la Guardia Civil (ASESGC): "Es una fórmula que no debería haberse planteado. El temor reverencial hará que muchos compañeros renuncien a su derecho al descanso, pues las unidades más afectadas son aquellas en las que son destinados por el sistema de libre designación, es decir, las más operativas (Servicio de Información, Policía Judicial...). No hacerlo puede generar falta de confianza o compromiso, lo que desembocaría en pérdida de destino, especialmente los que ostenten mando. Sólo esta incertidumbre hará que muchos compañeros renuncien a su disfrute".

En el pleno extraordinario del Consejo de la Guardia Civil celebrado el pasado 14 de febrero para tratar la jornada laboral, la directora general (María Gámez) garantizó que ningún agente se quedaría sin disfrutar los descansos atrasados. Los funcionarios ya saben el plazo de que disponen -supeditado a las necesidades de servicio- y cómo deben proceder si quieren renunciar a ellos.

Vacantes y días acumulados

De acuerdo con las tablas facilitadas a los representantes de los guardias civiles, la mayor parte de los días acumulados -139.309 (el 59,41 % del total)- corresponde a descansos generados por trabajar en horario nocturno y días festivos, a razón de uno por cada seis servicios nocturnos y uno por cada tres servicios festivos. En concreto, son 25.798 los agentes a los que se adeudan días por esta circunstancia operativa (de ellos 1.498 en Madrid, 1.385 en Valencia y 1.231 en Alicante, las tres comandancias con mayor volumen), lo que arroja una media de 5,4 descansos por funcionario.

Por festivos no disfrutados (a cada guardia civil le corresponden 14 al año) son 42.186 los días que acumulan 14.062 agentes, a una media de tres. La cifra de 234.465 se completa con los 52.970 días de descanso por superación de la jornada, circunstancia que se compensa con uno por cada 7,5 horas de exceso a partir de las 40 horas (las primeras 10 horas de exceso se retribuyen económicamente). 

Las ofertas de empleo y la aplicación de tasas de reposición superiores al 100 por ciento desde 2019 han permitido recuperar parte de los efectivos que se perdieron durante la última crisis económica debido a las restricciones presupuestarias, pero no han procurado que las plantillas estén aún completas. Según datos de la Asociación Justicia para la Guardia Civil (Jucil), las vacantes en el Instituto Armado ascienden en toda España a 10.160, lo que equivale a un 11,28 % del total. Se necesitaría quintuplicar el número de plazas ofrecidas en la última convocatoria de ingreso en la escala de cabos y guardias (2.091) y que no se produjera ninguna baja para tener la plantilla completa.