Lo de ayer fue sólo una parte. El calendario que ha ultimado la plataforma Sare de apoyo a los presos de ETA es mucho más amplio e incluye no sólo al ex preso de ETA, José Ramón López de Abetxuko, sino a otros presos de ETA, así como a hijos y familiares de militantes de ETA volcados en una labor de concienciación en el ámbito universitario. El polémico acto celebrado ayer en el campus alavés de la Universidad del País Vasco (UPV) tendrá hoy su continuación en una nueva sesión en el campus vizcaíno de Leioa y al que, al menos inicialmente, -en alguna de las convocatorias ha sido modificada- estaba anunciado José Ramón López de Abetxuko.

Esta nueva charla, esta vez en el Campus de Leioa, llega después de que este lunes el inicio del ‘ciclo de conferencias’ programado se estrenara con el ex preso de ETA, Oier Ibarguren. Su intervención debía versar sobre ‘los estudios y la prisión’. Ibarguren fue detenido el 21 de febrero de 2013 en Francia. En el momento de su arresto iba armado. Se encontraba huido después de que escapara aprovechando su puesta en libertad, tras el pago de una fianza, después de ser detenido en 2009 durante una macrooperación contra Segi, las juventudes de la izquierda abertzale. El Tribunal Correccional de París le condenó a seis años de prisión por pertenencia a la estructura de falsificaciones de ETA. Salió en libertad el 22 de octubre de 2017.

Sare pretende con este calendario de actos y charlas en la Universidad del País Vasco movilizar a los jóvenes de cara a la manifestación convocada para el 11 de enero próximo, que, como cada año, volverá a reclamar el final de la dispersión de los presos de ETA, la excarcelación de los reclusos de a banda enfermos y de más edad y su acercamiento a cárceles del país Vasco.

El ‘ciclo de conferencias’ previsto en el campus de la UPV se ha clasificado en distintas temáticas. Si el acto celebrado ayer abordó de la mano de López de Abetxuko y el preso y abogado condenado por pertenencia a ETA, Txema Matanzas, la situación de los presos de ETA enfermos, esta semana en el Campus de Leioa también se ha analizado el impacto familiar de la dispersión penitenciaria. Así, en la sesión de ayer, en la que participó Amaiur Iragi, hija de dos presos de ETA, se abordó el fenómeno de los llamados ‘niños de la mochila’, con los que la izquierda abertzale quiere denunciar el perjuicio que en los menores tiene las visitas de larga distancia que deben hacer cárceles alejadas del País Vasco y Navarra los hijos de los presos de ETA.

El ciclo de charlas incluye una a cargo de la hija de Iglesias Chouzas, alias 'Gadafi', y otra del ex preso de ETA, Oier Ibarguren

El bloque temático se completa con una sesión dedicada a los presos enfermos, prevista para hoy, y la que cerrará mañana las sesiones tratando la situación de las mujeres presas.

Hijas de presos

En una primera convocatoria López de Abetxuko, el ex preso de ETA condenado a 30 años de prisión por el asesinato de Jesús Velasco, el jefe de los Miñones de Alava, y Eugenio Lázaro, jefe de la Policía Municipal de Vitoria, ambos en 1980, también iba a intervenir hoy en el campus vizcaíno. Sin embargo, en la convocatoria difundida en las últimas horas a través de las redes no figura López de Abetxuko, qen habría sido sustituido por Aitor Lexartza, familiar del preso de ETA, Txus Martín. Martín se encuentra enfermo en prisión. Fue condenado en calidad de cómplice en el asesinato del ertzaina Joseba Goikoetxea. La pena inicial de 36 años fue rebajada por el tribunal Supremo a 18.

Para mañana, Sare ha programado en una sala de la facultad de Comunicación y Ciencias Sociales una sesión bajo el título, ‘Mujeres y prisión’. La impartirá Olatz Iglesias, hija del preso de ETA Juan Carlos Iglesias Chouzas, alias Gadafi’, uno de los presos de ETA más sanguinarios, con condenas por su implicación en una veintena de asesinatos y condenas por alrededor de 1.200 años de prisión. Iglesias es hija además de Nagore Mujika, otra presa de la banda que pasó en prisión quince años, entre 1996 y 2011.

El campus de Vizcaya no es el único en el que Sare celebrará actos de apoyo a los presos en forma de charlas. Hoy lo hará también en el campus de San Sebastián, en Ibaeta, donde la madre de otra ex presa de ETA, Sara Majarenas, Kontxi Ibarreta, abordarán, junto con Eider Beamount, la situación familiar que genera la política de dispersión que se aplica a los condenados de ETA.

Libertad de expresión

Las reiteradas quejas y peticiones a la UPV para que impida la celebración de actos como el llevado a cabo ayer en el Campus de Álava, con la intervención de López de Abetxuko y Matanzas, fueron desoídas por la institución académica. La UPV emitió un comunicado en las que aseguraba que no “prejuzgaba” las manifestaciones públicas “de otras organizaciones ni personas concretas por más que se vayan a realizar en instalaciones de la Universidad”.

La UPV primó el respeto a la libertad de expresión “de todas las ideas y sensibilidades políticas y sociales, siempre que estas se manifiesten con respeto a la ley”. La dirección de la Universitaria se limitó a reclamar a Sare que en los actos previsto “tenga en cuenta el sentir de las víctimas de ETA, actúe con sensibilidad y evite gestos o manifestaciones que puedan herirlas”.

El Colectivo de Victimas del Terrorismo del País Vasco, COVITE, ha emitido un comunicado denunciando que la UPV esté dispuesta a "prestarse a actuar de relaciones públicas de etarras" al ceder espacios en sus tres campus universitarios. Considera que es "extremadamente grave" que se facilite las instalaciones docentes para llevar a cabo este ciclo de conferencias impulsadas por Sare y acusan a la rectora, Nekane Balluerka, de eludir "su responsabilidad ética y educativa". Aseguran que la organización de las conferencias es una "clara muestra de insensibilidad con la humillación que sufren las víctimas de la organización terrorista y la principal responsables es la UPV por permitirlo", asegura Consuelo Ordóñez, presidenta de Covite.

El Colectivo apela también al Gobierno vasco para que cumpla la ley vasca de víctimas del terrorismo y "evite este tipo de actos". Recuerdan que la citada norma, en su artículo 4, establece que los poderes públicos deberán velar "para que las víctimas sean tratadas con respeto a sus derechos" y que para ello adoptarán las medidas apropiadas "para prevenir y evitar la realización de actos efectuados en público que entrañen descrédito, menosprecio o humillación a las víctimas".