Los vascos son como son. Quizá los partidos y los dirigentes políticos los conocen menos de lo que creen. Es al menos lo que se puede concluir del sondeo periódico de la Universidad de Deusto, el 'Deustobarómetro', que en esta ocasión ha intentado determinar cómo es el sentimiento de identidad de la sociedad vasca. Para ello ha preguntado a cerca de un millar de ciudadanos qué elementos conforman su identidad. Tras el consabido "la familia" y "la justicia social" figuran "la cuadrilla" y "la buena mesa". Dos aspectos a los que el conjunto de los encuestados da mucha mayor importancia que elementos más presentes en los discursos de la realidad política vasca como la independencia, la ikurriña o el euskera.

Así, el peso de la cuadrilla o el grupo de amigos dobla al que tanto los menores de 35 años como los mayores de 60 dan a la aspiración independentista y está muy por encima de elementos como la ikurriña o el partido político. Incluso aspectos muy presentes en la cultura vasca como el monte le superan con creces. Un ranking de elementos identitarios de los vascos que además apenas difiere entre generaciones, salvo en tres cuestiones: el peso de las redes sociales, mayor pero sin gran relevancia en el caso de los jóvenes, que le conceden un 5 de importancia en una escala de 0 a 10; el partido político o la religión, a la que los menores de 35 le otorgan 1,7 puntos y los mayores 3,9 como elemento identitario importante.

La cuadrilla dobla en importancia al peso que menores de 35 años y mayores de 60 dan a la aspiración independentista y está muy por encima de la ikurriña o el partido político

Tampoco conceptos muy presentes en las formaciones nacionalistas como 'Euskal Herria' parecen situarse como elementos centrales en la vida de los vascos. La mitad de los jóvenes y algo más de los mayores de 60 años no se identifican con él. La distancia es mucho mayor cuando se pregunta por el concepto España, con el que sólo dice identificarse uno de cada cinco jóvenes vascos y algo menos de la mitad de los mayores. El pueblo y la provincia es el entorno territorial con mayor preocupación e identificación para el conjunto de los encuestados.

Respecto al modelo territorial preferido, la independencia de Euskadi continúa perdiendo adeptos. Si en 2013 el Deustobarómetro reflejaba que el 20% de la población la reclamaba, ahora ha caído al 17%. La mayor parte reclama más autonomía e incluso existe un 5% residual que considera que habría que reducir la autonomía o incluso eliminarla. Este sentir se constata también en la demanda de un referéndum independentista. Los vascos, en su mayoría, no lo quieren. Hace sólo tres años lo reclamaba un 47% y ahora lo hace un 42%. La fórmula del referéndum lo consideran más adecuada para resolver problemas cotidianos.

Sólo el 17% reclama la independencia de Euskadi, mientras que un 42% quiere un referéndum

Cuestionados sobre el proceso en Cataluña, el 45% lo cree "malo o muy malo". Sólo un 31% de los vascos respalda el proces iniciado por el Gobierno de Puigdemont.

Los últimos pasos dados por el PNV y su Gobierno en Ajuria Enea tampoco merecen el aprobado mayoritario. Así, algo más de un tercio de vascos apoya el acuerdo presupuestario alcanzado entre el PNV y el PP para aprobar los presupuestos en Euskadi y, en menor grado, apenas un 28%, el suscrito con el Ejecutivo de Mariano Rajoy para aprobar las cuentas de 2017.

En la lista de suspendidos no faltan los medios de comunicación, la Monarquía, el Gobierno vasco, las Diputaciones y la Iglesia

Pese a que la mayoría ha mejorado la percepción de la situación económica, la desconfianza en las instituciones se mantiene. Tan sólo la Universidad, la Ertzaintza y las pequeñas empresas merecen el aprobado de los ciudadanos. Tanto los ayuntamientos como el Gobierno vasco o las Diputaciones reciben el suspenso en su nivel de confianza ciudadana. En la lista de suspendidos no faltan los medios de comunicación, la Monarquía o la Iglesia.

Por último, se aborda la situación del final de ETA y de implantación de la convivencia y paz en Euskadi. Entre las causas que priorizan los vascos para que la situación avance se cita en primer lugar la disolución de ETA, que el 52% cree necesaria antes que cualquier otra causa. Tras ella se cita el acercamiento de los presos a cárceles vascas y el reconocimiento del daño causado por parte de los presos de la banda. La cuarta razón hace referencia a que los etarras colaboren en el esclarecimiento de los crímenes de ETA sin resolver.