La entrada de Arabia Saudí en el capital de Telefónica originará quebraderos de cabeza para el Gobierno en más de una área. El Consejo de Ministros tendrá la última palabra a la hora de autorizar la compra del 9,9% de la compañía, y muchos sectores tienen intereses tanto en España como en el país asiático.

A última hora de la tarde de este martes, la teleco saudita STC comunicaba la adquisición de la española por 2.200 millones de euros. El quid de la cuestión está en si el Gobierno terminará aprobando la compra al completo. Desde el inicio de la pandemia, hay aprobado un decreto anti opas por la que el Ejecutivo tiene que dar el visto bueno a la compra de más de un 5% cuando las compañías son estratégicas. Y Telefónica lo es.

Telefónica tiene importantes contratos con la Administración a todos los niveles. Desde ayuntamientos hasta el propio Gobierno, incluido el Ministro de Defensa. Este departamento será el encargado de redactar el informe final que pase por manos de Pedro Sánchez para aprobar la operación.

Millones en armas

El papel de Margarita Robles y su equipo es complicado. España mantiene importantes relaciones con el país árabe, muchas de ellas de carácter militar. En marzo, el Stockholm International Peace Research Institute (SIPRI) publicó un informe, recopilado por Público, en el que se recoge que el volumen de negocio en este ámbito ascendió a 950 millones de dólares en 2022 en concepto de “armamento convencional” o “armas grandes”. El año anterior fue de 594 millones.

Los datos oficiales del Gobierno rebajan esta cifra. Según el informe de exportaciones de material de defensa y doble uso elaborado por la Secretaría de Estado de Comercio y remitido al Congreso de los Diputados a principios de año, Arabia sólo compró 302 millones de euros en armas españolas. Eso sí, fue el mayor receptor de material bélico por delante de la Unión Europea y de la OTAN.

Estas exportaciones tienen que ser aprobadas por diversos organismos, entre los que está Defensa, el CNI o departamentos del Ministerio de Industria. En la venta de armas a países extranjeros hay muchos intereses: los de las empresas productoras, los del Gobierno español por mantener buenas relaciones con otras potencias y los que reciben el material.

Interés armamentístico

El interés del Ejecutivo por el mundo armamentístico ha crecido este 2023. En mayo, la empresa Escribano, la nueva joya de la corona, adquirió un 3% de Indra por 65 millones de euros. Con todos estos datos, Robles tendrá que poner en la balanza varios aspectos antes de convertir a Arabia Saudí en el principal accionista de Telefónica.

En un lado están las reticencias a que un país como el saudí entre hasta la cocina de la teleco española. Las infraestructuras y el volumen de datos que maneja la compañía pueden ser críticos en manos extranjeras. En el otro extremo están las empresas nacionales que comercian con la dictadura de Salmán bin Abdulaziz, que temen que una negativa del Gobierno a la compra de Telefónica pueda afectar a sus negocios futuros.

Otros negocios

Pero hay más. Arabia Saudí se ha convertido para España en uno de los socios de referencia en la importación de petróleo desde que Rusia cortó el envío de materias primas a Europa tras la invasión en Ucrania. En concreto, el país asiático es la cuarta región que más crudo envía hasta las reservas nacionales y representa el 6,9% del total, según los últimos datos de Cores emitidos en julio.

Y eso que en abril de este año, Arabia Saudí anunció un importante recorte de envío de barriles de petróleo a toda Europa debido al contexto socioeconómico actual. Esta decisión provocó que la importación de petróleo desde este país se haya recortado un 9,2%. Antes de que Arabia cerrara el grifo, la representación del país en nuestras importaciones era del 7,4% y en el interanual había crecido un 23,7%, según los datos de Cores.

Según datos de Trade Map, España ocupó el puesto número 14 en el ranking de países exportadores a Arabia Saudí en 2020. El saldo comercial en valor entre España y Arabia Saudí ese año resultó en un déficit que se ha reducido a 557 millones respecto a los 2.413 en 2019, mejorando la tasa de cobertura del 42% al 76% de un año para otro, informa Diego Molpeceres.

Los principales productos exportados por España a Arabia Saudí en 2020 fueron máquinas, aparatos y artefactos mecánicos, reactores nucleares, calderas y partes de estas máquinas. Los principales productos importados por España desde Arabia Saudí en 2020 fueron combustibles minerales, aceites minerales y productos de su destilación, y materias bituminosas.