El debate de esta noche en TVE puede favorecer a Santiago Abascal al que pueden volver los votos que estén dudando si migrar al Partido Popular. Eso admitiendo que al presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo no le conviene participar en él. 

Será un enfrentamiento de las políticas de izquierda -Pedro Sánchez y Yolanda Díaz-  contra las politicas de derecha sin la presencia de quien encarna el centro moderado con más propiedad, que es el señor Feijóo. 

De tal manera que las posiciones de la izquierda se podrán manifestar con más liberalidad que las posiciones de la derecha porque sencillamente Feijóo no estará. 

Pero será un debate contra él, a pesar de todo, y los ataques los recibirá él desde la izquierda y desde la ultraderecha. 

En ese sentido, el propio Feijóo podrá matizar desde su casa o desde su sede cualquier exceso que se vaya a producir en ese campo. Pero no podrá hacerlo sobre la marcha, lo cual es una dificultad añadida.

Pero que es una oportunidad para que Santiago Abascal se luzca es algo que no admite la menor duda, porque no va a tener quién le contenga en sus excesos, si es que los tiene. Pero esos excesos podrían hacer que el voto del PSOE engorde de nuevo.

Vamos a ver cómo se comporta la dupla Sánchez-Díaz porque también es la oportunidad para ellos de contrastar sus posiciones, si es que eso es posible. Yolanda Díaz se comportará como una sucursal del PSOE y se escudará en ese refugio. 

Sumar, no es un movimiento ciudadano sino la suma de partidos, algo de lo que ella renegó en su día, con eso de la “esquinita a la izquierda del PSOE

Lo único que le puede reprochar el presidente a su todavía vicepresidenta y ministra de Trabajo es que la composición de su plataforma, Sumar, no es un movimiento ciudadano sino la suma de partidos, algo de lo que ella renegó en su día, con eso de la “esquinita a la izquierda del PSOE”.

Es la oportunidad de reivindicar el movimiento que ha hecho y que mañana tendrá la oportunidad de lucir con todas sus galas, habida cuenta de que la mayor parte de sus puntales fue derrotado en las elecciones autonómicas que se celebraron -ya casi ni nos acordamos- el pasado mes de mayo. 

Es el caso de Ada Colau o de Joan Ribó o de Mónica Oltra aunque ésta última fue apartada por el entonces presidente de la Generalitat, Ximo Puig, que ahora mismo ha perdido el gobierno y, en consecuencia, la presidencia, para ser sustituido por el popular Carlos Mazón.

Insisto, es la gran oportunidad para Vox porque Santiago Abascal, que no es un mal polemista, consiga que los votos que han migrado o están pensando en migrar hacia el PP regresen al partido verde.

De todos modos, Núñez Feijóo va a ser objeto de ataques indiscriminados por parte de la izquierda y lo mismo sucede con la parte de la ultraderecha que encarna, ya sin tapujos, Santiago Abascal, sobre todo habida cuenta de los ejemplares destinados, y elegidos precisamente por eso, a ocupar los puestos institucionales de las presidencias de las diferentes Cortes. 

Tiene mucho interés la entrevista que le ha hecho Angel Carreño a Jorge Buxadé, nombrado número dos de Vox aunque él sigue ocupando un puesto como eurodiputado.

Y tiene interés porque lo que le plantea el redactor de El Independiente es si Vox se abstendría en unas determinadas condiciones programáticas en Murcia. La respuesta no puede ser más clara: “Nosotros tenemos la convicción de que de aquí al 23J tenemos que trabajar muchísimo para explicar a la gente nuestra alternativa a las políticas de la izquierda. Nosotros vamos a hacer valer nuestros votos, no los vamos a regalar”.

Esa es la oportunidad que el debate de hoy ofrece a Santiago Abascal.