El grupo parlamentario de Ciudadanos se ha quedado prácticamente solo este martes en el Pleno del Congreso reclamando al Gobierno de Pedro Sánchez la convocatoria inmediata de elecciones generales, una petición que ha sido tachada de "patética", "surrealista", "oportunista" y "fuego de artificio". En la votación sólo le ha apoyado UPN, mientras que el PP se ha abstenido.

En concreto, el partido naranja ha forzado la votación en el Pleno del Congreso de un punto en el que se "insta al Gobierno a convocar elecciones generales de manera inmediata a fin de que los ciudadanos decidan el futuro político de España". Esta petición se registró en el Congreso cuando el debate de la moción de censura contra Mariano Rajoy estaba en marcha y el PNV se inclinaba ya por apoyarla, pero no se planteó como una iniciativa independiente, sino que se incluyó como último punto de una moción relativa al futuro del Instituto Cervantes.

Los motivos de Ciudadanos

Toni Cantó ha sido el encargado de defender la propuesta ante el Pleno y lo ha justificado en que unas elecciones son la forma de asegurar el Gobierno "fuerte y limpio" que a su juicio se necesita para afrontar el desafío independentista.

En su opinión, el Gobierno socialista de Sánchez se resiste a las elecciones porque quiere "devolver los favores" a quienes apoyaron la moción de censura y ha cuestionado especialmente las medidas adoptadas en relación con Cataluña, pues considera que se ha dejado "en manos del PSC, que sigue permitiendo que los independentistas se financien con dinero público y que ya hablan de acercamiento de presos del 'procés'.

Sólo UPN ha apoyado el punto de la convocatoria de las elecciones, aunque su diputado Carlos Salvador ha admitido que "nada tiene que ver" con el Instituto Cervantes. "Cosas veredes, amigo Cantó", ha comentado. Pero las críticas han llegado del resto de partidos. Para Ignasi Candela, de Compromís, Ciudadanos hace "política de corto recorrido". Según Sergi Miquel, del PDeCAT, la política del partido naranja "da mucha pereza" y pedir ahora elecciones dentro de una moción sobre el Cervantes es "surrealista y poco oportuno".

'Tranquilícense'

Joseba Agirretxea, del PNV, cree "patético" aprovechar una moción cultural para meter ese punto político porque viene a demostrar que a los de Albert Rivera "el Cervantes les importa un pimiento". "Hala, tranqulícense", ha remachado. "Calma, señor Cantó, porque la inmensa mayoría de sus votantes no están tan fanatizados como usted", ha añadido Joan Tardà, de ERC.

Tampoco Unidos Podemos ha apoyado urgir ahora a convocar las elecciones. Su portavoz de Cultura, Eduardo Maura ha lamentado que este tema haya echado por tierra las propuestas sobre el Cervantes, que veía interesantes.

Desde el PSOE, su portavoz de Cultura, José Andrés Torres Mora ha defendido que continúe la legislatura y que, antes de darla por acabada, "se exploren otras posibilidades con otro gobierno". "Las leyes de la coherencia le obligan a deponer su actitud", ha aconsejado a Ciudadanos.

Ni siquiera el PP ha querido votar a favor y ha optado por la abstención. La diputada Belén Hoyo coincide en las críticas al Gobierno de Pedro Sánchez y a sus apoyos, pero hace a Ciudadanos responsable de la moción de censura porque hace dos semanas proclamó que la legislatura estaba ya acabada. "No hay mayor desacierto político que la ambición de poder sin haber medido bien las fuerzas --ha señalado--. ¿Están contentos de lo que han conseguido? Es el precio de la temeridad. Piden elecciones, pero desde la irresponsabilidad o la temeridad han propiciado que la moción de censura prospere. Absténganse de seguir haciendo de la política un fuego de artificio".