Los ocho narcos investigados por asesinar a dos guardias civiles en Barbate, Cádiz, no lo tuvieron fácil para encontrar un abogado que los defendiese. "Nadie quería llevar ese tema", explican fuentes conocedoras a El Independiente.

En el mundillo de la delincuencia que tiene que ver con la droga todo el mundo se conoce. También los abogados defensores de narcos. Entre clanes se prestan trabajadores, pero también quien les lleve los asuntos legales cuando la Policía o la Guardia Civil les termina deteniendo.

Los hechos del pasado 9 de febrero no fueron normales. Ni siquiera para un tipo de delincuentes que cada vez emplean más violencia contra los agentes que les persiguen. Una narcolancha, que fondeaba en el puerto de Barbate por el mal temporal, empezó a embestir contra la zódiac en la que viajaban seis guardias civiles. Los agentes tenían la misión de identificarles.

Tras pasarles varias veces por el lado, consiguieron tirar a varios de ellos al agua. Entonces, el piloto de la embarcación de 15 metros, el Cabra presuntamente, les pasó por encima. Acabó con la vida de dos de ellos, un submarinista y un miembro del GAR, e hirió a otro tantos, uno de ello de gravedad. La intervención médica le consiguió salvar la mano.

Tras arrollarlos, emprendieron la huida. Una gran dipositivo policial fue deteniendo, poco a poco, a los seis integrantes de la lancha. También a dos personas que desde tierra se acercaron a rescatarlos con un vehículo de gran tamaño.

"Nadie les coge el teléfono"

La jueza que empezó instruyendo el caso -era una sustituta a la que reemplazará el titular en estas fechas- decretó el ingreso en prisión de los seis detenidos que iban en la embarcación. A los del coche les impuso la libertad provisional con medidas cautelares. Ahí empezaron los primeros problemas de los narcos investigados.

"Llamaron a varias puertas para nadie les cogió el teléfono", explican las fuentes consultadas. Los abogados más conocidos en la zona no querían llevar este caso. Saben que una cosa es meter kilos y kilos de cocaína, o blanquear los beneficios del narcotráfico -muchas veces difícil de probar-, y otra muy distinta acabar con la vida de dos guardias civiles.

Pero tampoco sus jefes están por la labor de dejarles grandes partidas de dinero para defenderse. Los grandes capos saben que la presión policial va a aumentar en los próximos meses, que tendrán que incrementar la seguridad y ser más discretos. La orden es que no se les ocurra cambiar de abogado.

Este periódico ha podido saber que los ocho han contratado al mismo letrado, Antonio Navas. En las agendas de los jefes de la droga no aparece entre los destacados. Este periódico se intentó poner en contacto con el abogado, pero rehusó hacer comentarios.

Rechazadas las asociaciones

Esta semana pasada, el 19 de febrero, la magistrada del Juzgado de Intrucción número 1 de Barbate ha inadmitido la personación de todas las asociaciones que habían pedido ser parte de la acusación en el asesinato de los dos agentes.

Varias organizaciones habían pedido ser parte en el proceso. Entre ellas, la Unión Federal de Policía, la Asociación Unificada de Guardias Civiles, la de Suboficiales, Jucil, la Unión de Oficiales y la asociación de Defensa Integral de Víctimas del Delito, pero la jueza las ha rechazado. Algunas de ellas han confirmado a El Independiente que presentarán una querella por esta decisión para poder estar presentes en el proceso.

Además, este domingo unas 5.000 personas han participado en la manifestación Por la Dignidad de Barbate en protesta por la continua vinculación del pueblo al narcotráfico, según informó Efe.

El Ayuntamiento barbateño organizó esta movilización, que se ha desarrollado por las calles de la localidad gaditana y en la que los ciudadanos han mostrado el dolor que les produce que el pueblo se vea asociado "con situaciones de violencia vinculadas al tráfico de drogas", un problema nacional "que afecta a todo el litoral de Andalucía y Galicia".

El alcalde, Miguel Molina, mostró su "malestar" por el "trato injusto" que en ocasiones ha recibido Barbate en los medios de comunicación, "dañando la imagen" de un pueblo que trabaja arduamente por dejar atrás "estigmas y estereotipos".

El consistorio de Barbate ha querido "alzar la voz" para que desde las distintas administraciones "asuman las responsabilidades que les corresponden" según sus competencias, y "apoyen de una vez por toda a un municipio históricamente olvidado y maltratado por ellas".