La Generalitat invertirá 1,5 millones de euros en cursos de catalán a 2.700 profesionales sanitarios este 2024. Una partida que confían en repetir anualmente para garantizar el conocimiento del catalán en el ámbito sanitario. Lo anunciaron este jueves los consejeros de Empresa y Salud del gobierno autonómico, con el objetivo de que todo el personal sanitario sea capaz de dirigirse a los pacientes en catalán. "No hay día que no llegue una queja de alguien que no ha sido atendido en catalán" se lamentaba el titular de Salud, Manel Balsells, para explicar la importancia del plan, en el que se ha involucrado al Consorcio de Formación Continua y el de Normalización Lingüística, y que financiará la consejería de Empresa.

Los cursos serán un primer paso, ha advertido Balsells, para exigir con más contundencia la obligación de conocimiento del catalán. "Hay una realidad, no se cumple la normativa, seguramente se ha sido laxo" afirmó el consejero entonando el mea culpa de la administración. "En todo caso no miramos el pasado, miramos futuro y lo que tenemos que hacer es implementar medidas para revertir la situación".

En los últimos años se han multiplicado las denuncias de activistas de la lengua contra profesionales sanitarios por no atender en catalán, con algunos casos especialmente polémicos, como el de la enfermera expedientada por reírse de la exigencia del nivel C1 de catalán. Una situación propiciada en gran parte por el déficit de profesionales en Cataluña, que ha obligado a contratar a trabajadores del resto de España o foráneos.

Catalán obligatorio

En este contexto, Balsells fue claro: "Todo el mundo tendrá que demostrar el conocimiento del catalán para consolidar una plaza fija". De hecho, apuntó el consejero, se trata de una obligación fijada por ley que hasta ahora no se ha cumplido de forma suficientemente estricta a su juicio. La normativa catalana exige el nivel C1 de catalán para todos los médicos de la sanidad pública.

"El mensaje es claro" añadió, "todo el que venga del Estado español es bienvenido, les facilitamos que aprendan la lengua" tanto a residentes como a técnicos o enfermeros, pero "en el momento en que accedan a la plaza de adjunto -en el caso de los residentes- tendrán que acreditar el nivel" de catalán que "habrán tenido tiempo de aprender".

"Tenemos que compaginar el que lleguen profesionales de fuera, hacer atractivo que aprendan el catalán y exigirlo al estabilizar la plaza" concluía Balsells, quien ha advertido que no van a fiscalizar el idioma utilizado en las consultas, pero sí atenderán cualquier queja en este sentido. "El catalán se usa poco en el sistema sanitario, hace falta formación, formemos y después iremos exigiendo y vigilando pero primero tenemos que sentar las bases para que todo el mundo pueda conocer bien la lengua".

Gratuitos y en horario laboral

Para conseguir ese objetivo se ofrecerán 2.700 cursos gratuitos, a realizar online en horario laboral, explicó el consejero de Empresa, Roger Torrent. Así, se ofertarán tres tipos de cursos con 900 plazas cada uno: nivel elemental (correspondiente con el B1), intermedio (B2), y nivel de suficiencia (C1). Son cursos de 100 horas, 60 de autoformación tutorizada y 40 de prácticas de conversación, a impartir entre marzo y noviembre de 2024.

Al completar el curso, los sanitarios obtendrán el titulo de catalán del nivel correspondiente sin necesidad de pasar más pruebas del Consorcio de Normalización Lingüística. Los cursos se han adaptado al entorno sanitario, añadió Torrent. El curso "está pensado para mejorar las competencias de los trabajadores del sector sanitario, para poder prestar un mejor servicio a la ciudadanía y garantizar los derechos lingüísticos" de los pacientes.

Balsells aclaró además que el objetivo del Govern es mantener este programa en próximos ejercicios para garantizar el aprendizaje del catalán de todos los profesionales que se incorporen al sistema sanitario catalán. "Esperamos hacer más cursos en los próximos años" aseguró.