La imagen de militares patrullando las calles de España de forma conjunta con policías nacionales o guardias civiles no se va a producir a corto plazo. El Ministerio de Defensa no sólo había diseñado un protocolo de actuación para ayudar a que se cumplan las medidas restrictivas de movimientos acordadas con motivo de la declaración del estado de alarma, sino que incluso había anunciado el inicio de estas funciones en casi un centenar de municipios. De momento no se va a poner en marcha.

"Las patrullas mixtas es algo que ha estado sobre la mesa, pero por ahora no se ha implementado. No descartamos que se pueda hacer en el futuro", ha reconocido este viernes Carlos Pérez Martínez, director de gabinete del Jefe del Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), en la comparecencia informativa posterior a la reunión diaria del comité de gestión técnica.

Fue el propio JEMAD, Miguel Ángel Villarroya, quien el pasado lunes anunció la presencia de militares con policías nacionales o guardias civiles en las calles de 87 municipios correspondientes a siete provincias, sin que Defensa -ni él ni la ministra, Margarita Robles- haya comunicado en ningún momento cuál sería ese despliegue territorial.

De momento, la ayuda que los militares están brindando a las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado se circunscriben al control de fronteras terrestres y a las infraestructuras críticas. Así, la vigilancia contra sabotajes y actos terroristas en las centrales nucleares recae en la Guardia Civil, pero de manera excepcional esa labor la está haciendo de forma compartida personal de las Fuerzas Armadas para que agentes de este Cuerpo puedan liberarse y centrarse en funciones directamente relacionadas con la lucha contra la pandemia.

El jefe del Estado Mayor de la Guardia Civil, el general José Manuel Santiago, ha indicado que a Defensa se le ha ido requiriendo apoyos conforme se han ido considerando necesarios y ha destacado la "unidad" y la "perfecta conexión" con la que están trabajando todos los cuerpos "para dar servicio a la ciudadanía".

El JEMAD anunció el lunes el inicio de las patrullas mixtas en 87 localidades de siete provincias, sin que se haya detallado cuál era ese despliegue territorial

Junto a la vigilancia en infraestructuras críticas y fronteras, el departamento que dirige Margarita Robles había previsto la posibilidad de que militares apoyaran a Policía Nacional y Guardia Civil en la "vigilancia de las leyes, disposiciones y mantenimiento de la seguridad ciudadana" mediante la realización de patrullas mixtas, a fin de que en las calles sólo se encuentren las personas que tienen una justificación.

Como informó El País, la ronda estaría bajo la dirección del representante de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado que intervenga, si bien los militares actuarían "bajo las órdenes de sus mandos naturales y bajo su propia responsabilidad".

En su disposición adicional quinta, el decreto por el que se regula el estado de alarma otorga a los miembros de las Fuerzas Armadas la condición de "agente de la autoridad" en el desempeño de las funciones que les han encomendado para tratar de frenar la transmisión del coronavirus.

En esta crisis, los militares se están empleando a fondo en la desinfección de residencias de mayores y otras instalaciones (como aeropuertos, estaciones de tren, hospitales y centros penitenciarios), la instalación de hospitales de campaña, labores humanitarias, descarga y reparto de material médico y suministro de alimentos y otros productos de primera necesidad, entre otras funciones.