España | Madrid

La centralita de llamadas de emergencia del Summa 112 de Madrid pospone su huelga hasta el 18 de febrero

Una médico en su puesto del Centro Coordinador del SUMMA112, en la Base del SUMMA112,

Una médico en su puesto del Centro Coordinador del SUMMA112, en la Base del SUMMA112, EP

El pasado 17 de enero se hizo público un nuevo conflicto entre la Comunidad de Madrid y el sector sanitario. Esta vez se trataba del servicio de atención de llamadas de emergencia del Summa 112, que atiende el número 061. Y es que los trabajadores anunciaron que el día 30 de enero comenzarían una huelga indefinida las 24 horas de todos los lunes y sábados para protestar por sus condiciones laborales. Reclamaban dos cosas en concreto: mejoras salariales y una reducción de la jornada laboral máxima, que consideraban "excesiva". Unas demandas que aseguran que llevan años haciendo, y que se juntaron con el reciente anuncio del traslado del servicio desde Legazpi hasta el hospital Zendal, que tampocó gustó nada.

El servicio está externalizado a dos empresas: Servitel Multiservicios y Servitel Centro Especial de Empleo, que fueron adquiridas hace poco por Ilunion, que a su vez es propiedad de la ONCE. Este viernes por la mañana las partes implicadas se han reunido en el servicio de mediación, arbitraje y conciliación de la Comunidad de Madrid, algo habitual antes del comienzo de una huelga. Esta vez, sin embargo, la reunión ha servido para posponer la huelga hasta el 18 de febrero, porque desde Ilunion han trasladado a los trabajadores que están en "conversaciones" tanto con el Summa como con la propia Comunidad para mejorar el contrato de los trabajadores del servicio a "nivel técnico". Sí se mantiene, no obstante, la concentración que habían programado en paralelo a la huelga el mismo 30 de enero enfrente del Centro de Coordinación del Summa, situado en la calle Antracita, 2 bis.

"Nos han pedido un aplazamiento de tres semanas, pero nosotros les hemos dicho que les damos hasta el 18 de febrero. Ha sido un primer acercamiento entre las partes, y un voto de confianza y de buena fe por nuestra parte. A veces hay que hacerlo, pero si vemos que no se avanza o el avance es mínimo seguiremos adelante con la huelga", asegura Vladimir Valentín, miembro del comité de huelga y del sindicato CGT, que explica que son optimistas porque consideran que Ilunion es una empresa lo suficientemente grande como para negociar con la Administración "de tú a tú".

En la reunión, los trabajadores han trasladado por primera vez sus demandas exactas, algo que hasta ahora habían hecho de manera más "genérica", sin concretar tanto. Entre ellas destacan un incremento del salario base, un plus de emergencias y otro por el traslado al Zendal, además de un bus de ruta para trasladar hasta allí a los trabajadores.

Hasta 6.000 llamadas al día

El servicio está compuesto por unos 130 trabajadores, siendo alrededor del 80% mujeres. "De multiservicios seremos unos 96, que éramos  los que estábamos con la anterior empresa. Y del centro especial de empleo serán unos 20 o 30, y la mayoría tienen alguna discapacidad", explica Valentín, que detalla que el salario base bruto que perciben actualmente ronda los 1.000 euros y puede llegar a un máximo 1.200 dependiendo de los pluses por nocturnidad, fin de semana y festivos. Además de atender a entre 2.000 y 6.000 llamadas al diarias (que durante el covid llegaron a ser 10.000), también se encargan de programar las ambulancias de traslado no urgente. 

Los trabajadores del servicio madrileño consideran que, en comparación con el resto de comunidades, tienen las peores condiciones. La razón es que se les aplica el Convenio de Contact 2 center "puro y duro", mientras que con los demás han aprobado una serie de "mejoras", como pluses salariales y de productividad o medidas de conciliación del trabajo con la vida familiar. Por todo ello, Valentín asegura que la última evaluación de riesgos psicosociales que hicieron a los empleados salió "fatal", marcando casi todos los ítems consultados en rojo a pesar de que a la mayoría de la plantilla "les gusta su trabajo", que consideran un servicio público esencial. 

"No está compensado ni tiempo ni dinero. Entras como teleoperador y luego pasas a ser teleoperador especialista, pero ahí te quedas estancado porque los puestos más altos son pocos y no hay movilidad. Y al final te cansa y te fatiga estar el día 5,10 o 15 del mes en números rojos, porque no vamos a currar para eso. Tengo compañeras que llevan 20 años trabajando aquí y no es que ganen lo mismo, es que ganan menos porque convenio tras convenio la situación ha ido empeorando. Ahora ha habido un preacuerdo entre CCOO, UGT y la Patronal para una subida salarial del 0% en 2020 y 2021, lo que significa que vamos a perder entre el 8% y el 10% de nivel adquisitivo", lamenta Valentín. 

Los días elegidos para ponerse en huelga no eran casualidad. Los lunes lo tienen catalogado como un "día fuerte", al ser comienzo de semana. Y los fines de semana por la noche las llamadas también incrementan por los problemas ocasionados en las fiestas: peleas, borracheras, navajazos… etc. 

Servicios mínimos

La gota que colmó el vaso para los trabajadores fue su traslado al hospital Zendal, que está a 16 kilómetros de distancia de su punto de trabajo actual, y que consideran que está "muy mal comunicado". "Casi toda la plantilla vive en el sur, y a muchos les supone un incremento de tiempo de hasta una hora y media para ir y otra para volver. No nos han ofrecido como solución un autobús de empresa, ni pagar un plus para la gasolina del coche. Tampoco nos dejan meter el coche en el parking, y es una zona peligrosa, sobre todo por la noche porque es un descampado. Algunos compañeros ya nos han dicho que hay bastantes robos y cristales rotos. Hace unos días, de hecho, robaron el catalizador de un coche. Y aún falta que vaya allí el personal de Summa de la Comunidad, no sabemos si habrá plazas para todos", explica Valentín.

Los servicios mínimos de esta huelga debía estipularlos el Summa, que este jueves, antes del anuncio de que se pospondría, ya avisó a los trabajadores de que tenía previsto establecerlos en el 100% en las llamadas urgentes y en el 80% en las ambulancias programadas, al considerarlos un servicio esencial. Algo que los trabajadores no iban a aceptar, como explica Valentín: "Son abusivos, se vulnera derecho a huelga. Summa siempre ha hecho lo mismo en otras huelgas, pero desde CGT lo hemos denunciado y siempre nos han dado la razón. Nosotros le hemos propuesto a la empresa un  50% de personal en urgente y un 30% en ambulancias, y nos han dicho que elevarán la propuesta al Summa. Pero no confiamos mucho, nos tocaría volver a denunciar”. 

Todas las claves de la actualidad y últimas horas, en el canal de WhatsApp de El Independiente. Únete aquí

Te puede interesar