Marta Lois -que se ha repartido las réplicas de Sumar con Enrique Santiago de IU y Aina Vidal, de los comunes- ha defendido abiertamente una ley de amnistía para los implicados en el proceso independentista, -algo que no ha hecho el socialista Óscar Puente-, así como el carácter "plurinacional" de España. Sentadas estas bases, la dirigente gallega le ha espetado a Alberto Núñez Feijóo que él no se opone a la amnistía por sí misma sino que está "en contra de todo aquello que pueda evitar que lleguen al poder. Están desesperados porque entienden que el gobierno les corresponde por derecho propio". Y dicho esto, le ha sacado un cartel con una cifra, 12.494.575, que son todos los votos que suman las fuerzas políticas que "no quieren que usted sea presidente del Gobierno. 1.200.000 personas más no le quieren" de las que suman PP, Vox, UPN y CC.

"No vale abdicar de la política y jugar a al desestabilización y hacer llamadas indecentes al transfuguismo", ha agregado la portavoz de Sumar con un tono diametralmente opuesto al de su compañero de grupo, un exaltado Enrique de Santiago, que ha salido en defensa cerradísima de la licitud, a su juicio, de la amnistía.

También a acusado a Feijóo de llevar "semanas dando vueltas sobre su propio fracaso. Su tiempo se acaba. Termina su viaje a aquí, un viaje a ninguna parte porque no puede gobernar un país que no comprende. Es una mentira permanente. Asistimos a un fracaso". Además, considera incierto el argumento de Feijóo respecto a que podría ser presidente si cediera a las pretensiones secesionistas. "No es cierto que no será presidente por no ceder sino porque su alianza con la extrema derecha le separa del país real que dice representar. Representa la soledad institucional que ustedes tienen".

Contra la trayectoria de Yolanda Díaz

El aludido le ha agradecido el tono, pero ha entrado a saco con la trayectoria política de su jefa de filas, Yolanda Díaz, a la que acusó de venir a Madrid tras fracasar electoralmente en Galicia y hacerlo de la mano "de un político que ahora aborrece", en alusión a Pablo Iglesias. También le ha reprochado irónicamente haberle dado "una clase de voto impresionante" cuando " tienen 106 escaños menos que el PP y nos llaman perdedores y fracasados. El que gana es un perdedor, todos los que pierden son ganadores, uno es un golpista y otros son interlocutores válidos de la democracia española".

Y siguiendo con el mismo tono sarcástico ha aludido, de forma algo farragosa, a la división del "Grupo mixto plus" al insinuar que si hiciera ministra a Irene Montero acaso los cinco escaños de Podemos romperían la disciplina de voto.

"Si no fuera insultante, esto resultaría enternecedor. Son la muestra de la degradación de España. Han proscrito a Montero, relegado a Garzón, nadie se atreve a decir si cuentan con Belarra... Las purgas en la izquierda son muy dolorosas. Llegaron para combatir la casta privilegiada y llevan años haciéndolo con un Código Penal a la carta para los políticos y malversación de fondos públicos. Venían a aportar transparencia y no han dicho nada de lo que habló con Puigdemont. ¿¡Si no han hablado mas que de cargos durante toda la campaña!?".

Y como colofón les ha felicitado "por su gran triunfo con estas proyecciones en las próximas elecciones se irán al espacio", en referencia a las recientes manifestaciones de Díaz diciendo que los megarricos está preparándose para huir de la Tierra, no sin dejar de acusar a Sumar de "compadrear con regímenes iberoamericanos y con Putin. Esto es Sumar. Su sentido institucional ha quedado claro esta semana porque la vicepresidenta se ha negado a reunirse con el candidato a la investidura propuesto por el Rey, pero acudió a Bruselas" a entrevistarse con Puigdemont. En definitiva, "seguirán repartiéndose los cargos hasta la derrota final".