La actriz británica Maggie Smith, ganadora de dos premios Oscar y conocida por sus papeles en las películas de Harry Potter y la serie Downton Abbey, entre otros muchos trabajos, ha fallecido este viernes a los 89 años, ha informado su familia. En un comunicado, sus hijos Toby Stephens y Chris Larkin precisaron que su madre "falleció pacíficamente" en el hospital de Londres en el que se encontraba ingresada.
Junto a nombres como la desaparecida Glenda Jackson, Judy Dench o Vanessa Redgrave, Smith fue una de las grandes actrices británicas de las últimas décadas, una de las 17 intérpretes que han conseguido la llamada triple corona –el Emmy, el Tony y el Oscar– y la que acumula más premios Bafta del cine británico. A lo largo de su larga carrera participó en numerosas películas a ambos lados del Atlántico como secundaria y protagonista –Viajes con mi tía, Un cadáver a los postres, Muerte en el Nilo, Muerte bajo el sol, Una habitación con vistas, Sister Act...–. Pero encontró la popularidad planetaria cumplidos los 60 gracias a sus papeles de Minerva McGonagall, profesora de Hogwarts y directora de la Casa Gryffindor en las películas de la saga Harry Potter y Violet, la vitriólica condesa viuda de Grantham, en la serie Downton Abbey.
Su porte de anciana distinguida le deparó una vejez repleta de trabajo que Smith vivió con satisfacción y sin intención de retirarse mientras pudiera. Recientemente ha sido incluso uno de los rostros de la campaña de la precolección primavera-verano 2024 de Loewe.
Formada con Shakespeare, consagrada al humor
Nacida en Essex el 28 de diciembre de 1934, Smith hizo su debut en los escenarios con el club de teatro de la Universidad de Oxford en el papel de Viola en la obra de Shakespeare Noche de Reyes. Gracias a aquello, un empresario la eligió para debutar en Broadway en 1956.
Fue miembro de la Old Vic Company de teatro entre 1959 y 1963, año de su disolución, y formó parte de la compañia germinal del nuevo National Theatre a invitación de su primer director, sir Laurence Olivier. Su primer papel fue una extraordinaria interpretación de Desdémona frente al Otelo de Olivier en 1964. Un personaje que repitió en la película realizada en 1965 sobre aquella producción teatral y por el que fue nominada al Oscar por primera vez. Lo sería en otras cinco ocasiones, casi siempre por papeles cómicos, su registro favorito, y lo ganaría en dos, por Los mejores años de Miss Brodie (1969) y por la comedia California Suite (1978). Su última nominación llegó por Gosford Park (2001), que de algún modo preludió el papel de la irónica aristócrata de la serie Downton Abbey (2010-2015) y las películas que la siguieron en 2019 y 2022.
Smith, que fue condecorada como comendadora (1970) y dama del Imperio Británico (1990), superó un cáncer en 2008. Durante su convalecencia rodó Harry Potter y el misterio del príncipe. Un ejemplo de fortaleza y de amor por su profesión que mantuvo hasta el final. "Me encanta actuar, tengo la suerte de hacerlo y no sé qué sería de mí si me hubiera dedicado a otra cosa", llegó a declarar.
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