Otro colectivo gremial se suma a la reivindicación de equiparación salarial, la cruzada que han emprendido los policías nacionales y los guardias civiles para que les igualen los sueldos a los de los Mossos d'Esquadra y la Ertzaintza. Funcionarios de prisiones exigen ganar lo mismo que sus compañeros en Cataluña, única comunidad autónoma que tiene transferida la competencia en materia penitenciaria y que retribuye con casi 500 euros más al mes la realización de las mismas funciones.

Ésta es una de las demandas de Funcionarios de Prisiones Unidos (FPU), una asociación que se declara "asindical y apolítica" constituida el pasado mes de mayo para reclamar la mejora de las condiciones laborales de este cuerpo de la Administración del Estado. "Recibimos agresiones, amenazas e insultos por una parte de los internos, y por parte del Sr. [Ángel] Yuste [director general de Instituciones Penitenciarias] nos sentimos humillados, ninguneados e infravalorados. Esta situación nos está afectando en nuestro día a día laboral y personal. Por ello, debemos unirnos para cambiar esta denigrante situación", justifica en su manifiesto.

En materia económica, la FPU -asociación que asegura que reúne ya a unos 300 funcionarios destinados en 29 centros penitenciarios- reivindica la equiparación salarial con los funcionarios catalanes y que el Ministerio del Interior -al que están adscritas las competencias en materia penitenciaria- se comprometa a "resarcir económicamente" al colectivo tras la "continua pérdida de poder adquisitivo" que han padecido en los últimos años por la crisis. Igualmente, piden que se reconozca un complemento específico de nocturnidad y que se incremente la cuantía del plus por insularidad.

Un funcionario de Priones catalán gana al mes casi 500 euros más que el resto de empleados penitenciarios, denuncia la asociación FPU

Con todo, el colectivo pone el mayor énfasis en la necesidad de que el Gobierno se comprometa a no privatizar servicios en Prisiones, iniciada con la seguridad exterior en el año 2013. "Vemos cómo año tras año se pierde personal y no se repone. Cada vez hay menos funcionarios en los módulos o simplemente servicios como los de mantenimiento, lavandería, cocina o la limpieza están siendo privatizados y concedidos a empresas externas", advierte.

La FPU también reclama que se ponga fin al déficit de "3.500 plazas" con que cuentan las prisiones españolas en este momento, el nivel 17 como mínimo para el cuerpo de ayudantes de Instituciones Penitenciarias, una formación "real, continua y acorde" con las incidencias que se registran a menudo en las cárceles y un periodo de prácticas para los nuevos funcionarios, al tiempo que advierten del envejecimiento que sufre actualmente la plantilla.

Unidad de acción

Igualmente, demandan que se les dote de los medios coercitivos adecuados para proteger su integridad física y el reconocimiento como agente de la autoridad, lo que -en su opinión- permitiría que se pudieran calificar de agresiones los numerosos incidentes que se registran casi a diario en las prisiones.

La Asociación FPU mantiene contactos con sindicatos con representación en el sector penitenciario a fin de actuar en unidad de acción -con el ejemplo cercano de Jusapol, que ha contado con el apoyo de los sindicatos de la Policía Nacional y de las organizaciones profesionales de la Guardia Civil- para lograr mejoras que redunde en todo el colectivo.