El líder opositor ruso Alexei Navalny, en prisión desde febrero del año pasado, ha llamado a través de sus redes sociales a la desobediencia civil en Rusia, Bielorrusia "y al otro lado del planeta", para "luchar" en las calles contra la guerra en Ucrania, donde las tropas rusas avanzan hacia el sur.

"Putin no es Rusia", ha recordado Navalny en un hilo publicado en su cuenta de Twitter, donde añade que Rusia quiere ser "una nación de paz" y que no puede convertirse en un país "de cobardes" que "fingen no darse cuenta" de la guerra iniciada por su presidente, Vladimir Putin.

El disidente pide, en concreto, convocar manifestaciones en las ciudades, tanto laborables como festivos y fines de semana, estos últimos a las 14 horas.

"Si estás en el extranjero, acércate a la embajada rusa. Si puedes organizar una manifestación, hazlo el fin de semana. Sí, tal vez solo unas pocas personas salgan a la calle el primer día. Y en el segundo, incluso menos", continúa.

Navalny denuncia la brutalidad de la guerra, que se cada día se recrudece hasta el punto de alcanzar la amenaza nuclear.

"Es la tercera década del siglo XXI, y estamos viendo noticias sobre personas que se queman en tanques y casas bombardeadas. Estamos viendo amenazas reales de iniciar una guerra nuclear en nuestros televisores".

También hace mención a los miles de detenidos en Moscú y San Petersburgo por protestar contra la invasión al grito de "No a la guerra". Unas movilizaciones que, desde que arrancaron el jueves con la entrada de las tropas, han sido sofocadas con una enorme represión policial y se han saldado con más de 6.000 arrestados hasta el momento.

"Si hay algo en Rusia ahora mismo de lo que uno puede estar más orgulloso es de esas 6.824 personas que fueron detenidas porque -sin ningún llamado- salieron a las calles con pancartas que decían "No a la guerra".

"Si para parar la guerra tenemos que llenar las prisiones con nosotros mismos, llenaremos prisiones", añade el activista.

Además, arremete contra los argumentos del Kremlin para justificar la invasión. "No puedo, no quiero y no me quedaré en silencio viendo cómo las tonterías pseudohistóricas sobre los hechos de hace 100 años se han convertido en una excusa para que los rusos maten a los ucranianos, y que los ucranianos maten a los rusos mientras se defienden".

Alexei Navalny cumple desde febrero de 2021 dos años y medio de cárcel por una condena por malversación de fondos. Una decisión que fue ampliamente criticada tanto dentro del país como en la esfera internacional por considerarlo un intento más de silenciar a la oposición. En agosto de 2020 un envenenamiento con Novichok supuestamente provocado por el servicio de seguridad ruso FSB -Moscú sigue negando su implicación- casi acaba con su vida y lo mantuvo en coma varios días en Alemania.