Inés Madrigal, la primera víctima de bebés robados reconocida por los tribunales, ha desvelado que después de 32 años ha encontrado a su familia biológica, gracias a una banco de ADN estadounidense que le puso en contacto con un primo segundo, que le informó de que sus hermanos biológicos también la estaban buscando. También, que está le ha asegurado que no fue una bebé robada sino que su madre biológica, que falleció en 2013, la había entregado voluntariamente en adopción.

De esta manera, la Fiscalía Provincial de Madrid ha recalcado su criterio de que Inés Madrigal, la mujer que llevó a juicio el primer caso de bebés robados en España, fue dada en adopción de "forma voluntaria", tal y como le manifestaron en marzo su tía y hermanos biológicos. En un comunicado, el Ministerio Público recuerda que incoó diligencias preprocesales el pasado 21 de mayo a raíz de la información facilitada por la propia Inés Madrigal de forma oral y escrita.

En esa comunicación, detallaba que en el mes de marzo de este mismo año había podido contactar con sus verdaderos hermanos por parte de madre y con una tía carnal quienes le "confirmaron" que fue "voluntariamente" entregada en adopción. La Audiencia Provincial de Madrid absolvió al doctor Eduardo Vela Vela de los delitos de detención ilegal, suposición de parto y falsedad documental al declarar prescritos los hechos investigados. La sentencia fue recurrida ante el Tribunal Supremo, que aún no ha resuelto sobre el caso.

El pasado mes de marzo, según relató a la Fiscalía, Inés Madrigal contactó con estos familiares y le trasladaron que su madre biológica había fallecido el 22 de enero en Madrid. El mismo día de su comparecencia ante el representante del Ministerio Público aportó el resultado de una prueba comparativa de ADN realizada por una empresa estadounidense que vino a confirmar que ellas y F. J. R. C. eran "medio hermanos".

Su madre la había entregado "voluntaria y conscientemente" en adopción

Dicha prueba se la hizo porque a principios de año recibió un informe en el que se indicaba que tenía un primo segundo en España. Tras contactar con él, empezaron a explorar las posibilidades acerca de qué parte podía ser familia directa y tras varias gestiones se puso en contacto con F.J.R.V. que era primo del primo de Inés Madrigal. A través de Facebook en diciembre de 2015, este primo ya había remitido un mensaje a Inés Madrigal en el que le preguntó si podía ponerse en contacto con él porque buscaba a un bebé nacido a principios de junio de 1969 en la Clínica San Ramón. Inés Madrigal nunca llegó a leer estos mensajes en 2015 pero tras contactar con su primo los releyó y encontró el de F.J.R.V. con quien contactó el pasado 4 de marzo.

Dado que la mujer declaró que su tía la había entregado "voluntaria y conscientemente" en adopción, la Fiscalía acordó requerir muestra genéticas a los cuatro nuevos familiares y procedió a interrogarles. Durante su comparecencia en calidad de testigos todos ellos reconocieron la entrega en adopción del bebé sin saber si era niña o niño. Sobre esta decisión la tía de Inés confirmó que le conocía desde el mismo momento en que su hermana le dijo que estaba embarazada mientras que a sus hermanos fue también su madre biológica quien les comunicó que tenían una hermana mayor que había sido entregada en adopción.

Los resultados en el índice de parentesco indican que es 78.802 ves más probable

Así las cosas el pasado 3 de julio la Fiscalía recibió un dictamen del Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forense en el que una vez analizados los perfiles genéticos de Inés Madrigal con el de su tía y sus tres hermanos precisaba que "los resultados en el índice de parentesco indican que es 78.802 ves más probable la compatibilidad genética observada si considera que Inés Elena Madrigal Pérez es hija de la supuesta madre (cuyo patrimonio genético ha sido deducido a partir de los perfiles genéticos de aquéllos) frente a que lo sea una persona tomada al azar de la población y no relacionada genéticamente con ella".

Con estos resultados y con las declaraciones de los testigos la Fiscalía considera que debería quedar excluido como hecho probado el robo de un bebé "y con ellos el delito de detención ilegal". En este sentido añade: "Es por ello que las presentes diligencias preprocesales penales se entiende de interés para el procedimiento, bien sea durante la tramitación del recurso de casación, ahora pendiente de deliberación y fallo, bien posteriormente a la firmeza de la sentencia respecto del eventual recurso de revisión".