El magistrado de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz ha dictado una orden de detención e ingreso en prisión de los dirigentes de ETA Javier García Gaztelu (alias 'Txapote'), Ainhoa Múgica ('Olatz'),, Juan Antonio Olarra Guridi ('Juanvi') y Juan Luis Rubench por su implicación en el asesinato del magistrado Francisco de Querol Lombardeo en octubre del 2000.

La resolución es un paso más a la comunicación enviada a Francia el pasado mes de junio en la que se solicitaba una ampliación d ela entrega de estas cuatro personas para que España pudiera juzgarlos por el atentado en coche bomba en el que también murieron el chófer del juez, Armando Medina, su policía escolta Jesús Escudero García y un conductor de autobús (Jesús Sánchez Martínez que falleció días más tarde a causa de las heridas de la explosión).

Este es un trámite que debe hacerse por el principio de especialidad, es decir, los etarras no pueden responder por hechos distintos de los que fueron entregados a España así que hay que pedir un nuevo permiso. Se trata, por tanto, de una decisión instrumental con la que se da cumplimiento a las euróordenes.

El informe policial contra la cúpula

La Policía Nacional ha remitido un informe al instructor explicando qué nueve miembros componían la cúpula de ETA cuando se produjo el atentado al magistrado Francisco de Querol en el año 2000. La investigación del caso fue reabierta en 2022 a raíz de una querella de la asociación Dignidad y Justicia que solicitaba investigar al Comité Ejecutivo de la banda criminal para que la responsabilidad penal también alcance a los etarras que dirigían los atentados y no sólo a los que apretaban el gatillo. Según las conclusiones a las que han llegado los agentes, la estructura estaba copada por Javier García Gaztelu (alias 'Txapote'), Juan Antonio Olarra Guridi ('Juanvi'), Ainoa Múgica Goñi ('Olatz'), Ignacio Miguel Gracia Arregui ('Iñaki de Rentería'), Asier Oyarzábal Chapartegui ('Baltza'), Mikel Albisu Iriarte ('Mikel Antza'), Vicente Goicoechea ('Willy'), Ramón Sagarzazu ('Ramontxo'), Soledad Iparraguirre ('Anboto').

En el informe, al que ha tenido acceso El Independiente, se expone que la estructura tradicional de ETA estaba configurada a través de tres principales aparatos que eran el militar, el logístico y el político, pero que a medida que fueron avanzando los años la organización se fue delineando y añadieron el área internacional y el de finanzas. "El Comité Ejecutivo funcionaba de forma colegiada y en él se adoptaban las decisiones estratégicas y a veces incluso tácticas. Esa función incluía no sólo la determinación de la línea estratégica política y militar, sino también el diseño, la planificación, la coordinación, dirección y en ocasiones también la orden o autorización de realizar los atentados terroristas", firma la comisaría general de Información de la Policía.

Los comandos se integraban en el "área geográfica de implantación y objetivos contra los que atentar" y en el caso del asesinato del juez Querol, la Policía cree que el comando era Buruahuste que desarrolló su actividad criminal en Madrid desde finales de 1999 hasta 2001 cuando fue desarticulado. Los agentes señalan a estos nueve terroristas de acuerdo con las sentencias, los documentos internos de la banda y las declaraciones de los etarras. Los líderes del aparato militar eran 'Txapote', 'Juanvi' y 'Olatz'; los jefes del logístico 'Iñaki de Rentería' y 'Baltza', en el político estaba 'Mikel Antza' y 'Willy'; y por último 'Ramontxo' en internacional y 'Anboto' para las finanzas.

Para los investigadores no hay dudas de que el atentado que mató al juez del Tribunal Supremo Francisco Querol el 30 de octubre de hace 23 años fue obra de este comando Buruahuste. Los autores materiales del coche bomba en el que también murieron su chófer Armando Medina, su policía escolta Jesús Escudero García y un conductor de autobús (Jesús Sánchez Martínez que falleció días más tarde a causa de las heridas de la explosión) fueron Juan Luis Rubenach, Ana Belén Egües y Gorka Palacios, mientras que Oier Goitia realizó actos preparatorios necesarios.Precisamente Ana Belén Egües reconoció los hechos y para la Policía "goza de plena veracidad".

El juez Santiago Pedraz ya solicitó autorización a Francia el paado mes de abril para poder procesar a cuatro de los etarras investigados, entre ellos a 'Txpote'.

La Zuba

En 2002 se produce un cambio de nomenclatura, según la Policía, por la que el Comité Ejecutivo pasa a denominarse Zuzendaritza Batzordea (comisión de dirección o comité directivo), llamado Zuba por su acrónimo. Se podía constituir de forma completa (Handia) con todas las competencias o de forma reducida (Txikia) por lo que a veces lo denominaban Zubatto --como diminutivo.

El informe de Inteligencia detalla cómo ETA se organizaba de forma jerarquizada en la que cada integrante rendía cuentas de lo que hacía a su responsable. Cada cual a uno superior. "Los principales aparatos se encargaban de informar hacia"Su estructura era muy cerrada y casi de naturaleza militar", señalan. Se organizaban de forma piramidal y "regía una férrea disciplina mediante la cual se trataban de evitar traiciones, deserciones, delaciones, falta de observancia a las medidas de seguridad impuestas, posturas, críticas, etc". La Zuba ejercía un control total de los militantes decidiendo dónde, cómo y cuándo se hacían las cosas y esto apuntala las pretensiones de la asociación de víctimas Dignidad y Justicia para poder enjuiciar a los responsables.

En una operación policial realizada en Francia en 2004 en la que fue detenida "Anboto" se halló en su vivienda un documento en el que se explicitaban unas tablas de la composición de la banda terrorista ETA con sus órganos directivos y sus aparatos. Se hallaron las tablas mensuales correspondientes al periodo febrero 2003 y julio 2004 y se subdividían en 'arduradunak' (responsables) y 'sailak' (departamentos). Un dato que destacan los Policías es que se leía como "secuestrada" la columna en la que se señalaba los que en ese momento se encontraban en prisión.