El Gobierno de Pedro Sánchez ha gastado desde 2018 muchos más fondos para anunciarse que su predecesor, el de Mariano Rajoy. Su inversión ha sido especialmente elevada desde el inicio de la pandemia de covid-19 y sólo en 2024 prevé un gasto de 138,2 millones de euros en este concepto.

Este periódico preguntó el pasado 29 de diciembre a través del Portal de Transparencia acerca de la cantidad de campañas que han recibido las principales redes sociales y plataformas tecnológicas de contenidos de entretenimiento durante los ejercicios 2018, 2019, 2020, 2021, 2022 y 2023.

El Ejecutivo decidió responder a la petición de forma segmentada. Es decir, envió la cuestión a cada ministerio para que detallara los datos. El más transparente de todos ha sido, sin duda, el de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, que ha remitido una serie de tablas con el gasto que ha realizado durante estos ejercicios por cada medio, agencia y empresa de comunicación.

Este departamento está actualmente encabezado por Pablo Bustinduy y sus antiguos moradores fueron Pablo Iglesias, Ione Belarra y, en el caso de Consumo, Alberto Garzón. Según los datos que han proporcionado, durante estos años han repartido en este concepto alrededor de 7,5 millones de euros.

Diferentes campañas institucionales

La campaña mejor dotada data de 2023 y se tituló Un país que nos cuida. Su importe ascendió a 1.617.292 euros, de los que 818.814 se los llevaron las televisiones, 380.410, las empresas de internet y 418.067, las de cartelería exterior. La distribución por medios de comunicación fue la siguiente:

Hay que recordar que las Administraciones de todo tipo y ámbito -así como las empresas públicas- recurren a la herramienta de la publicidad institucional para difundir sus mensajes entre los ciudadanos. En algunos casos, estas campañas se emplean para ofrecer información sobre asuntos burocráticos, como la que versa sobre el calendario anual para realizar la declaración de la renta. En otros, el dinero se destina a publicidad de un carácter más ideológico.

Durante los últimos años, han sido diversas las acusaciones a los gobiernos central y autonómicos de premiar a la prensa más cercana y castigar a la más crítica a través del reparto de estos fondos. Todo, pese a que generalmente se recurre a centrales de medias para intermediar en el proceso.

La segunda campaña más importante del citado ministerio se lanzó en 2022 con el título Un país mejor con la Agenda 2030. Las televisiones recibieron 561.104 euros de estos fondos, frente a los 265.842 de las empresas de publicidad exterior, los 209.498 de las de internet, los 125.779 de los cines, los 110.806 de las radios y los 110.274 de la prensa.

En el ejercicio 2023 -con Belarra al frente de este departamento ministerial-, se distribuyó entre los medios de comunicación una acción publicitaria titulada Sensibilización contra la violencia hacia la infancia y la adolescencia, cuyo presupuesto fue de 989.639 euros.

Las mayores beneficiadas fueron las televisiones, que acapararon 545.435 euros, mientras que los medios de internet, 220.428; y las empresas de cartelería, 223.775.

También en ese año se puso en marcha la campaña Pelea el futuro, con un importe total de 911.131 euros, de los que 496.230 fueron a parar a las televisiones.

Este ministerio -que incluye Consumo- cuenta en 2024 con un presupuesto para publicidad institucional de 9,2 millones de euros. El de los años precedentes era bastante mayor de los 7,5 millones de euros que se han revelado en estas tablas, de ahí que la información que se ha proporcionado en Transparencia esté incompleta.