El PP sigue gestionando los tiempos para la investidura de Alberto Núñez Feijóo con cuentagotas. Tras las citas semanales, con anterioridad, con el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, y el líder de Vox, Santiago Abascal, ha tocado el turno de un encuentro bilateral y parlamentario con Sumar, algo que no contaba con poca expectación. Un partido con el que el PP solo tiene en común el origen del liderazgo: Galicia. Frente a la disposición de reunirse, primero, solo con el secretario general socialista, Feijóo se dispuso a ampliar horizontes ante las críticas de que un candidato a la investidura renunciara, como se ha hecho con anterioridad, a verse con los grupos en el Congreso de los Diputados. Abascal y Yolanda Díaz -así como Aitor Esteban, del PNV- eran añadidos a esa ronda de contactos personal.

Frente a Abascal, que accedió al encuentro para tratar asuntos peliagudos como la postura del bloque conservador respecto a independentismos como el que representa Junts, Díaz añadía más complicaciones al asunto y declinaba la reunión con el líder del PP a principios de septiembre, vía carta que ni siguiera iba dirigida a Feijóo. Solo a Génova.

La condición para cambiar de opinión era "respetar los pactos sociales vigentes", en referencia a los recursos de inconstitucionalidad que el PP ha presentado durante la pasada legislatura. Los más reseñables: el de la reforma laboral o la ley trans. A ello sugería en añadido que al estar el trámite parlamentario "condenado al fracaso" no procedía el encuentro. Los populares, como único pronunciamiento dijeron que el motivo del rechazo de Díaz, abierta al diálogo permanente y a la mediación entre distintas posturas, caso de la patronal y los sindicatos, por ejemplo, respondía a una "falta de autonomía" dentro de una coalición de hasta quince partidos. Apuntando indirectamente a Podemos.

El PP censura a Diaz por evitar una reunión con Feijóo en el Congreso y dice de ella que prefiere encuentros con un prófugo, en alusión a Puigdemont"

Este posicionamiento se ha mantenido durante las dos primeras semanas de septiembre, aunque agravado por el viaje de Díaz a Bruselas para reunirse con Carles Puigdemont, el líder de facto de Junts quien lleva en Waterloo cinco años tras huir para evitar la acción judicial tras la DUI y el referéndum del 1-O de 2017. El PP se ha acogido desde entonces a un leitmotiv: la vicepresidenta segunda prefiere reunirse con "un prófugo" de la Justicia que con el ganador de las elecciones generales. Un acto que desde el PP se considera como el inicio "en la sombra" de las conversaciones con Puigdemont para avalar una investidura próxima de Sánchez.

Se hace catalogando la presencia de Diaz en Bruselas no como candidata de Sumar, sino como miembro del Gobierno. Aunque el PSOE ya ha desligado la acción de Díaz de un beneficio directo, incluso se empieza a rebajar cualquier expectación de disposición a una ley de amnistía que contente las exigencias de Junts para facilitar el trámite. Algo, que de proceder, sería como muy pronto en octubre, tras otra ronda de consultas con el Rey que alagaría más la conformación de un Gobierno.

Este domingo, tras otra misiva desde el cuartel general del PP por parte de Cuca Gamarra, se explotaba aún más el argumento. Se aceptaba, no obstante, a Lois como interlocutora, pero se rebajaba, sin embargo, aún más el grado de representación, como muestra de rechazo a la actitud de la vicepresidenta segunda. Gamarra, portavoz en las Cortes, delegaba a su segundo y número 'tres' del PP en el Congreso, el secretario general del Grupo Carlos Rojas la misión. Y ponía fecha: este martes. Así ha procedido en la III Ampliación del parlamento, en el número 36 de la Carrera de San Jerónimo de Madrid, donde han acontecido el resto de audiencias del PP y los grupos. Todo ello, en un ambiente tenso por el autodescarte de Díaz sin ni siquiera saber una fecha previa a la fijada ayer por Génova.

El secretario general del GPP en el Congreso recibe a Marta Lois, portavoz de Sumar, para negociar la investidura de Feijóo

Perfil bajo y con poca repercusión en el Congreso

Los propios partidos han refrendado la escasa relevancia que suponía el encuentro de este martes, reducido a una reunión protocolaria. A diferencia de las ocasiones anteriores, con Sánchez o con Abascal, el PP no ha compartido recursos gráficos sobre el encuentro. Sí lo ha hecho por su parte Sumar. La reunión entre Rojas y Lois se ha prolongado desde las diez de la mañana hasta las once. Y, después de ello, igualmente se ha rehusado de acudir a la sala de prensa del Parlamento para rendir cuenta de los asuntos abordados. Todo se ha limitado a dos comparecencias, en solitario, de ambos diputados. Primero la de Sumar, y luego el popular.

PP y Sumar han valorado una reunión reducida a un encuentro protocolario como 'cordial'"

La valoración conjunta de la audiencia ha sido de "cordial". Por su parte, Lois, que ha comparecido primero como grupo contactado, ha vuelto a insistir, tal y como ha trasladado Rojas, en la petición de Díaz hecha en su carta: la retirada de Feijóo de la investidura para ahorrar tiempo y permitir "avanzar hacia un Gobierno progresista", y de los recursos de anticonstitucionalidad a la nueva legislación del trabajo aprobada en febrero de 2022 y sobre la ley trans.

Las declaraciones de Rojas, por su parte, se han centrado en reivindicar que el PP ha sido el ganador de las generales, que está solo a cuatro votos de lograr la designación y que el encargo de investidura del Rey hace imposible ya su cese en dicho cometido. Asimismo, el secretario general popular ha indicado que, como ha hecho Feijóo hasta la fecha con PSOE y Vox, se ha trasladado el documento de legislatura sugerido: dos años de mandato revisables para poner en marcha y aplicar seis pactos de Estado. Como el PSOE, Sumar lo ha rechazado. Rojas también le ha trasladado personalmente la postura de la Ejecutiva popular sobre el encuentro de Díaz y Puigdemont, que ha calificado de "inaceptable". El mismo término ha empleado para referirse a la posible amnistía de Sánchez al independentismo.

El próximo jueves Gamarra volverá a encabezar el equipo negociador en las Cortes con su encuentro con el portavoz parlamentario del PNV, Aitor Esteban. El diputado vasco se abrió a un encuentro con Feijóo para conocerse "personalmente". Sin embargo, la insistencia en el veto a su investidura han hecho desistir al popular. Está pendiente, además, un encuentro con el representante del BNG, cuyo desplante a Felipe VI durante la ronda de consultas de agosto será objeto de reproche por la popular.