Era el temor que tenían en el PNV y las urnas lo han confirmado. El 'sorpasso' de la izquierda abertzale a la formación de Andoni Ortuzar se ha producido la noche del 23-J. La pérdida de un escaño por parte del PNV, favoreciendo un triple empate a cinco diputados en el País Vasco entre el PNV, PSE y EH Bildu ya lo habían arrojado las encuestas y hoy lo han ratificado las urnas. Un sorpasso que produce por la suma de los cinco diputados logrado por Bildu en el País Vasco y otro en Navarra. A ello se suma el revés que supone que en número de votos el PSE sea la formación que se ha impuesto esta noche en Euskadi, con casi 290.000 votos, lo que supone alrededor de 63.000 más que en 2019. El PNV y la izquierda abertzale han obtenido prácticamente los mismos votos, 275.000 la formación de Ortuzar y EH Bildu 274.000 votos.

El PNV confiaba en poder retener su sexto escaño, si bien las esperanzas tras la pérdida de apoyo de las elecciones municipales y forales del pasado 28-M habían sembrado el pesimismo en la dirección de la formación. A los cinco diputados que EH Bildu logra en el País Vasco suma un sexto representante que obtiene en Navarra.

En el caso de Euskadi, el PSE también ve mejorados sus resultados, al incrementar de 4 a 5 sus representación autonómica para la próxima legislatura. De igual manera, el PP ha logrado duplicar su representación al pasar de uno a dos representantes. Por su parte la marca de Yolanda Díaz, Sumar, sólo logra un representante de los tres que obtuvo Unidas Podemos.

El 'sorpasso' de EH Bildu es sin duda el dato más relevante de la noche electoral en el País Vasco y que apuntala el mensaje que desde la izquierda abertzale venían lanzando en los últimos meses, en particular tras las elecciones municipales, en las que asegura que se está produciendo "un cambio de ciclo" en la sociedad vasca en beneficio de la izquierda abertzale. El PNV ha obtenido alrededor de 110.000 votos menos que en las anteriores elecciones generales de 2019. En votos el desgaste llegaría a ser incluso algo mayor a los más de 80.000 votos que perdió la formación el 28-M. Por su parte la izquierda abertzale ha obtenido alrededor de 260.000 votos, cerca de 50.000 más que hace cuatro años. Quien también ha visto mejorar en esa cantidad, cerca de 50.000 sus apoyos es el PSE.

"Votos decisivos"

En Álava es el PSE quien se ha impuesto en estas elecciones, frente al PNV que ha ganado en Bizkaia y EH Bildu en Gipuzkoa. En Álava PNV, PSE, PP y Bildu obtienen cada una de ellos un representante. En el caso de Gipuzkoa los populares no obtienen representación y los seis escaños se reparten a partes iguales entre Bildu, PSE y PNV. Por último, en Bizkaia, el PNV pierde uno de sus representantes y sólo obtiene dos, los mismos que el PSE y Bildu. Sumar logra uno y el PP otro.

A la valoración de los resultados, el presidente del PNV ha asegurado que son "satisfactorios" porque han logrado el objetivo prioritario que se habían propuesto, mantener el grupo propio que dota los cinco escaños logrados. Arropado por la dirección del partido, y con semblantes muy serios, el líder del PNV ha asegurado que los cinco diputados del partido serán "decisivos" tras los resultados tan ajustados que han arrojado las urnas.

Poco después ha comparecido el líder de EH Bildu, Arnaldo Otegi. Lo ha hecho en un clima de euforia por lo que ha definido como un paso más en "el cambio de ciclo" que se estaría produciendo en Euskadi. Se ha felicitado de que el total su coalición haya obtenido 335.000 votos "en esta parte del sur del país" -en referencia al País Vasco y Navarra-.

Ha afirmado que ellos no serán "equidistantes" y se ha posicionado a favor de facilitar un gobierno de Pedro Sánchez cuatro años más, "no habrá un gobierno del bloque reaccionario si de nosotros depende", ha asegurado.