Es una cuestión sensible para el PNV, una crítica repetida y rebatida históricamente pero que jamás pensó que llegaría desde el independentismo catalán. La propuesta hecha por el president de Cataluña, Pere Aragonès de reclamar una suerte de ‘cupo a la vasca’ para Cataluña no es lo que ha molestado en Sabin Etxea. Lo que ha hecho estallar al partido de Andoni Ortuzar es la puntualización de que en el caso catalán ellos sí serían solidarios con el resto de Comunidades Autónomas al incluir un ‘Fondo de reequilibrio territorial’ para contribuir a la “equidad entre territorios”. Aún escuecen entre los jeltzales las palabras de la consellera, Natalia Mas, asegurando que en el modelo de cupo vasco las aportaciones para resto de Comunidades Autónomas son “casi inexistentes”.

“Pedimos respeto”, aseguró el candidato a lehendakari del PNV, Imanol Pradales, “no admitimos que se sugiera que el Cupo vasco es insolidario”, afirmó molesto. Tanto él como el consejero de Economía del Gobierno vasco, Pedro Azpiazu, han exigido que no se “mezclen las cosas”. Lo han hecho recordado en las últimas horas que el País Vasco sí es solidario, “pagamos más de lo que nos corresponde”. Afirman que, tanto desde el punto de vista económico como demográfico, Euskadi abona hoy al Estado un porcentaje mayor del que le correspondería si se aplicaran de modo estricto ambos indicadores. Desde 1981 el porcentaje que se asignó al País Vasco para sufragar el sostenimiento financiero de las competencias del Estado no transferidas se estableció en el 6,24%.

Precisamente ayer Aragonès aseguró que, una vez aceptada su propuesta de financiación propia, la contribución de Cataluña al fondo interterritorial sería temporal. Propuso que para compensar esa retirada de su aportación se proceda a adelgazar la Administración General del Estado.

En estas cuatro décadas tanto la población vasca como el peso de la economía vasca en el conjunto del país han ido descendido. Según datos del Instituto Nacional de Estadística, si en 2020 la economía vasca representaba el 6,3% del PIB nacional, dos décadas más tarde había caído al 5,93%. En el caso de la población la evolución a la baja ha sido similar, pasando de representar el 5,14% en 2000 a apenas el 4,62% en la actualidad: “Contribuimos mucho más allá de nuestro peso”, aseguró Pradales. El candidato del PNV añadió que Euskadi también es solidario al hacer aportaciones al Fondo de Compensación Interterritorial “del que no recibimos nada”. Subrayó que el Concierto Económico vasco es “singular, solidario y de riesgo unilateral”: “Nadie viene a rescatarnos, ni el Estado pone dinero si nos van mal las cosas”.

El enfrentamiento entre el líder de ERC y el PNV irrumpe en plena precampaña electoral vasca y catalana. La sintonía entre ERC y el PNV no es especialmente fluida. ERC ha logrado entenderse mejor con EH Bildu. La formación de Ortuzar se ha acercado más en los últimos meses a Junts, si bien con ambos partidos mantiene una relación que viene de lejos pero cuya intensidad se ha ido acomodando a las circunstancias de cada momento.

Ley Quinquenal

Fue hace poco más de un año, en febrero de 2023, cuando el Congreso de los diputados aprobó la modificación de la Ley Quinquenal del Concierto Económico en la que además de incluir la concertación de nuevos tributos se actualizó la metodología de cálculo del Cupo a pagar por Euskadi al Estado por las competencias no transferidas que presta en el País Vasco. En esa actualización del marco de relaciones financieras ‘singular’ que tiene Euskadi se mantuvo el índice de imputación del 6,24%, que establece el porcentaje que las arcas vascas deben pagar del gasto total del Estado en esas materias en el conjunto del país. Se trata de servicios no transferidos, como los relativos a Defensa, Exteriores, Monarquía, puertos, aeropuertos o el Tribunal Constitucional, entre otros.

En la ley quinquenal 2022-2026 se estableció una aportación provisional anual de 1.472 millones de euros en concepto de Cupo. Una cuantía ‘base’ a partir de la cual después ambas administraciones deben realizar ajustes de los costes que una y otra han prestado pese a no ser se competencia. La liquidación resultante es la que finalmente establece la cuantía a abonar.

En los últimos años el Cupo que el País Vasco ha pagado ha ido evolucionando de manera moderada. Lo ha hecho con unas variaciones al alza inferiores al repunte de la recaudación de sus tres haciendas forales. Así, en 2018 el Cupo supuso un desembolso de 951 millones de euros, el equivalente al 6,3% de la recaudación total por tributos concertados (14.981 millones de euros). Al año siguiente los parámetros fueron muy similares, así como en 2020, cuando se abonaron 1.038 millones por Cupo, el 7,4% de la recaudación.

Una recaudación al alza

En el año 2021 se llevó a cabo un ajuste profundo correspondiente a la financiación de las partidas de dependencia y políticas activas de empleo que había estado soportando la Administración vasca pese a ser competencia estatal. El ajuste se trasladó al Cupo y su cuantía cayó hasta los 723,9 millones de euros, el 4,5% de la recaudación total.

En los últimos seis años las haciendas vascas han ido superando su volumen de recaudación por impuestos como el de Sociedades, IRPF o IVA, además de otros impuestos concertados. En el último ejercicio, el correspondiente al año pasado, la recaudación fue un 20% superior a la de 2018. En total se ingresaron en las arcas públicas vascas 18.212 millones de euros.

El acuerdo del Concierto Económico se remonta a 1878, cuando tras la abolición de los fueros vascos después de la II Guerra Carlista Cánovas del Castillo acordó un sistema de contribución de las provincias vascas a las finanzas del Reino de España. Para ello reconoció a las diputaciones vascas la facultad de recaudar impuestos y detraer después de todos ellos la parte para sufragar su parte alícuota a los gastos comunes del Estado. Y así se mantuvo el sistema vigente hasta que tras la Guerra Civil Franco decidió suspenderlo en Vizcaya y Guipúzcoa –y mantenerlo únicamente en Alava- por ser “provincias traidoras”. En 1981, durante la Transición, el Concierto Económico se recuperó en las tres provincias vascas.