Marruecos vuelve a agitar el fantasma de Ceuta y Melilla días después del cierre unilateral de las aduanas de ambas ciudades autónomas y tras la carta de un ministro marroquí al líder del PP afeándole la invitación a su congreso nacional del delegado del Frente Polisario en España. El aniversario de la crisis del islote de Perejil ha servido de pretexto para la reaparición en escena del activista Yahya Yahya, exparlamentario y presidente del Comité para la Liberación de Ceuta, Melilla y las islas adyacentes, rebautizado ahora como Coordinadora Nacional para la Defensa de las Causas del Reino de Marruecos.
Este sábado Yahya encabezó un nuevo encuentro en la ciudad de Fnideq (Castillejos), tras la suspensión —por razones meteorológicas— de una planeada visita simbólica al islote de Perejil. La cita sirvió para refundar la plataforma bajo un nuevo nombre: Coordinadora Nacional para la Defensa de las Causas del Reino de Marruecos, con un mandato que ahora va más allá de los enclaves norteafricanos y se extiende al Sáhara Occidental.
“El objetivo es ampliar las funciones del comité para incluir cuestiones estratégicas de soberanía del Reino”, declaró Yahya al diario marroquí Hespress. Entre los asistentes, varios activistas del Rif, como Rachid Ihssain y Said El Charamti, provenientes de Nador, reiteraron su compromiso con lo que consideran “las causas territoriales justas” de Marruecos, de norte a sur.
Mensaje al PP
El encuentro lanzó un mensaje político al PP. La reunión de la Coordinación Nacional para la Defensa de las Causas del Reino de Marruecos condenó “algunas desviaciones en las posiciones de los políticos españoles, alejadas de la decisión del Estado español de apoyar la propuesta marroquí de autogobierno, en particular las manifestadas por el Partido Popular español, que recibió a representantes del Frente Polisario en su último congreso, lo que se consideró un intento provocador de perturbar las relaciones bilaterales entre Madrid y Rabat”, señala la prensa marroquí. Los responsables de la nueva plataforma advirtieron de que esta posición “podría provocar tensiones sobre el terreno en las ciudades de Ceuta y Melilla y en las islas marroquíes ocupadas, como respuesta a estas claras provocaciones contra la unidad territorial de los territorios del sur”, en referencia al Sáhara Occidental, ex colonia española ocupada ilegalmente por Marruecos y pendiente de descolonización.
El nuevo comité no es una institución oficial. Pero su reactivación no ocurre en el vacío. Coincide con una etapa de reafirmación diplomática del discurso marroquí sobre el Sáhara Occidental —impulsado por el reconocimiento estadounidense en 2020 y el histórico cambio de posición del PSOE en 2022, cuestionado por el esto del arco parlamentario— y una escalada de tensiones con Argelia, al que el comité acusa en el comunicado final de “financiar campañas hostiles” y explotar divisiones identitarias en la región del Rif”.
En este contexto, el comité fija tres prioridades: “reforzar la narrativa sobre la marroquinidad del Sáhara, combatir las voces críticas —incluidas las procedentes de la diáspora rifeña— y articular una defensa diplomática paralela, conforme a las orientaciones reales”. Una mención recurrente a Mohamed VI y sus directrices que revela la voluntad de alinearse con el discurso oficial y con los dictados del majzén, el círculo del monarca.
Un viejo conocido al frente de la coordinadora
El propio Yahya fue confirmado de nuevo al frente de la plataforma, en reconocimiento a su “larga trayectoria” de oposición a la presencia española en los enclaves. En el pasado, ha protagonizado marchas simbólicas hacia las fronteras de Ceuta y Melilla, enarbolando la bandera marroquí como gesto de reivindicación. Aunque tales acciones nunca pasaron del simbolismo, han servido para alimentar la narrativa de presión sostenida sobre las dos ciudades autónomas y el objetivo marroquí de asfixia de los enclaves.
El momento elegido tampoco es casual. Este mes se cumplen 23 años del incidente de Perejil, que enfrentó a soldados marroquíes y españoles en uno de los episodios más tensos de la historia reciente bilateral. Coincidiendo con el aniversario, Movistar Plus+ ha estrenado un documental que revive los acontecimientos de julio de 2002 y que, según su director, Tian Riba, “narra el momento más próximo a una guerra entre España y Marruecos desde la Marcha Verde”.
La reaparición de Yahya Yahya confirma que la cuestión de Ceuta y Melilla sigue latente en determinados círculos del nacionalismo marroquí. Y lo hace en un entorno regional marcado por la competición estratégica entre Rabat y Argel, y por los equilibrios aún frágiles con Madrid, tras el giro de 2022. Rabat, a diferencia de España con el Sáhara, no ha renunciado a la reclamación de la soberanía de Ceuta y Melilla y sus funcionarios han seguido haciendo declaraciones en los últimos años.
Te puede interesar
Lo más visto
Comentarios
Normas ›Para comentar necesitas registrarte a El Independiente. El registro es gratuito y te permitirá comentar en los artículos de El Independiente y recibir por email el boletin diario con las noticias más detacadas.
Regístrate para comentar Ya me he registrado