Kate Middleton ha confirmado que padece cáncer. Tras muchas especulaciones, la propia princesa de Gales lo ha desvelado en un vídeo difundido por el Palacio de Kensington a las 19 horas de esta tarde. Previamente había informado a la prensa especializada británica en una rueda de prensa privada y telemática. Ha explicado que se está tratando con quimioterapia y el motivo de su silencio. Sin embargo, como ocurrió con el rey Carlos tras su operación de próstata, no ha querido especificar de qué tipo de cáncer se trata.

"En enero, me sometí a una importante cirugía abdominal en Londres y en ese momento se creía que mi enfermedad no era cancerosa. La cirugía fue exitosa. Sin embargo, las pruebas tras la operación hallaron que había habido cáncer. Por lo tanto, mi equipo médico recomendó que me sometiera a un tratamiento de quimioterapia preventiva y me encuentro ahora en sus fases iniciales", ha explicado la princesa de Gales.

Kate y Guillermo querían privacidad para proteger a sus hijos

"Guillermo y yo hemos estado haciendo todo lo posible para gestionar y procesar esto en privado por el bien de nuestra familia", ha explicado la princesa. Después de todas las especulaciones en las redes, la verdad era la más obvia. Querían mantener en lo posible la intimidad para proteger a sus hijos George, Charlotte y Louis, de 10, 8 y 5 años. Ha sido este mismo viernes cuando han tomado la decisión de contarles la noticia y asegurarles que su madre se recuperará.

En el sentido vídeo, de dos minutos y 12 segundos, grabado en los jardines del Castillo de Windsor el pasado miércoles por un equipo de la BBC, Kate confiesa que ha sido un shock para ellos encontrarse con este diagnóstico. Sin embargo, se muestra optimista y pide al público que haga lo mismo. "Nos ha llevado nuestro tiempo explicarles todo a George, Charlotte y Louis de una manera que sea apropiada para ellos", ha admitido. "Como les he dicho a ellos, estoy bien y cada día más fuerte, centrada en lo que puede ayudarme a sanar en cuerpo, mi mente y mi espíritu", ha subrayado.

Desmintiendo rumores

No es casualidad que el anuncio se haya producido en un vídeo hablado y mirando a la cámara. A diferencia del comunicado de Carlos de Inglaterra, Kate ha querido poner fin a las especulaciones que aseguraban que estaba desaparecida. Incumpliendo las tradiciones de los Windsor de "no dar explicaciones ni quejarse", la futura reina ha querido seguir con el consejo de la reina Isabel: "Ser vista para ser creída".

Con el maquillaje y el pelo debidamente cuidados, la mujer del príncipe Guillermo ha mostrado su mejor cara para evitar más especulaciones. Kate Middleton también ha hecho referencia a su marido como un gran apoyo y aparece con su anillo de compromiso, que no salía en la foto del Día de la Madre. Ambos gestos son significativos: quieren dejar claro que el matrimonio permanece fuerte a pesar de las conversaciones acerca de una supuesta amante. Una manera mucho más discreta de negarlo que la que tuvo Rose Hanbury, la mujer en cuestión, que directamente negó las acusaciones a través de su abogado.

En las últimas semanas el público se ha dividido entre quienes decidieron darle su espacio a la familia real y aquellos que han estado dispuestos a creer las teorías más disparatadas. Se ha hablado de actores, de clones y todo tipo de ideas sorprendentes. Todo con tal de poner en duda la veracidad de las imágenes que han aparecido en las últimas semanas.

¿Cuándo será la próxima aparición?

Según confirman los medios británicos, fue el diagnóstico del cáncer lo que hizo que el príncipe Guillermo se ausentara repentinamente de la misa en honor a Constantino de Grecia celebrada a finales de febrero. Una información que pone en contexto no solo los tiempos, sino cómo la familia ha gestionado en las últimas semanas la difícil noticia.

Esta revelación por parte de la princesa de Gales también descarta, según ¡Hello!, su posible aparición el día 31 en la misa de Pascua. Era la fecha marcada en el calendario según algunos medios para una reaparición formal pero distendida. El hecho de que se trate de una cita familiar y no de un compromiso de trabajo parecía dar pie a una vuelta gradual. Ahora esa vuelta a la vida pública queda en el aire. El rey Carlos sí está manteniendo una agenda reducida, pero sus responsabilidades son mayores.