Pere Aragonès ha despedido este martes el curso político dejando claro a Pedro Sánchez que la investidura va a ser más cara que en 2019, y no solo por el precio de Junts. El presidente de la Generalitat ha reclamado avanzar hacia la celebración de un referéndum de independencia y ha dejado claro que su exigencia de acabar con el déficit fiscal no pasa una reforma del sistema de financiación autonómica diluido en un café para todos.

"Nuestro objetivo es el fin de la represión y que Cataluña vote sobre la independencia" ha señalado Aragonès al ser preguntado por los límites fijados por PSOE y PSC a la negociación: todo lo que quepa en el marco constitucional afirman los socialistas para excluir tanto el referéndum como la amnistía que reclaman Junts y ahora también Esquerra.

El republicano ha cuestionado además que su reivindicaciónes "no quepan" en la Constitución. "Hay caminos para conseguirlo" ha señalado, "puede ser la mesa negociación -entre Gobierno y Generalitat- o la propuesta de acuerdo de claridad para fijar condiciones de un referéndum" ha insistido. "Lo importante no es el instrumento sino el qué: votar y que se acabe la represión".

Respuesta a Montero

El presidente de la Generalita ha respondido también a la ministra de Hacienda, Maria Jesús Montero, que este martes ha fijado la reforma del sistema de financiación autonómico como uno de los objetivos clave de la próxima legislatura. Unas declaraciones con las que la socialista entraba en el ámbito de negociación fijado inicialmente por Esquerra: acabar con el déficit fiscal y de infraestructuras que según el partido de Oriol Junqueras castiga a Cataluña.

Una oferta que Aragonès ha despreciado recordando que "el sistema lleva diez años caducado y Montero hace cinco años que es ministra" para ironizar sobre la "urgencia" señalada ahora por la titular de Hacienda. Pero el president ha ido más allá, dejando en el aire la participación de la Generalitat en la negociación del futuro modelo autonómico.

"Nosotros defenderemos a Cataluña, no iremos a negociar una financiación que implique a otras comunidades, no iremos de la mano de Ayuso y Garcñia Page" ha advertido Aragonès. "Iremos a defender que se reduzca el déficit fiscal" ha añadido. No ha concretado, sin embargo, si esa afirmación significa que la Generalitat volverá a dejar vacía su silla en el Consejo de Política Fiscal Financiera, como hizo durante los gobiernos de Artur Mas, Carles Puigdemont y Quim Torra.

Portazo insinuado al CPFF

En todo caso, ha advertido el presidente catalán, "las negociaciones no han empezado, cuando haya propuestas podremos valorarlas". En este sentido, Aragonès ha advertido contra las "especulaciones" sobre las propuestas del PSOE durante las próximas semanas.

"En agosto irán saliendo muchas ideas y propuestas, hablaran de sistema de financiación y el FLA" ha apuntado en referencia a las últimas declaraciones de Montero e informaciones periodísticas. Pero ha insistido que todavía "no se ha encarrilado la negociación y el primero que se tiene que mover es Pedro Sánchez. No me pronunciaré sobre aspectos que forman parte más de la especulación que de realidad".

En este contexto, ha reclamado a Montero "que no especule, si tiene propuesta que la diga y entonces nos posicionaremos". En cualquier escenario, ha añadido "nuestro objetivo será que Cataluña obtenga el máximo" pero "no puedo decir si será a través de CPFF o de otra vía".

El presidente de la Generalitat ha comparecido tras la última reunión del Consell Executiu previa a las vacaciones estivales con la investidura del próximo presidente del Gobierno en el horizonte. ERC apuesta abiertamente por pactar la investidura de Pedro Sánchez y por hacerlo de la mano de Junts. Pero los de Carles Puigdemont quieren hacer valer su posición de poder exigiendo un referéndum de autodeterminación como condición sine qua non para apoyar a un nuevo Gobierno de PSOE y Sumar.