El respirador diseñado por médicos e ingenieros andaluces ha empezado a fabricarse este miércoles en Málaga sin esperar a que el Ministerio de Sanidad hay concedido aún la autorización. "No podemos perder ni un minuto", ha justificado el consejero de la Presidencia de la Junta de Andalucía, Elías Bendodo.

Se trata de un prototipo desarrollado por investigadores del Instituto de Investigación Biomédica de Málaga (IBIMA), profesores de ingeniería de la Universidad de Málaga, médicos de los hospitales Regional de Málaga y Virgen de la Victoria y perfeccionado por una empresa de alta tecnología con sede en el Parque Tecnológico de Andalucía (PTA). La previsión es que se puedan fabricar medio centenar de respiradores a la semana.

El Gobierno andaluz espera que el Ministerio de Sanidad dé la autorización "en cuestión de horas" y dice que no van a "perder ni un minuto"

Como exige el protocolo, el modelo ha superado de forma exitosa distintas pruebas bajo la supervisión de una empresa certificadora, entre ellas las realizadas en humanos: una a un paciente ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital de Antequera y otra a un enfermo internado en el Hospital Virgen de las Nieves de Granada que, con insuficiencia respiratoria aguda por coronavirus, precisa ventilación mecánica.

Según ha informado la Junta de Andalucía, en la última se ha probado el electromagnestismo, de gran relevancia al incidir en la seguridad del dispositivo tanto para el paciente como para la interferencia con el equipamiento presente en una Unidad de Cuidados Intensivos (UCI).

En la comparecencia posterior a la reunión del Consejo de Gobierno, Elías Bendodo ha informado de que hace días que se envió ya toda la documentación al Ministerio de Sanidad para que la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios dé la autorización que permita iniciar la producción, sin que se haya recibido hasta el momento el "documento final".

Plan 15.000

"No vamos a esperar más y desde hoy ya se están fabricando en la provincia de Málaga los primeros respiradores para utilizarlos en el caso que sea necesario mientras esperamos el último documento que le falta al Gobierno de España para que podamos ponerlos en marcha", ha informado Bendodo. Éste se ha mostrado confiado en que la concesión de la certificación sea "cuestión de horas".

Según las fuentes consultadas por este diario, el Ministerio de Sanidad ha requerido la subsanación de diversos "flecos menores" cuando ha analizado la documentación necesaria para su homologación y que pueda empezar a fabricarse. En ese proceso participarán empresas de Sevilla, Jaén, Cádiz y Málaga, provincia en la que surgió la iniciativa.

Con todo, fuentes de la Junta han precisado que el Servicio Andaluz de Salud (SAS) -como responsable legal- puede hacer uso de este respiradores para atender sus pacientes aun sin la autorización de la Agencia del Medicamento. Esa homologación sí es necesaria para que estos dispositivos los pueda utilizar personas ajenas al SAS.

El titular andaluz de Presidencia ha puesto esta decisión como ejemplo de la "anticipación" con la que el Ejecutivo autonómico está gestionando la crisis de la covid-19 para no ir detrás del virus y minimizar sus efectos.

En este sentido, el Consejo de Gobierno andaluz ha adoptado otra medida importante en su decisión de este miércoles: activar el 'Plan 15.000' al rozarse ya la cota del escenario anterior, que se había situado en 9.000 positivos. Ello permitirá disponer de 20.000 camas hospitalarias y 1.000 camas de UCI.

Andalucía, sexta comunidad por casos

De acuerdo con los últimos datos conocidos, Andalucía acumula 8.997 contagios, lo que la convierte en la sexta comunidad con más incidencia tras Madrid, Cataluña, Castilla-La Mancha, Castilla y León y el País Vasco. El número de fallecidos asciende ya a 605, el 4,15 % del total.

El consejero de Presidencia ha precisado que, en este momento, hay 2.193 personas ingresadas en los hospitales andaluces, lo que ofrece una tendencia esperanzadora: a finales de marzo había 2.700. De los internados en la actualidad, 1.775 se encuentran en planta y 418 están en la UCI, por lo que la comunidad está lejos de que se saturen sus camas en cuidados intensivos.

Bendodo también ha indicado que otra de las prioridades es que la pandemia no se extienda entre la población que vive en las 1.038 residencias de mayores que hay en Andalucía. De los más de 42.000 residentes, el 85,8 % no presentan síntomas ni ha habido que aislarlos y en 1.080 casos hay sospechas de que puedan haber resultado contagiados. Un total de 177 han fallecido.