Poner en marcha una empresa es muy fácil. Cualquiera puede hacerlo. Lo complicado es que se mantenga, y sobre todo, hacerla crecer. Tradicionalmente, en un mundo en el que había muy pocas opciones para prácticamente todo, crecer era tan sencillo como vender más, que tenía que ser necesariamente lo normal.

Poco a poco los mercados se han ido inundando de todo tipo de ofertas, recibimos más de las que podemos atender, y conseguir mantenerse ya es un éxito. Sin embargo, observamos cómo hay multinacionales con enormes índices de crecimiento, que han sabido adaptarse a este mundo saturado. ¿Cómo lo han conseguido? Porque existen profesionales que se dedican exclusivamente a hacerlas crecer. Estudian científicamente cómo implementar metodologías que conduzcan a conocer bien lo que funciona y lo que no, para poder incluso predecir resultados a corto, medio y largo plazo.

En España también existen estos extraños seres. Uno de ellos fue pionero, y ha sido elegido por la revista Forbes como una de las 100 personas más creativas en los negocios. Juanma Varo vive como quiere, en Canarias, claro, y con más de 70 personas a su cargo, que teletrabajan para hacer crecer a sus clientes. Empresas como Zara o Sony Music lo han podido comprobar.

Pregunta.- Mucha gente trabaja duro en su negocio sin considerar el método científico para el crecimiento empresarial. ¿Es posible aplicar ese método para el éxito profesional?

Respuesta.- No solo es posible, es necesario. ¿Si no usamos un enfoque científico, en qué nos basamos? Llevo ocho años aplicándolo con éxito.

P.- Eres un pionero en este campo, ¿cómo comenzaste?

R.- Me inspiré en cómo la tecnología ha cambiado el mundo y en las empresas de Estados Unidos que crecían enormemente. Observé que tenían equipos de growth [crecimiento], y me di cuenta de que eso era lo que faltaba en España. Esas empresas contaban con perfiles pioneros que no encajaban en departamentos convencionales. Eran los growth hackers, que buscaban formas innovadoras de crecer y tenían una visión global del negocio, lo que les permitía encontrar esos "golpes de hacha" (hacks) que generaban un gran impacto. Decidí que podíamos hacer lo mismo aquí.

P.- Hablemos de este growth hacking. ¿Qué le dirías a alguien que cree que no hay que complicarse mucho, que más clientes siempre significan más crecimiento?

R.- Les preguntaría cómo crece su negocio específicamente. Muchos no saben responder. Un negocio es como un reloj: lo que ves es la hora, pero lo importante son los mecanismos que no ves. Hay que entender esos mecanismos internos, ya que pueden revelar oportunidades y fortalezas que no habías considerado antes.

P.- Parece una forma de tomar el timón de las empresas basada en datos más que en apreciaciones, pero muchas veces dejamos que sean las circunstancias las que nos llevan a un punto o a otro. ¿No crees que muchas personas navegan sin rumbo en su vida profesional?

R.- Exacto. La ciencia y la tecnología nos han dado herramientas para aplicar métodos científicos a muchos aspectos de la vida, incluyendo el profesional. Tener datos nos da poder, pero muchas veces se toman decisiones sin objetivos claros o sin analizar toda la información disponible. Los datos son más valiosos y menos costosos que las opiniones.

P.- Me lo quedo. Es muy bueno. Es una frase muy sabia. ¿Cuántos años tienes? ¿Te consideras joven?

R.- Tengo 34 años y sí, me considero joven.

P.- ¿Cómo es explicar a gente más experimentada que te pueden doblar la edad cómo dirigir sus empresas siendo tan joven?

R.- Al principio fue difícil ser tomado en serio, especialmente a los 25 años. Con energía y datos, afronté mucho escepticismo. Pero con el tiempo, todo cambió. Aprendí que es crucial colaborar, usar la experiencia y los datos para experimentar y predecir. Me gusta ser pionero, impulsando cambios pese a los desafíos.

P.- ¿La experiencia es la mejor maestra, incluso de los fracasos?

R.- Exactamente. En la ciencia y en la vida, fallar significa simplemente descartar opciones que no funcionan, acercándote al éxito.

P.- ¿Tu éxito es medible en términos de datos?

R.- Sí. Por ejemplo, trabajo en Product Hackers, y somos pioneros en ofrecer equipos de growth a otras empresas. He crecido con la compañía de 13 a más de 70 personas. Vivo donde quiero, en Canarias, y para mí el éxito incluye satisfacer mis necesidades y tener un impacto positivo en los demás.

P.- Tradicionalmente identificamos el éxito con el poder económico o la influencia. ¿Cómo lo mides tú?

R.- El dinero es importante, pero no es mi objetivo final. El éxito para mí son mis relaciones, mi salud y mi felicidad. La verdadera pregunta es qué te hace feliz y si tienes un plan para lograrlo. Eso representa un cambio de mentalidad esencial.

P.- Me gustaría que analizases un caso concreto, para poner un ejemplo que no es de una gran corporación. Se trata de Mapi Hermida, alguien que, además de ser la directora de comunicación de Dia, tiene también un proyecto personal llamado La Gastrónoma. Tiene un pódcast con una audiencia respetable, unas redes sociales y página web con bastantes visitas, pero se pregunta cómo puede crecer, más allá del éxito de audiencia.

R.- Hay tres preguntas clave para cualquier negocio: cómo atraer a la gente, cómo hacer que regresen y cómo monetizar el valor que entregas. Para Mapi, primero debe definir su modelo de negocio y su valor único. Luego, identificar dónde está su audiencia y quiénes son. Debe comprender sus necesidades y deseos y cómo puede resolver sus problemas. A partir de ahí, debe priorizar sus ideas basadas en impacto, confianza y recursos, y adoptar un enfoque de experimentación iterativa: probar, aprender y ajustar. 

P.- Explícanos el concepto de “modelo iterativo”.

R.- El modelo iterativo implica aceptar que el fracaso es parte del proceso. Cuando algo no funciona, tienes dos opciones: abandonar la idea o “iterarla”, es decir, ajustar y mejorar tu enfoque. Por ejemplo, si pones una lona en una avenida y no obtienes los resultados esperados, debes analizar: ¿Fue el canal incorrecto, la imagen poco atractiva, o faltó un código QR para interacción? La iteración es especialmente poderosa en lo digital, donde puedes hacer ajustes continuos.

P.- Es admirable ver a Mapi Hermida, una directora de comunicación con un puesto consolidado, impulsando un proyecto personal. ¿Esa es la mentalidad hacia la que vamos?

R.- Definitivamente. Es crucial hacer cosas fuera del trabajo que nos llenen, ya sean relacionadas con nuestro negocio o simplemente para bienestar personal. Es importante estar activos porque tenemos muchas horas en el día para hacerlo.

P.- Muchos verán esto casi como ciencia ficción, aunque el panorama actual es muy distinto al de hace unos años. ¿Cómo ves el futuro del emprendimiento en España y en el mundo?

R.- Soy un optimista nato y creo que los optimistas construyen el futuro. Veo a España, con el tiempo, volviéndose más optimista y empoderada. Hay un cambio de mentalidad significativo; gracias al deporte o a la ciencia, cada vez más, se reconoce que aquí hay talento.