El Gobierno de Navarra considera la asunción de la competencia de Tráfico es parte de los "derechos históricos" que tiene reconocidos en la Constitución y que la sentencia del Tribunal Supremo, de algún modo, supone una cuestionamiento al autogobierno foral. El tribunal, pese a que no cuestiona el traspaso, ha anulado la aprobación vía Real Decreto del mismo. La presidenta María Chivite ha expresado su malestar no sólo por la resolución sino por haberse enterado "por la prensa" de la misma y por suponer un cambio de posición del mismo tribunal.

Chivite ha recordado cómo existe jurisprudencia anterior del propio TS, del año 2018, en la que hasta en dos sentencias concluye que la disposición adicional primera de la Constitución se ampara en los derechos históricos de los territorios forales y que este título, concluyen las resoluciones, "es suficiente para efectuar el traspaso", ha asegurado Chivite.

Ha recordado que tanto los servicios jurídicos del Gobierno de Navarra como las letradas de la Cámara foral emitieron sendos informes en los que se basaban en jurisprudencia del Supremo "pero se ve que su posición ahora no casa con su propia jurisprudencia". La presidenta del Ejecutivo ha avanzado que tras analizar en profundidad la sentencia se procederá a modificar el marco en el que se aprobó el traspaso de la competencia, ahora compartida con la Guardia Civil, para que la asuma en su integridad la Policía Foral.

Una nueva ley o la LORAFNA

Ahora, tras quedar anulada la vía del Real Decreto, las dos vías que se estudian pasan por modificar la LORAFNA (Ley Orgánica de Reintegración y Amejoramiento del Régimen Foral de Navarra) o mediante una ley orgánica de traspaso, como fija el artículo 150.2 de la Constitución. Chivite se ha mostrado convencida de que contará con todo el apoyo del Gobierno de España en el proceso. Estas vías a las que ahora obliga el Supremo requerirán acordar mayorías suficientes para sacar adelante la modificación legislativa. Para ello, Chivite ha solicitado su comparecencia en la Comisión de Régimen Foral, donde además ha avanzado que sondeará el apoyo del resto de grupos para sacar adelante en la Cámara Baja la nueva tramitación por la que finalmente se opte.

Chivite recuerda que la aprobación de la transferencia de Tráfico a Navarra es una cuestión que se arrastra desde hace al menos dos décadas, en tiempos de Miguel Sanz y José María Aznar. Ha subrayado que se trata de una cuestión básica del autogobierno navarro y que corresponde a ella "defender el régimen foral de Navarra". "Es nuestro autogobierno, nuestra esencia e historia y en anclaje constitucional de nuestro proyecto común que es España", ha dicho en una comparecencia ante los medios.

Ha asegurado que seguirá adelante para que la transferencia de la competencia continúe el camino que ya había iniciado desde que fue firmada en 2022. Respecto a la situación en la que quedan los pasos ya dados en este proceso, Chivite ha evitado pronunciarse hasta conocer el impacto que pueda tener.

Una 'pasarela' hacia la Policía Foral

Desde el sindicato Jucil, que recurrió la tramitación vía decreto de la transferencia, se recuerda que la decisión del Supremo vuelve a suponer un revés para las cientos de familias que siguen pendientes de cuándo y cómo se procederá la asunción íntegra de la competencia por parte de la Policía Foral.

Actualmente la Guardia Civil y la Policía Foral llevan a cabo de manera conjunta y coordinada las labores de Tráfico y Seguridad vial. A partir de la asunción de la competencia la policía navarra debería asumir de modo completo la materia. Inicialmente el escenario que se plantea es el de una asunción progresiva a lo largo de un periodo de cinco años. Durante este tiempo se abrirá una 'pasarela' para que los agentes de la Guardia Civil que lo deseen puedan pedir el ingreso en la Policía Foral una vez desaparezca la unidad de la benemérita en Navarra.

Desde Jucil insisten en que hace apenas unos días se llevo a cabo una reunión con la Delegación del Gobierno en Navarra sin que hasta el momento se les hubiera informado sobre las condiciones en las que se procederá a ofertar las plazas. El calendario con el que se trabaja es el de convocar una OPE a finales de marzo o comienzos de abril en la que se detallaría las condiciones en las que podrían integrarse los agentes de la Guardia Civil en la Policía Foral. El cuerpo navarro requerirá de prácticamente 180 agentes nuevos -que se estima que la mayoría procedan de la Guardia Civil- para poder abarcar todas las necesidad que requerirá asumir de modo integral la competencia de Tráfico.