Al choque electoral entre Sumar y Podemos, que no se materializará en cifras, al menos, hasta los comicios gallegos, vascos y europeos del próximo año, se ha unido una enésima variante: la mediática y de capacidad de convocatoria. Hasta este lunes, había que remontarse algo más de dos meses para asistir a un desplante generalizado de los medios de comunicación en la sede nacional de Podemos. El del miércoles 11 de septiembre era el único precedente, recién iniciado el curso político. Entonces, Podemos convocó a las diez de la mañana a una rueda de prensa que cotidianamente solía fijarse a mediodía, lo que hizo coincidir la morada, en la calle madrileña de Francisco de Villaespesa 18, con la de Sumar, a las diez y media en Larra 14.

Entonces, y tras las elecciones generales de julio, Podemos había dejado de ser la fuerza hegemónica de la izquierda. Quedaba diluida como integrante de la confluencia liderada por Yolanda Díaz, y subordinada a las acciones del movimiento de la vicepresidenta segunda del Gobierno. A nivel material, se antojaba posible para la prensa presentarse en los dos puntos geográficos en un par de minutos. Desde el fortín morado hasta Larra la distancia superaba los ocho kilómetros y los 20 minutos de duración media en transporte público.

Este suceso, se ha producido, de nuevo, en esta apertura de semana tras la reunión de ambas direcciones nacionales para planificarla. En funciones está la de Sumar hasta su primera Asamblea, que ahora copa el Espacio Rastro, de la calle San Cayetano, como centro de comparecencia semanal. Reiteradamente, en las últimas semanas, ambas formaciones, como asociadas, primero, y en las posteriores tras la ruptura en el Congreso de los Diputados, mantenía un margen de tiempo para que los miembros de la prensa que lo deseasen pudieran desplazarse de la rueda de Ernest Urtasun, portavoz nacional de Sumar, a la de los morados. La primera se iniciaba en torno a las 10:30 horas, mientras que la segunda procedía a las 12:30 horas.

En esta última ocasión, y con el anuncio oficializado y en proceso de asimilación de la exministra Irene Montero como candidata para las elecciones al Parlamento Europeo, los magentas se adelantaban a la convocatoria de Podemos la tarde del domingo, y citaban a los medios a la hora a la que acostumbran los morados. Horas después, desde Podemos, lejos de cambiarse, para contar con presencia asegurada, se mantenían los mismos tiempos.

Por la mañana, el portavoz nacional, Pablo Fernández, y la secretaria de Acción Institucional, María Teresa Pérez, se encontraban con un panorama idéntico a septiembre -entonces Fernández estaba acompañado por la también portavoz Isa Serra, en lugar de Pérez-: un vacío completo de la sala, que suele acostumbrar a tener desde un lleno moderado a uno alto, dependiendo de las circunstancias. Estas dos escenas en menos de dos meses son insólitas para un partido que desde hace casi una década lleva recibiendo una amplia cobertura mediática.

El anuncio electoral de Montero para las europeas no ha conseguido un efecto arrastre mediático"

La situación política de Podemos se ha agravado notablemente pese al intento de marcar la agenda con anuncios como el de Montero como candidata previo paso por proceso de primarias. Si bien en la anterior ocasión la atención desmesurada a Sumar se justificaba por ser el 'contenedor' de los partidos de la confluencia y por estar negociando con el PSOE el nuevo Gobierno, ahora Podemos ya no es partido de gobierno, es una parte más del Grupo Mixto del Congreso de los Diputados, lo que rebaja su capacidad de actuación. Todo, teniéndose en cuenta que sus cinco diputados son clave para la continuidad de la legislatura y el Gobierno progresista. Y que ha salido ganando a nivel económico y de visibilidad en dicho órgano: Belarra será vocal del Mixto en la Diputación Permanente y como relevo del BNG.

Las consecuencias de este 'vaciado' presencial, que pese a todo ha tenido seguimiento del directo en streaming de más de un centenar de personas por canales como YouTube, ha sido que tanto Fernández como Pérez se limitasen a la exposición de sus ejes políticos. Lo mismo le ocurrió al vallisoletano junto a Serra en septiembre, evitándose así el turno de preguntas. Momento de más interés para los periodistas. Ni siquiera ha habido peticiones de forma telemática. El anuncio de Montero, a nivel mediático, no ha tenido mayor arrastre que el propio anuncio del sábado. Sí se consultó a Urtasun, para que hiciera una valoración, que no se obtuvo pese a la insistencia reiterada: "Sumar va a estar en lo que necesita la gente".

Dos ruedas, mismos temas

A la rueda de prensa de Sumar, Urtasun acudió junto al diputado y portavoz de Economía y Hacienda, Carlos Martín, vinculado a CC.OO. Allí, éste abordó, con perspectiva de gobierno y no de oposición, la misma cuestión que Podemos: el impuesto a la banca y a las energéticas, y su confianza de continuidad como refleja el documento de acuerdo con el PSOE. Le sumó la insistencia para la continuidad de beneficios como la gratuidad del transporte público en el próximo decreto de sostenibilidad. Una cuestión, la primera, que sale a relucir en este inicio de semana días después de que la vicepresidenta primera y ministra de Economía, Nadia Calviño, anunciase, antes de reuniones con la patronales, que la revisión de algunos "parámetros" del impuesto está enmarcada en el pacto. Podemos, en cambio, abogó por ampliarlo, hacerlo permanente y estructural.

Gaza e Israel fue otro punto a destacar entre Urtasun y Fernández. El ministro de Cultura estableció la mismas demandas que los morados: "Se puede ir mucho más allá en Gaza" con el "reconocimiento del Estado Palestino (...) de la mano de aquellos países europeos que quisieran dar ese paso"; presionando a la Fiscalía de la Corte Internacional para que juzguen "crímenes de lesa humanidad"; y "revisar los contratos de compra-venta con Israel".

Al margen de la reivindicación de garantías humanitarias para los migrantes o que se culmine el proceso de independencia saharaui, así como el anuncio de primarias territoriales hecho por Pérez, Fernández hiló la puesta de escena morada con el marco europeo. En una intención clara de promocionar a Montero mientras que desde Sumar lo hacían con el plano social y desde el punto de vista de la gestión.

Tras agradecer "la afluencia masiva" de la militancia al acto del sábado y destacar "la valentía" de Montero por su "paso" electoral, Fernández relacionó el hecho con la deriva que, a juicio de Podemos, atraviesa la UE. "Está girando de forma grave a la ultraderecha y atendiendo al racismo, a la xenofobia y a la carrera armamentística", dijo, añadiendo que Europa necesita "un grupo fuerte, sin ambages", frente a socialistas y verdes -donde Podemos enmarca a Sumar por la presencia de socios clave como Más Madrid o los comunes-.

Se añadió que el miércoles, en la comparecencia de corte 'internacional' del presidente del Gobierno, para explicar las reuniones con el Consejo Europeo y su acción al frente de la Presidencia rotatoria de la UE, se exigirá a Sánchez acciones frente a la hipocresía y el cinismo de la UE" en Palestina y Gaza. Entre ellas, la condena de la actuación israelí o el bloqueo de suministro armamentístico.

Sumar rompe la dinámica

Reiteradamente, Sumar ha convocado sus ruedas de prensa nacionales a la misma hora lunes tras lunes salvo festivos desde el comienzo de la legislatura y meses antes. Y siempre a las 10:30 horas de la mañana salvo ese miércoles 11 de septiembre. Habrá que ver si el partido magenta vuelve a la dinámica anterior, se adapta a la de ayer o si es Podemos quien protagoniza algún movimiento.

El acto de promoción de Montero como elegible para las europeas, con papeleta diferenciada a Sumar, fue una demostración de fuerza individual que, internamente, a los magentas no les gustó. Supuso, de alguna forma, una contraprogramación al evento de presentación de la estructura de Sumar Galicia de cara a las elecciones.