Sare, movimiento de apoyo a los presos de ETA, ha criticado la "lentitud incomprensible" en el acercamiento de los presos y ha afirmado que "no hay ningún argumento o excusa para seguir manteniendo esta política penitenciaria de excepción". Estas reivindicaciones han tenido lugar este sábado en una manifestación en Pamplona.

La red ciudadana ha recordado que, hace cuatro años, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, "manifestó públicamente" que "iba a iniciar un proceso para poner fin a una política penitenciaria de excepción que duraba más de tres décadas y que aplicaría una política penitenciaria ordinaria a los y las presas vascas".

Si bien ha reconocido que, en este tiempo, "la situación ha cambiado" y "se han dado los primeros pasos para poner fin a la política de alejamiento, así como en la progresión de grado", Sare ha destacado que "todavía el 36% de las presas y de los presos vascos sigue sufriendo esa política de alejamiento". "Y aunque ha desaparecido el primer grado penitenciario, sólo se ha aprobado el paso del segundo grado al tercero o la posibilidad de disfrutar permisos en el caso de 21 presas y presos", ha apuntado.

A ello ha unido lo que ha definido como "actitud negacionista de la Audiencia Nacional ante los permisos y las progresiones". Al respecto, ha criticado que "han pasado casi dos meses desde que se realizó el último traslado" a cárceles de Navarra y Euskadi.

Por otro lado, Sare ha abogado por "seguir impulsando el camino iniciado". Ha asegurado que "existe la posibilidad real de poner fin definitivamente a la política penitenciaria de excepción" y ha remarcado que "mientras no sea así, por desgracia, será una quimera hablar de convivencia, de memoria, de justicia y de paz".

Así, ha llamado a "seguir caminando, juntos y juntas, por la convivencia, por la paz y para que todas las presas y los presos vascos que se encuentran bajo la política penitenciaria de excepción puedan recorrer el camino de regreso a casa".