El Gobierno de Pedro Sánchez ha rectificado en apenas seis horas su postura sobre la mesa de negociación con el Govern de la Generalitat. Cerca de la una de la tarde, el Ejecutivo aseguraba que la mesa se aplazaba sine die hasta después de las elecciones en Cataluña, pese a haber prometido durante la investidura que se conformaría en los primeros 15 días de investidura. A las siete rectificaba y anunciaba que finalmente sí reunirá la mesa antes de los comicios.

Fuentes conocedoras de la situación confirman que durante la tarde se ha producido una reunión de urgencia entre Pedro Sánchez y Gabriel Rufián, celebrada en el Palacio de La Moncloa, tras la que se ha reconducido la situación. La presión de ERC, por tanto, ha obligado a rectificar la posición explicitada por el Ejecutivo al mediodía y a la que los republicanos habían reaccionado airadamente.

Por boca de Sergi Sabrià, ERC había tachado de "irresponsable" a Pedro Sánchez por cancelar el diálogo con la Generalitat hasta después de unas elecciones aún sin fecha, aunque previstas para los meses de mayo o junio. La conformación de un nuevo Govern, circunstancia a la que condicionaba Moncloa la conformación de la mesa, habría tardado más incluso.

En ese contexto, ERC calificaba el retraso como un "incumplimiento flagrante" de los acuerdos que posibilitaron la abstención de los republicanos y la investidura de Pedro Sánchez. Cabe recordar en ese sentido que el propio Gabriel Rufián amenazó desde la tribuna de oradores durante el debate que hizo presidente al socialista: "Sin mesa no hay legislatura".