El líder de Junts y candidato a la Generalitat, Carles Puigdemont, ha recomendado a Pedro Sánchez una moción de confianza para despejar las dudas sobre su liderazgo al frente del Gobierno. En un tuit publicado la noche de este miércoles, Puigdemont reaccionaba así al anuncio del presidente del Gobierno, quien ha anunciado que suspende su agenda pública para tomarse unos días de reflexión ante los "ataques sin precedentes" contra él y su esposa.

Puigdemont propone a Sánchez volver a someterse al mandato del Congreso, pero no compromete el sentido del voto de Junts, que fue clave en la investidura del presidente. Al contrario, deja claro que su único interés son las elecciones catalanas, no "las crisis inacabables de Madrid". En los primeros compases de la precampaña catalana Puigdemont ya ha dejado claro que está dispuesto a dejar caer la mayoría progresista que da apoyo a Sánchez en el Congreso si los socialistas le barran el paso a la presidencia de la Generalitat, aunque las urnas le sitúen por detrás de Salvador Illa.

En un mensaje en su perfil de X, Puigdemont cuestiona la sinceridad del mensaje del presidente del gobierno, aunque reconoce que las críticas pueden ser "salvajes y deshumanizadoras". Y advierte a sus fieles: "Ahora más que nunca hay que ser firme ante Madrid y sus crisis políticas inacabables". El candidato de Junts añade que "lo que realmente está en juego es el futuro político de Cataluña, no el de un partido ni el de un primer ministro".

En este contexto, Puigdemont deja claro que "quien quiera convertir las elecciones catalanas en un flotador del PSOE se equivoca mucho" aludiendo a una eventual maniobra de victimización por el presidente y líder del PSOE, del que recuerda que "a menudo suele hacer movimientos tácticos que nadie espera".

El ex president fugado cuestiona las intenciones del mensaje de Sánchez apuntando que "alguien que se define a través de un libro titulado 'Manual de resistencia' y que es conocido por su capacidad de resiliencia no parece que vaya ser demasiado vulnerable a las críticas que recibe". Y recuera que es una decisión "poco habitual en un dirigente político de su experiencia".

Aunque tampoco cierra la puerta a una reflexión sincera, poniéndose de ejemplo en primer persona al asegurar que "sé perfectamente lo que se siente" ante los ataques a la familia. Una reflexión que sirve para aconsejarle que "si realmente la razón es la campaña contra su familia" lo que debe hacer Sánchez es someterse a una cuestión de confianza "para aclarar todas las dudas que se han desatado".