El excomisario José Manuel Villarejo ha pedido una vez más que el tribunal que le juzga por supuestos proyectos de espionaje se aparte de la causa al sostener que tiene "una manifiesta animosidad y hostilidad" hacia él o "incluso apasionamiento personal" que hace, en su opinión, que pierda la imparcialidad. La defensa del excomisario ha presentado un nuevo escrito de recusación ante la sección cuarta de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, que le juzga desde octubre y que el mes pasado aplazó el juicio hasta septiembre debido a las dolencias que impedían a Villarejo acudir a las sesiones, tras haber sufrido "un accidente vascular cerebral con paresia" en un ojo.

Esta vez el motivo de recusación reside en una providencia dictada por el tribunal a finales de julio en la que, con el objetivo de "coordinar adecuadamente el oportuno seguimiento" respecto a su enfermedad, pidió a la Policía Judicial que verificase si el excomisario "convalece en el domicilio indicado durante el periodo de su recuperación, o se traslada a otro distinto".

Pero éste considera que la "verdadera finalidad" de dicha providencia es que la Policía le vigile "diariamente" durante todo el mes y denuncia que varios agentes acuden a su casa diariamente y le obligan a comparecer ante ellos para levantar acta de que permanece en su domicilio, cuando -subraya- no tiene limitada su libertad ambulatoria.

Villarejo afirma en el escrito presentado, al que ha tenido acceso Efe, que estas medidas son desproporcionadas y no están justificadas, y acusa al tribunal de tener unos "prejuicios incompatibles con la serenidad y distancia" que debería mantener.

Informe exhaustivo

No es la primera vez que el excomisario intenta apartar a la Sala que le juzga o al magistrado instructor que sigue investigándole por en numerosas piezas del caso Tándem. Sus intentos siempre han sido infructuosos y en la última ocasión el juez instructor de la causa, Manuel García Castellón, vio incluso contumacia y abuso de derecho en el incidente de recusación que planteó contra él.

El juicio al excomisario se retomará previsiblemente el 5 de septiembre, pendiente de su evolución y después de que el tribunal reciba un informe "exhaustivo" del forense al respecto.

En las últimas sesiones celebradas, la Fiscalía anunció una rebaja en la petición de condena que solicitaba al excomisario (de 109 años de cárcel a 83) por lucrarse presuntamente con tres proyectos que contemplarían la obtención de datos confidenciales de terceros y para los que se habría valido en varios casos de su condición policial.