Después de dos aplazamientos de la hora establecida para su comparecencia, a las once de la mañana, el portavoz parlamentario de Vox, Iván Espinosa de los Monteros, ha hecho presencia en la sala de prensa del Congreso de los Diputados. Pese a no haber actividad parlamentaria hasta la semana que viene, cuando el presidente del Gobierno Pedro Sánchez comparecerá en el Congreso y en el Senado por partida doble, el 'segundo' de Vox en la cámara baja ha querido abordar el conflicto existente entre el Ejecutivo central y el autonómico de Castilla y León, que colidera su partido junto al PP. Ello, tras el anuncio del Gobierno de la aprobación de un requerimiento que hará hoy el Consejo de Ministros ante las medidas antiaborto citadas en la región; porque entienden, pese a que el popular Mañueco ha querido zanjar la polémica asegurando que nada cambiará, que la autonomía puede extralimitarse en sus competencias y para que cese "la vulneración de los derechos de las mujeres".

Preguntado por la advertencia del secretario general de Vox, Ignacio Garriga, que ha asegurado que de no aplicarse el protocolo comunicado el pasado jueves se procederá a revisar el pacto de gobierno con el PP en la región, el portavoz del partido ha rebajado las expectativas aludiendo a la cotidianidad de las revisiones y dejado claro que éstas no pasan necesariamente por una rotura de alianzas: "revisar el pacto y romper alianzas son cosas distintas". "Estamos revisando constantemente el pacto, como en cualquier otro sitio. Eso no es una novedad", ha afirmado. Con todo, aunque no ha hecho ninguna ampliación sobre una posible ruptura del acuerdo, sí ha dicho que de cara al futuro "tendremos que ser más estrictos en el cumplimiento del pacto".

Tras haber matizado la posición trasladada por Garriga previamente en una entrevista en Televisión Española, Espinosa de los Monteros ha mencionado que tampoco es una novedad que "el PP firme cosas y luego se eche atrás". Todo ello, después de haber resaltado que sus enemigos no son los populares, sino el nacionalismo y la izquierda. "Si ellos incumplen lo que han escrito, ellos mismos. Si eso sucede, será por el miedo que tienen a la izquierda política y mediática, y a su influencia", ha detallado el diputado de Vox, que evita, no obstante, explicar en qué sentido se revisará esa coalición si el PP no cede. El propio Feijóo ya ha expresado que "en ningún lugar donde gobierne el PP se coaccionará a una mujer para que no aborte".

"Se están diciendo muchas cosas contra nosotros. Ayuso nos comparó la semana pasada con EH Bildu. Si prefieren llegar a acuerdos con el PSOE, es bueno que los votantes lo entiendan. Es legítimo, pero deben saberlo para actuar en consecuencia", entiende Espinosa de los Monteros; que no ve polémica por ninguna parte. "No entiendo cuál es la polémica de que se ofrezca eso a una mujer embarazada, es un paso de progreso", ha comentado el de Vox, remarcando que "si no lo quiere, no lo hará" ninguna mujer al no ser "obligatorio". "Renunciar a eso no es de sentido común. "¿Ustedes creen que se está en condición de decir a las mujeres lo que deben hacer; que no tienen criterio propio?", ha añadido.

El político ha dicho que el jueves Vox y PP alcanzaron un acuerdo para ese protocolo -que recoge mostrar a la madre el latido fetal y el acceso a una ecografía 4D- remitido en nota de prensa [hoy Vox la ha vuelto a enviar]. "Se aprobó y no pasó nada hasta el viernes (...) cuando saltan las alarmas" en los medios, ha resaltado Espinosa de los Monteros señalando en múltiples ocasiones al grupo Prisa. Desde Vox esperan que no se de más vueltas al asunto y se apruebe el protocolo, porque, dicen ofrecer ayudas a las mujeres embarazadas mientras el Gobierno lo hace "a los violadores", en alusión a la rebaja de penas en delitos sexuales provocada por la ley del 'solo sí es sí'.

Giro a la izquierda del PP

Espinosa de los Monteros entiende que la negativa del PP, al margen de las presiones ya comentadas a nivel político y mediático de la izquierda, se debe a un viraje ideológico hacia esa tendencia; una crítica electoralista para afianzar electorado. De ello, ha culpado en parte al político vasco Borja Sémper, que ha sido elegido por Feijóo como portavoz de la campaña de las locales y autonómicas de mayo. Sémper dijo el viernes que el PP "no está dispuesto a tragar con cualquier cosa", algo que desde Bambú entienden como una interferencia de Génova en algo pactado horas antes y sin objeciones por parte del consejero de Sanidad castellano y leonés