El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha calificado de "fructífera" la conversación que ha mantenido este sábado con el presidente del Gobierno de Estados Unidos, Joe Biden, en la que han abordado, especialmente, la situación en Afganistán. La conversación se ha producido después de que EEUU no incluyera ayer a España en el agradecimiento a los países que están colaborando en el operativo de evacuación.

Asimismo, ha informado de que ha podido abordar varios temas de "interés común", poniendo mayor interés en la situación en Afganistán y la colaboración entre ambos gobiernos en la evacuación de ciudadanos del país asiático. Así lo ha manifestado en un mensaje escrito en la red social Twitter y recogido por Europa Press.

Esta sería la segunda toma de contacto que mantiene Sánchez con su homólogo americano tras la breve charla que se produjo durante la reunión de jefes de Estado y de Gobierno de la OTAN.

El presidente estadounidense, Joe Biden, elogió el "liderazgo" de España para "movilizar apoyo internacional" para las mujeres y las niñas afganas ante la llegada de los talibanes al poder, en su conversación con el jefe del Gobierno español, Pedro Sánchez.

Según el comunicado difundido por la Casa Blanca este sábado, Biden agradeció también a Sánchez "la asistencia de España para acoger temporalmente a afganos en peligro que van con destino a Estados Unidos en las bases de Morón y Rota", ubicadas ambas en el sur de España.

Ambos líderes discutieron los "últimos acontecimientos en Afganistán" y resaltaron el "trabajo conjunto" de sus países para "evacuar de manera segura a sus ciudadanos, a los afganos que valientemente apoyaron la misión de la Unión Europea (UE) y a otros afganos vulnerables".

Washington inició la retirada de sus tropas de Afganistán, tras 20 años de presencia, en mayo pero se ha visto obligado a acelerar la evacuación de los estadounidenses que quedan en Afganistán y de sus aliados tras el rápido avance de los talibanes, que el pasado domingo tomaron Kabul y controlan casi todo el país tras la huida del hasta ahora presidente afgano, Ashraf Ghani.

Además, ha tenido que mandar refuerzos militares para garantizar la seguridad del aeropuerto, después de la caída de la capital en manos de los insurgentes.