La Fiscalía de Madrid ha incoado unas diligencias de investigación para "determinar, esclarecer y concretar" los hechos presentados por el partido político Vox en la Fiscalía Anticorrupción contra el fiscal del caso Villarejo o Tándem, Ignacio Stampa. En su denuncia, el partido de Santiago Abascal consideró que el investigador pudo incurrir en un presunto delito de revelación de secretos por compartir información de la causa con la abogada de Pablo Iglesias, Marta Flor Núñez, concretamente sobre la pieza Dina en la que se investiga el robo del móvil de la exasesora del líder de Podemos en el Parlamento Europeo, Dina Bousselham, la aparición de un volcado de éste en casa del comisario José Manuel Villarejo y la publicación de mensajes de su interior en prensa.

Vox presentó como indicios de dicho delito las informaciones publicadas en prensa durante las últimas semanas, en las que se habló de una connivencia entre el fiscal aludido y la abogada de Pablo Iglesias, Marta Flor Núñez, con la que habría mantenido conversaciones, según la letrada, sobre la pieza Dina del caso Tándem antes incluso de que ésta se hubiera abierto por parte del juez.

La Fiscalía General del Estado abrió un expediente de investigación al fiscal Stampa tras publicarse dichas informaciones para esclarecer los hechos. Sin embargo, tras presentar la denuncia Vox, y atendiendo al artículo 5 del Estatuto Orgánico del Ministerio Fiscal, el curso de las diligencias de investigación penales se deben seguir ahora en la Fiscalía de Madrid, que tendrá que valorar si los hechos tienen o no relevancia penal. Mientras tanto, dicho expediente interno queda suspendido.

Decidirán si corresponde o no ir al TSJM

El fiscal superior de Madrid, Jesús Caballero Klink, firmó un decreto este miércoles en el que informó a la Inspección Fiscal de la incoación de las diligencias que dirigirá el teniente fiscal de Madrid, Carlos Ruiz de Alegría.

En éste, el fiscal superior aclaró que asume la investigación tras la denuncia "sin que suponga toma de postura sobre la existencia del hecho delictivo" y que se practicarán las diligencias de investigación conducentes a "determinar, esclarecer y concretar los hechos denunciados a que se contrae la referida documentación, nombrando al efecto Instructor de las mismas al Ilmo. Sr. Teniente Fiscal, quien una vez practicadas las pertinentes a los fines antes expresados, las elevará a esta jefatura con el correspondiente informe resumen-propuesta". Es decir, propondrá si corresponde proponer que se investigue al fiscal por presunta revelación de secretos en el Tribunal Superior de Justicia de Madrid o no.

La relación entre ambos ya se investigó

En febrero de este año, a raíz de una denuncia particular, la Fiscalía abrió un expediente interno al fiscal Ignacio Stampa para saber si su relación con la abogada de Iglesias y Dina Bousselham, en aquel momento perjudicados en el caso Villarejo, estaba dentro de los escenarios previstos para que el investigador se abstuviera por una incompatibilidad.

En aquél momento, la Inspección Fiscal determinó que no quedaba demostrada la relación y que, en caso de haberla, no era uno de los supuestos de abstención porque la relación de "amistad o enemistad" prevista para la abstención debe ser con la parte, es decir, con la propia Bousselham o Iglesias, pero no con su letrada.

Hace unas semanas, y tras publicar El Confidencial mensajes del equipo jurídico de Podemos -acusación popular del caso Villarejo en el que estaba presente Flor Núñez- la Fiscalía General del Estado acordó abrir un nuevo expediente de investigación interno al fiscal. En dichos mensajes publicados, la abogada trasladó que el fiscal se había reunido con ella y habrían acordado la estrategia para que el juez investigara el robo dentro de la trama de las 'cloacas' del Estado de Interior durante el Gobierno de Rajoy para perjudicar a Pablo Iglesias.

Sin embargo, según ha avanzado la investigación, el juez ha retirado la condición de perjudicado a Iglesias al descubrir que él mismo tuvo una copia del móvil de Bousselham tres meses antes que Villarejo y que no se la devolvió a su propietaria hasta casi seis meses después de recibirla. Además, cuando lo hizo, la tarjeta era inaccesible. Por otro lado, la propia Bousselham reconoció en sede judicial que ella misma había hecho los pantallazos de los mensajes entre miembros de Podemos comprometedores para Iglesias que acabaron publicados en prensa. Por lo tanto, la versión de las 'cloacas' se desvanece y también, según considera el juez, se "debilita" la posibilidad única de que Villarejo fuera el filtrador de dichos mensajes.