Carles Puigdemont podrá volver a Cataluña en julio. Lo ha afirmado este jueves el secretario general de Junts, Jordi Turull, que en los últimos meses ha sido uno de los negociadores de la ley de amnistía pactada con el PSOE. La previsión de JxCat es que Puigdemont pueda ampararse en la amnistía para regresar a España cuando hayan pasado dos meses de la aprobación de la Ley de Amnistía, que sitúan a mediados de mayo.

Desde Junts advierten, sin embargo, que es una "decisión personal" del propio ex president y que será él quien decida en qué momento regresa a España. Turull ha dado por sentado que Puigdemont será el candidato del partido a las elecciones europeas del próximo 9 de junio. Pero eso no excluye que el ex president encabece la lista de JxCat en las próximas elecciones autonómicas, especialmente si se cumplen las previsiones del partido independentista.

Más allá del retorno de Puigdemont, objetivo irrenunciable para su partido, una vez cerrado el acuerdo han llegado los matices. Turull, ha tardado apenas unos minutos en responder al ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, para dejar claro que la amnistía que el Congreso aprobará hoy en primera instancia en la Comisión de justicia en ningún caso representa una renuncia de Junts a la independencia. "La amnistía no soluciona el conflicto político" ha advertido Turull, en contra de lo que defiende el PSOE, porque el "conflicto" para los independentistas está en el ejercicio de la autodeterminación.

Al contrario, en línea con lo avanzado este fin de semana por el propio Carles Puigdemont, Turull ha dejado claro que la amnistía sirve para "cerrar la represión" y abrir una nueva etapa, en la que la independencia vuelve a ser el objetivo prioritario de su partido. "No lo dejaremos" de intentar, ha advertido. Un discurso que los de Junts comparten con ERC. Tanto el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, como el líder de Esquerra, Oriol Junqueras, han advertido que la amnistía permite abrir la "segunda fase" de la "resolución del conflicto" que no es otra que la celebración de un referéndum de independencia.

Batallar su aplicación

Aragonès, por su parte, ha saludado la aprobación de la proposición de ley en la Comisión de justicia como una "buena noticia" y "el inicio del final de una pesadilla en forma de prisión, exilio, inhabilitación y ruina económica, de una amenaza sobre centenares de personas". La votación de este jueves "es una mala noticia para los que desde la Audiencia Nacional y el Tribunal Supremo se dedican a hacer política con el Código Penal" ha añadido el president, que ha reconocido que "tendremos que batallar".

Los republicanos sostienen que las enmiendas introducidas por Junts en los últimos días son meros retoques, que no introducen nuevas garantías de aplicación de la amnistía. una aplicación que Aragonès advertía este jueves que "tendremos que batallar". "Son retoques estéticos" ha asegurado la secretaria general del partido, Marta Rovira, para quien "lo importante" es que el dictamen haya salido adelante.

Desde Junts, por contra, aseguran que los cambios introducidos en el texto y pactados en los últimos tres días suponen el blindaje necesario para que la amnistía ampare también a los procesados por las causas de Tsunami Democràtic y 'Operación Judas', al ligar las exclusiones de terrorismo a la definición de este delito que hace la Directiva europea.

Presupuestos por negociar

Turull ha rechazado además que el acuerdo logrado con el PSOE y ERC sobre la ley de amnistía implique el apoyo de su partido a los Presupuestos Generales del Estado (PGE). "Amnistía era investidura. Nosotros ya hemos cumplido la investidura y ahora ya hay amnistía. Ahora comenzaremos el tema de los presupuestos. No hemos engañado a nadie", advertía en una entrevista en Rac1.

El dirigente independentista ha reconocido, eso sí, que el acuerdo de amnistía genera "un clima mucho más favorable" para negociar las cuentas del Gobierno. "Si no hubiera ley de amnistía, seguramente habría saltado todo por los aires. Pero la amnistía estaba en la investidura y nosotros hemos cumplido. Pedro Sánchez ya es presidente del Gobierno", ha insistido.

Por ello, ha dejado claro que el marcador de la negociación de los PGE "está a cero". En este contexto, Turull no ha querido aclarar si su exigencia para apoyar los presupuestos será el pacto fiscal que este martes reclamaron instituciones económicas catalanas. "No haremos la carta a los reyes en público de lo que queremos que pase para que haya PGE. Lo sabe la vicepresidenta, con la que es cierto que ha habido contactos en este sentido. La gente quiere anuncios de acuerdos o desacuerdos", ha zanjado.