Andrea Levy es desde hace un año delegada de Cultura, Turismo y Deporte del Ayuntamiento de Madrid.  Sectores que están sufriendo de forma extraordinaria la crisis del Covid-19. 

Catalana afiliada al Partido Popular desde 2004, Levy es desde hace unos años una de las caras y voces más conocidas del partido dirigido por Pablo Casado con el cual siempre ha tenido una enorme complicidad. La misma complicidad y confianza que en este momento expresa por el Alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida

Siempre ha destacado por trabajar en equipo y considera que en los momentos de crisis es cuando la unidad es clave para superar los retos más importantes.

P.- Andrea Levy, estamos viviendo uno de los periodos más complicados de nuestra historia como sociedad, país y para cada uno de nosotros está suponiendo un reto importante. ¿Cómo lo estás viviendo desde tu cargo en el Ayuntamiento de Madrid?

R.- Estábamos acostumbrados a que siempre hubiera teatro, cine, ocio, deporte… y de repente el confinamiento. Una prueba durísima para todos y por supuesto también para el mundo del deporte, turismo y cultura. Pero es cierto que, a su vez, hemos utilizado la cultura como salida de este encierro, con música, series o películas que han hecho más ameno nuestro encierro forzado.

Esto fue lo que me dio fortaleza, todo el equipo comenzamos a pensar que podíamos hacer para salir de esta situación y recuperarnos pronto. Fue como surgió el “plan aplaude”, tras una reestructuración del presupuesto, yendo sector por sector, hablando con todos los protagonistas para conocer aquello que necesitaban para su recuperación. 

Me dio mucha energía hablar con ellos, conocer su Ilusión por salir de esta crisis devastadora, lo peor hubiera sido caer en esa sensación de impotencia. Ha podido la ilusión de saber que la cultura es necesaria, cada vez más imprescindible. 

P.- Me gustaría mucho saber como ves el futuro próximo.  Durante estas últimas semanas ha habido muchas protestas de los artistas en relación al tema de los aforos. Por ejemplo, han preguntado a los políticos porqué en el metro las personas pueden ir unas juntos a otras con mascarilla, incluso en el Congreso de los Diputados, absolutamente completo y sin respetar lo pactado cuando se acordó que solo podrían asistir el 50% de los diputados. Sin embargo, en el cine, teatro o conciertos, se ha de respetar a rajatabla unos protocolos que reducen drásticamente el aforo, ¿qué opinas de ello?

R.- En este país es necesario separar el ocio y la cultura, no es lo mismo una discoteca que ir a un concierto o al teatro, tenemos la manía de mezclar ambas.  Respecto a la cultura, son experiencias sensoriales, si nos autoimponemos medidas rígidas no la vivimos de igual manera, habrá quien prefiera escuchar música en casa que ir a un concierto con mascarilla en el que no pueda ni hablar.

La empatía es la mejor política, esto es lo que se ha practicado desde el primer momento en el Ayuntamiento de Madrid de la mano de Almeida

Quiero dejar muy claro que la cultura no contagia, nos ha cuidado y es vida, todos los que hemos sacado adelante programas como los Veranos de la Villa, espectáculos culturales o los conciertos de IFEMA, lo hemos hecho adoptando todas las medidas de seguridad para que podamos disfrutar de la cultura con total tranquilidad. 

Por lo tanto, no estigmaticemos los lugares culturales, echo de menos que los ministros del Gobierno defiendan el sector en este sentido. Entiendo su  rabia y la polémica, aunque creo que el sector está respondiendo de forma ejemplar y extraordinaria a los desafíos de estos tiempos tan complicados.

P.- Más que estigmatizar, lo que muchos artistas expresan es que la medida no es justa.

R.- Es cierto que, por ejemplo, las salas de conciertos en vivo, tan importantes en Madrid, en estos momentos no pueden abrir porque el sistema de aforos no permite hacer los conciertos con normalidad. 

De esa manera, se ponen unas restricciones que no corresponden con la realidad cultural, creo que es porque no se han dado cuenta de estas características que tiene el sector cultural, la experiencia de ir a un concierto es completamente emocional, se necesita un contacto que tiene que ser seguro, creo que no se ha pensado con esa sensibilidad en la realidad cultural, especialmente, en el momento de las reaperturas. 

P.- Llevamos ya un año de legislatura en el Ayuntamiento, sin ninguna duda, uno de los pocos actores positivos dentro de las autoridades e instituciones durante la pandemia, el Alcalde ha salido fortalecido y, en líneas generales, todos habéis estado a la altura de la situación, me gustaría que hicieras un balance de este primer año en el Ayuntamiento. 

R.- La empatía es la mejor política, esto es lo que se ha practicado desde el primer momento en el Ayuntamiento de Madrid de la mano de Almeida. La empatía con los ciudadanos, hablando con total libertad, tratando a la gente como adultos y manteniéndose cercanos a todo lo que sucedía. 

La moción de censura de Vox es una prueba más de las políticas de quién está más pendiente de conseguir minutos de televisión que de hacer política de verdad

Almeida visitó todos los lugares, haciendo esa política de la empatía, fue lo que él nos pidió en el momento de los pactos, que supiéramos empatizar con el resto de los partidos y dar esa lección de altura a los ciudadanos de Madrid. La verdad es que la política de la empatía ha sido el éxito de Madrid a diferencia de otras instituciones del estado como el Congreso de los Diputados.

P.- ¿Cómo valoras la moción de censura que Vox y Santiago Abascal presentarán en septiembre contra el Gobierno?, ¿se ha dicho que es una moción de censura contra Pablo Casado, más que contra Sánchez y su Gobierno? 

R.- La moción de censura de VOX y Abascal, es una prueba más de las políticas de quién  está más pendiente de lo superficial, efímero, de los focos y conseguir minutos de televisión más que de hacer política de verdad. Esta moción está abocada al fracaso y llega a destiempo, en un momento en el que los ciudadanos están preocupados por otros temas, como los rebrotes y la incertidumbre económica, lo peor que se puede hacer es entrar en un juego político como este. 

Aquellos políticos que no se muestren útiles acabarán siendo castigados por los ciudadanos, es tal el malestar de la sociedad que los políticos no podemos restar más. Necesitamos sumar y pensar en los ciudadanos y no en las estrategias de partido. 

P.- Una de las grandes polémicas que hemos tenido durante estas semanas es la famosa “cartilla Covid”, idea que prácticamente ha sido lapidada por casi todos los expertos, incluida la OMS. ¿Qué opinión te merece esta medida, considerada como experimental? ¿Estamos para experimentos?

R.- Me da la sensación de que España es un país que se autoimpone fronteras internas, por ejemplo, Galicia anunció que los visitantes deberán registrarse en la web de la Xunta, Madrid anunció estas medidas, Cataluña está entre un nuevo confinamiento o no. No puede ser que los gobiernos autonómicos impongan estas fronteras internas con medidas sanitarias, no podemos convertir España en un reino de taifas. Todas estas medidas están creando desconfianza.

No puede ser que los gobiernos autonómicos impongan estas fronteras internas con medidas sanitarias, no podemos convertir España en un reino de taifas

P.- A propósito de desconfianza, la impresión de los que vivimos en el centro de las grandes ciudades es que están vacías, no vemos turistas, ¿qué opinión tienes de esta situación tan dramática? Parece que las medidas adoptadas por otros países en contra del turismo español obedecen solo a razones económicas, ¿es así? Desde luego la bajada del número de turistas en junio de un 97.7% es una cifra dramática.

R.- La caída del turismo en la ciudad de Madrid es todavía más dramática, es del 99%. Esto hace que la subsistencia de muchos de los establecimientos madrileños este comprometida. Para colmo, nos encontramos con el desprecio del sector turístico por parte de algunos de los miembros del Gobierno. 

Apostar por el turismo no significa que España no pueda ser líder en otros sectores, pero por qué renunciar al 13% de nuestro PIB, que representa un millón y medio de puestos de trabajo en toda España. No podemos tener a miembros del Gobierno animando a no venir a España.

P.- ¿Hablas de Fernando Simón?

R.- Sí, hablo de las palabras de Simón y de la ministra de Exteriores, el mensaje que se debe trasmitir es el contrario. Por ejemplo, de los diez millones de turistas que recibía Madrid, la mayoría eran estadounidenses, un mercado que ahora está cerrado por la situación en su país, aquí sí entendemos que se cierre la puerta, pero, con nuestros socios cercanos, Portugal, Francia, Italia… las medidas deben ser diferentes. 

Viajar a España debe ser tranquilo y seguro, nos hemos autoimpuesto medidas sanitarias, los propios ciudadanos han sido muy responsables, no hay nadie sin mascarilla por las calles, además, contamos con un servicio sanitario excelente.

No podemos olvidar todas las medidas de prevención que debemos seguir implementando, no es posible que Madrid no tenga los rastreadores necesarios, tampoco que no se hagan pruebas PCR en el aeropuerto. La mejor manera de protegernos es imponernos nuestras propias medidas, ser nosotros mismos quienes controlemos la seguridad.

La mejor manera de protegernos es imponernos nuestras propias medidas, ser nosotros mismos quienes controlemos la seguridad

P.- Por un lado, los ciudadanos deben cumplir con su responsabilidad y lo están haciendo, por otra parte, las autoridades deben hacer lo mismo y en ocasiones no lo estamos viendo así. Por ejemplo, aún no contamos con los rastreadores suficientes, perdiendo unos meses esenciales, hasta hace unos días teníamos uno de cada cuatro rastreadores necesarios para la ciudad de Madrid, ¿por qué estos retrasos?

R.- Contratar rastreadores no es complicado, ni siquiera tienen que ser personal sanitario. Hay que hacer una política constructiva y si se comenten errores se deben reconocer. Uno de los éxitos de Almeida ha sido transmitir esa certidumbre en momentos de caos, reconociendo nuestras limitaciones y poniendo en claro el trabajo que estamos haciendo. 

Es cierto que los rastreadores debían haber llegado antes, pero también debemos recordar que Madrid se adelantó en muchas otras medidas como las mascarillas gratuitas. Estamos en una fase en la que la prueba error ya no es admisible, hay que ir a hechos probados, de lo contrario llevaremos al país a la decadencia.

P- Hablemos de los Veranos de la Villa, visto el panorama actual, seguro que serán muy diferentes. 

R.- Cuando comenzamos a prepararlos, no imaginamos todo lo que vendría, lo que siempre tuvimos claro es que los Veranos de la Villa se debían celebrar para recuperar una ilusión tan importante en estos momentos. Hemos hecho unos Veranos de la Villa seguros, la cultura no contagia, hemos preparado todas las instalaciones respetando las medidas de seguridad y sanidad para proteger a los visitantes.

Madrid ha tenido esa solidaridad de la que hablamos, es importantísimo no perder la fe y los madrileños no la han perdido

Será solo un mes y en un único lugar, pero con mucha variedad, muchos estilos de música y apto para cualquier edad. Me gusta resaltar un evento relacionado con la serie Pose, en los Veranos de la Villa podremos encontrar una versión castiza, contará con su propia pasarela, creando un espectáculo que rinde homenaje a nuestra tradición. 

P.- Para acabar esta entrevista con una nota de positivismo, ¿es posible que entre todos podamos recuperar una “movida madrileña” alegre, solidaria, que reactive la situación? 

R.- Esta pandemia ha hecho que dejemos de mirar hacia abajo, constantemente mirando al móvil, para empezar a mirarnos a los ojos. Nos hemos mirado de balcón a balcón, preocupándonos por si el vecino necesitaba algo, la mirada es lo único que vemos a través de la mascarilla. Esa mirada directa a los ojos trasmite ilusión, esto se ha convertido en algo esencial, Madrid ha tenido esa solidaridad de la que hablamos, es importantísimo no perder la fe y los madrileños no la han perdido.